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Génova, 11
Madrid (Chamberí)
Alonso Martínez (L4 y L5)
91 310 28 48
15 - 25
Restaurante dedicado a la cocina mediterránea a un precio asequible para cualquier bolsillo en un local apacible. Conviene reservar el fin de semana para no llevarse una sorpresa, aunque dispone de capacidad para 230 comensales distribuídos en dos plantas. Cierra los domingos.
2,9
Rayo: Ambiente muy tranquilo para un lugar acogedor. Aunque nosotros cenamos en la planta baja (la de no fumadores) y el calor llegó a ser insufrible. Sin duda alguna, estaban más “fresquitos” los de arriba. En mi opinión, es una pena que dejen las mejores zonas a los fumadores, obviamente, porque yo no fumo.
La relación calidad/precio es muy buena, pues en plena calle Génova, un local llamativo en el que salgas satisfecho por unos 18 euros/persona -sin vino-, es más que asombroso. De todos modos… caemos en lo de siempre: cuando el precio es barato, de alguna pata cojea el local.
Los primeros han sido geniales, lo mejor de la cena, “rico rico” como diría quien todos sabéis. Los huevos estrellados de Plaza 66 estaban realmente deliciosos (no es habitual que estén tan sabrosos en otros establecimientos, dudábamos si pedirlos o no).
La Pizza Plaza 66, que lleva tomate, mozzarella, bacon, ternera, cebolla y pimiento verde, estaba de lujo. Al igual que la Carbonara que pedimos para compartir, la verdad es que nos sorprendieron todos y cada uno de los primeros, incluso la ensalada (de pollo y bacon con cebolla caramelizada y vinagreta de Módena), que era de un tamaño considerable.
Los segundos… ya son otra historia. La Gran parrillada de carnes con salsa barbacoa (mínimo 2 personas) era grande en apariencia, pero la carne… estaba demasiado hecha y cortada muy delgada cubriendo el tumulto de patatas fritas y ensalada. Y respecto al sabor… ni fu ni fa… Pero el plato impresionaba -algo que le gusta a mucha gente-, todo hay que decirlo, aunque personalmente… me quedo con una cocina más sabrosa que deleite el paladar más que los ojos.
Comentando con mis compañeros, parece ser que lo mismo sucedía al resto de platos. El Confit de pato con verduritas y melocotones un poco duro, el Lomo de bacalao en confit con setas y ajos muy escaso, el Taco de atún fresco a la parrilla con aroma de tándori tampoco sobresalía… En fin, que nos quedamos con los primeros.
Respecto a los postres, muy bueno el yogurt griego con crujiente de caramelo, aunque ni comparación en sabor al del Delfos. Del resto, que al parecer también cojeaban un poco, ya os hablan mis compañeros.
Como curiosidad, comentaros que todo el local, tanto la parte externa como el interior, está decorado en tonos negros, blancos y azules, que dan un tono de color muy reconfortante, lo que no entiendo… es por qué la carta es verde.
FlashBack: Llegamos esta vez a un restaurante muy bien ubicado. Entre las zonas de marcha de Alonso Martínez y Castellana. Encontramos una decoración sencilla pero adecuada.
A pesar de poseer el nombre del interesante rascacielos que ayuda a configurar el horizonte de Sanghai, lo que podremos degustar en él es lo que vienen a llamar cocina mediterránea. Una conjunción entre restaurante italiano, español y americano. Es decir encontraremos ensaladas, pizzas, carnes, pescados e incluso parilla y barbacoa.
Llama la atención el desorden de la carta. Encontramos todas las opciones entremezcladas a excepción de los postres. Lo cual es una invitación a compartir platos e incluso a elegir las combinaciones y cantidades con total libertad. Sin embargo en muchos casos puede llegar a provocar desorientación. Si lo que deseas es tener doble curso, índicale al encargado cuando te tome la petición que deseas en primer y segundo lugar.
En cuanto al ámbito más propiamente gastronómico hay que reconocer que las pizzas no estaban nada mal, siendo un ejemplo la Pizza carbonara. Una buena opción es pedirlas como comienzo para compartir acompañadas de alguna que otra ensalada o entrante de verduras.
Entre los que se podrían deducir como principales destaca la Gran parrillada de carnes con salsa barbacoa. Muy grande en cantidad pero, y aunque una buena carne a la barbacoa siempre debe servirse churrascada, nos la encontramos demasiado seca y con poco gusto.
Otra de las opciones mediterráneas es el Lomo de bacalao en confit con setas y ajos. Apropiada si eres amante de los productos del mar. Sin embargo, debe tenerse en cuenta su reducida porción puesto que es dificil que sea el centro sobre el que gire el resto de tu cena.
Lo mismo se podría decir del Taco de atún fresco a la parrilla con aroma de tándori. Deducible que fresco no era el mejor calificativo aunque el sabor era adecuado.
Y, por fin, llegamos a la guinda de la cena: los postres. Mi elección entre todos sería la Crema catalana sobre helado de turrón. Una buena porción, muy bien presentado y la combinación de sabores perfecta. Sin embargo, fue un fallo que -si quitábamos el helado, el caramelo y la típica azúcar quemada- la base estuviera tremendamente grumosa.
Se podría decir que estamos ante un establecimiento ni bueno ni malo, ni bonito ni feo pero sí barato.
Ninillas: Una vez más queda confirmado que cenar bien en Madrid por menos de 24 euros es una utopía.
Restaurante Plaza 66, situado en los aledaños de la Plaza de Colón, auténtico sabor mediterráneo con una carta muy variada que va desde ensaladas, hasta pizzas y pastas, pasando por pinchos y carpaccios.
Y hasta aquí todo va bien, porque entras y efectivamente es un restaurante con cocina mediterránea, con una decoración acorde y buen ambiente.
Te sientas y oye, mantel y servilleta de tela, lo agradezco enormemente. Hasta ahora no hay objeción.
Nos sentamos y piiiiiiiiiiiiii, me tenía que tocar a mí, tenedor y copa sucios… en fin: ¿Podría cambiarme los cubiertos y la copa?, bueno esto puede pasar, no debería, pero no seamos tan exigentes.
De bebida, agua, porque el coche no perdona, si pido una jarrita, vale es cutre, pero el agua de Madrid es buena. La respuesta del camarero al hacer la petición: “Tenemos terminantemente prohibido servir jarras de agua”. Coño, ya van dos, esto no lleva buen camino. Qué le vamos a hacer, una botellita de agua.
Pedimos los entrantes, mi elección: ensalada de pollo y bacon con cebolla caramelizada y vinagreta de Módena, no tardan mucho en traerlo, la cantidad está bien, aunque la presentación un poco pobre. La elaboración es buena, todo sabe como se presupone: el pollo a pollo, el bacon a bacon… Vaya, el entrante está bien.
Pasamos al segundo: Confit de pato con verduritas y melocotones, pues tiene buena pinta, las verduritas y el melocotón están bien. Primer bocado de pato, pues va a ser que no, este pato está durillo, bueno más que durillo hay que masticarlo bastante, paso ya de tantas diligencias: el entrante bien, pero el pato no hay quien lo trague.
Me quedan los postres, yo quiero: Todo chocolate, y sí, efectivamente llevaba chocolate y mucho, pero aquello no había quien lo tragara, no es que estuviera tremendamente empalagoso, que lo estaba, es que creo que la colonia era uno de los ingredientes. De los postres que probamos el único que salvaría es el yogurt griego con crujiente de caramelo, un poco light, pero comible, así como el Sorbete de limón y vodka, que se podía beber. De los profiteroles, desde luego los nuestros estaban completamente congelados, así que lo único que podría comentaros es el estado de nuestras encías al comerlos.
De modo que, Restaurante Plaza 66, situado en los aledaños de la Plaza de Colón, auténtico sabor mediterráneo con una carta muy variada que va desde ensaladas, hasta pizzas y pastas, pasando por pinchos y carpaccios. Ahora bien, para comer decentemente, yo pediría entrantes de primero y segundo: una ensalada y pizza o pasta. De los postres mejor olvidarnos.
Cucharete: Local con cocina mediterránea recomendado siempre y cuando la exquisitez esté en un segundo plano para tu paladar. Muchísimo mejor los primeros que los segundos, y los postres, ni fu ni fa. Algo natural cuando el precio baja de los 20 €. Mi equipo cenó por 18 €/persona.
La armonía de colores en su decoración. Sus entrantes. Su precio realmente ajustado. Admiten cheques de comida.
El calor que hace en la planta baja (no fumadores). No sirven jarras de agua. Los segundos platos.
2,9
15 comentarios a “Plaza 66”
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Cocina mediterranea? Si ellos lo dicen será verdad. La sección de no fumadores es un zulo, para variar, la carta un cristo indescifrable, la pizza podía tener los trozos más grandes, pero no cabrían en ella, el segundo había que buscarlo en el plato y los postres, en fin, con dolor de muelas mejor ni pedirlos.
Lo mejor, la columna que impedía sentarse comodamente, aunque a los de la mesa redonda les tocó al lado de una puerta de servicio, con el camarero entrando y saliendo.
Vamos, que por probar, mejor pedir fumadores, que igual la cosa es mejor.
No está mal el local, salvo por que los platos no saben a nada, bueno, los que yo pedí, pero por ese precio, tampoco seamos sibaritas.
La pizza estaba aceptable, la ensalada de lo más normal y la carne, bueno, sabía toda igual y algo carbonizada, pero me reitero, el precio es un gran punto.
Si buscas algo del otro jueves, aquí no hay de eso, pero para pasar una velada de risas, puede valer.
Pues yo ya he ido dos veces, y estando donde está, la relación calidad precio me parece increíble. Comida muy muy rica, a precios asequibles.
Hola!
Yo estuve hoy sabado 8 con un grupo de 14 amigos.
Resulte que los llevé siguiendo la sugerencia que hacían, incluso las fotos de los platos prometía mucho…. pero… les cuento…
Llegamos los 14 amigos y nos afreció un menú, sin posibilidad de optar a pedir por carta, quizá porque fuimos un grupo muy grande.
Vale, nos acoplamos y pedimos los platos del menu.
De entrante pedimos el plato de la foto “ensalada de pollo y bacon con cebolla caramelizada y vinagreta de Módena”, y la verdad que no fue tan abundante como la de la foto; pero se dejo comer.
De segundo muchos pidieron entrecot. LE saque fotos que dan fe de lo digo… de sabor bien, pero el tamaño del entrecot era el de un escalopin. De echo, uno de ellos lo devolvimos.
Pero nos pasaron 3 cosas que fue para decir NO VOLVEMOS MAS.
1.- a 2 personas le sirvieron la comida en platos sucios! así como se les cuento.
2.- un plato de pescado (no recuerdo que pescado en concreto) estaba crudo, lo reclamamos y volvieron a trear otro cuando ya estabamos pidiendo los postres.
3.- la mitad de la mesa comia 10 minutos más tarde.
Para gustos colores, pero nosotros no volvemos.
Holaaa!!
Yo cene ayer viernes por primera vez en Plaza 66. La verdad es q nos encanto el local. Bien situado, bien decorado… Lo mejor, sin duda, el trato que recibimos por parte de los empleados. Nos orientaron perfectamente en lo que pedimos y no dejaron de estar pendientes de nosotros pese a que el restaurante estaba lleno!!La verdad es que esto se echa de menos en muchos locales de madrid(sobre todo las franquicias), donde no tienes trato alguno con los camareros y te sientes uno mas.Anoche, de alguna forma, nos hicieron sentirnos especiales.De primero pedimos una pizza para compartir que estaba deliciosa, de las mejores que he probado. Los segundos, bien es cierto, perdieron un poquito pero no decepcionaron en absoluto. Los postres abundantes y bien elaborados. La relacion calidad-precio, para mi, fue excelente.Les animo a probarlo
soy un chico de valencia he estado vastante tiempo trabajando por madrid y a mis compañeros y a mi nos gustaba mucho ir a este restaurante se come muy muy bien y de precio esta increible os recomiendo ir a probar el meloso de buey y la crema catalana.cuando vuelva repetire.
Calidad/precio no hay mejor..vamos que para exigentes solo puedo decir que paguen un pokito mas para comer.
Es una alternativa a las franquicias tipo
referencia a otro restauranteen relacion al precio, y la comida mas sana que la de estos sitios.La carta es variada y recomiendo no pedir cosas complicadas, puesto que en estos platos es mas facil que pinchen.
Si lo recomendaria en estos tiempos que corren.
Estuve ayer en el restaurante Plaza 66 con un grupo de 64 personas.
Ciertamente, los primeros fueron mejores que los segundos. Los postres, o al menos mis profiteroles muy buenos.
Se niegan a servir jarras de agua y me parece un detalle feo, pero…
A mi parecer, lo mejor, los camareros. Siempre atentos, amables, detallistas… VUELVO SEGURO!
El tiempo de espera, una eternidad. El trato nefasto, el servicio un desastre. Te sirven la comida y al ratazo te traen el pan, sin la bebida, la cual tienes que pedir en varias ocasiones. Se cofunden con los platos que has pedido, y digo bien lo de platos, porque la comida que hay en ellos es tan escasa que apenas se ve. Te meten prisa para que termines y asi volver a ocupar tu mesa. La cuenta la traen sin haberla pedido, junto con el postre y cuando aun estas en los segundos platos. Ah!! Y como se te ocurra hablar con el “encargado” encima de ser un mal educado, prepotente, insiste en que no tienen la culpa ya que “son errores humanos al igual que tu no eres perfecto”, ellos tampoco (palabras textuales)
Mi recomendación, por el precio que cuesta, que tampoco es de los mas baratos, hay sitios infinitamente mejores
hola a todo el equipo de plaza 66, he comido ya varias veces y siempre acabe contenta. el trato de todo el personal a sido impecable. animo a la gente a probarlo, pero si aconsejo que no sea a las 14:30, porque la gente hace cola en la calle. POR ALGO SERA…
Hola, el viernes pasado hicimos la cena de navidad de Online Marketing en este sitio, el lugar no está mal, pero debo decir que no cenamos apenas nada, la comida es terrible, las raciones son muy escasas y encima lo poco que se sirve no tiene sabor de nada, intentamos remediarlo poniendo sal, pimienta, aceite, vinagre, pero solo conseguiamos que supiera a eso mismo que poniamos, y para la pasta que cobran por ella es una pena, asi que antes de pensaros en visitar este sitio para una reunion, primero vayan solos a probar la comida para que asi podais seguir buscando otro lugar con una comida descente que en madrid los hay a manos llenas!
Pues a mi si que me gustó, y estuve en la planta de abajo y no lo vi mal, seguramente la de arriba sea mejor, pero bueno.
En el menú habia bastantes platos a elegir, y eso es algo que aprecio. Pedi salmorejo de primero y me encantó, el segundo ya no tanto porque el atún no estaba muy allá. El postre estuvo bien, el helado estaba muy rico.
En general me gustó, está muy bien para ir de menú entre diario.
Nosotros llegamos a comer a las 15.45 y debían cerrar la cocina a las 16, nos dieron de comer como a los pavos, con el primero aún en la mesa nos trajeron el segundo y con el segundo el postre y sin terminar el postre la cuenta. Al final nos dijeron que no tuvieramos prisa mientras un camarero estaba a nuestro lado con un cubo y una fregona esperando a que nos fuéramos. Lamentable. Una pena porque la comida no es mala y el precio no está mal. Pero así no se disfruta.
Yo llevo yendo al Plaza 66 (por lo menos 2 o 3 veces al año) desde que lo descubri en verano del 2007.
Me encanta, ahora que con la ley antitabaco no se puede fumar todavía mas.
De todas las veces que he ido solo la 1ª vez me he sentado en la planta de abajo.
De entrantes siempre pedimos lo mismo, o pizza, o carpaccio o huevos rotos, la tempura la probe una vez y aunque no estaba del todo mal, habiendo cosas que se que me encantan…prefiero no repetir.
De segundo el 90% de las veces pido el meloso de buey al horno, de hecho solemos ir solamente por este plato.
Y postres, cuando no estamos demasiado llenos, la torrija, o la crema catalana.
Y de precio esta muy bien.
Me decepcionó este restaurante muchisimo. Me sirvieron el primer plato cuando la mayoria iba por el segundo y me lo sirvieron frío. Nos sentamos en una mesa muy pequeña todo apretujados rozandonos unos con otros los codos. Yo pedi hamburguesa, estaba insipida y de los 300 gramos que indicaban en el menu, no tendria ni 200 gramos, era pequeñisima y las patatas tambien frías.
Muy desilusionado, iba con mi novia y unos amigos. Entre plato y plato tardaron una eternidad en atendernos. Sinceramente una y no más Santo Tomás. Hay muchos mejores restaurantes por ese precio en esa zona, sobretodo en Chueca.