Restaurantes en Madrid

• Edgar Neville, 2
  Pozuelo de Alarcón
  Ciudad del Cine (ML3)
  91 512 16 96
  15 - 25

Rayo: No encontrarás un restaurante mejor que te traslade fielmente al viejo oeste, tan sólo le faltan las famosas “bolas de paja” paseándose de un extremo a otro de la calle y algún que otro cactus hirsuto flanqueando su entrada. Quizás nosotros en esta ocasión figuramos como el bueno, el feo y el malo -me otorgo el feo- en esta cena western -sin spaghetti-.

A mediados de los años sesenta aparece “El Descanso” -restaurante pionero de la cadena- que introduce por primera vez en el país las costillas cocinadas al más puro estilo texano. Posteriormente nacen los Ribs.

Su fachada, no pasa inadvertida para nadie, una enorme cabaña de madera iluminada con llamativas luces de neón rojo. Como nota graciosa: menos mal que han terminado la frase y se definen como “La casa de las… costillas” -y no deja lugar a confusión-.

Algo que sorprende nada más entrar, es la cantidad de cacahuetes que puedes tomar mientras esperas a que te den mesa. Una cerveza americana, australiana o un refresco y… ¡a hincharse a cacahuetes! Como observáis en la foto, FlashBack aprovechó para coger delantera mientras yo estaba ocupado con la cámara…

La barra es muy atractiva, la decoración junto con sus famosas costillas forman los dos pilares básicos del local.

Se está francamente bien, es muy amplio y suelen atenderte muy rápido, lógico cuando está tan demandado.

La Bacon Cheese Burger es enorme y lleva: bacon, queso cheddar, patatas fritas y guarnición. La verdad, si te gustan las hamburguesas bien grandes éste lugar no te defraudará.

Añado esta fotografía -que parece un anuncio de Coca-cola- para que veáis la curiosa pajita negra y los cubiertos envueltos en una servilleta de resistente y original papel atados con un cordelito. Muy rústico.

También se aprecia la botellita de salsa babacoa -que es original de ellos- y te ponen muestras por si te la quieres llevar a casa.

Y para terminar, te sorprenden con un sobrecito corporativo de Smints -trae dos-, que recordando la gracia que os hice al principio, más bien parece un publicitario condón.

FlashBack: Dentro de la Ciudad de la Imagen, destacable por ubicar la sede de Telemadrid, la radiotelevisión madrileña y el Kinepolis, los cines mas grandes de Europa, encontramos este restaurante al más puro estilo norteamericano, colindando con el nuevo centro comercial Grand Boulevard, el cual alberga opciones adicionales de restauración, una bolera y bar de copas, ideal para completar una buena cena si no has llegado hasta aquí conduciendo. Si no es así, puedes aprovechar la oportunidad que brinda el nuevo metro ligero.

Su luminoso cartel señalando hacia su entrada nos invita a pasar y trasladarnos a la Texas más auténtica. Curioso el ser inevitable que se colase en la fotografía la conocida franquicia de hamburguesas de su mismo país, eso sí, con una calidad y precios muchísimos más reducidos.

Su inmenso local diseñado cuidando el estilo de las grandes Steak Houses, ha sido realizada con una más que envidiable y numerosa decoración de época reflejando fielmente la historia publicitaria y gastronómica al estilo “vintage” de nuestros vecinos al otro lado del Atlántico.

Si por algo se caracteriza el interior, es por la amplitud de las mesas y pasillos. Tanto mesas como sillas y hasta el suelo, se encuentra realizado en madera. Los camareros, por supuesto, no desentonan y van arreglados de acuerdo a lo que todos esperaríamos de una buena película de Western.

Como entrantes para compartir ó no, se puede elegir entre una gran variedad como la recomendable Quesadilla de tres quesos, una gigante tortita de trigo rellena de jamon y tres clases de quesos distintos fundidas en su interior, acompañada de salsa mayonesa y guacamole.

Mi elección al pasar al plato principal no podría ser otra que el emblema de este restaurante, las costillas americanas o ribs, en concreto degusto las Baby back ribs, servidas con patatas fritas, salsa barbacoa y ensalada americana. Sin duda, estas opciones también se pueden compartir e incluso existen en la carta los llamados “combos”, que incluyen una generosa combinación de muchos de los platos.

No olvides pedir, si lo necesitas y llevas varias servilletas gastadas, una de las curiosas ollitas de metal con agua y limón en su interior para eliminar toda prueba de lo que has cenado. Realmente con un diseño muy original.

En cuanto al postre, y aunque ya no podíamos más, decidimos compartir la Tarta de limón, realizada en merengue sobre una base de crema de limón. Ligera y digestiva.

Aunque el postre estrella y el más recomendable es la Cookie con helado, que combina el calor de una gran galleta (realmente de tal tamaño que lo más recomendable es compartirla) artesanal recién horneada con el frío del helado de vainilla y chocolate derretido. ¡Realmente deliciosa! No olvides pedirla con al menos 15 minutos de antelación, como indica la carta, puesto que la hacen en el momento o te pasará como a nosotros que no pudimos tomárnosla por tener el tiempo justo para acudir a ver la película que habíamos elegido.

Una más que recomendable opción si te encuentras por la zona, a un precio asequible. Nosotros salimos por unos 22 €. Disponen de tarjeta de cliente en la que se te obsequia directamente un porcentaje en euros, el cual puedes elegir siempre entre acumular o descontarlo de tu próxima factura. También te ofrecerán promociones, invitaciones y algún que otro detalle si realizas una visita por tu cumpleaños.

Ninillas: Bienvenidos al Ribs -La casa de las costillas-. Antes de nada, quiero deciros que no soy amiga de franquicias, si voy a comer costillas, soy muy clásica y me gustan más los locales al más puro estilo cañí, como Las Costillas. Pero claro, si vas a Kinepolis al cine, sobre todo a disfrutar de la película en su super sala 25, pues no queda otra que ir al Ribs. Ya no se trata de gustos, sino de ser práctico.

Como ya ha dado a entender Rayo, desde lejos recuerda más a una casa de citas que un restaurante, ahora bien, el nombre lo deja claro, y una vez allí, ya no hay dudas, porque el espíritu de la américa profunda está presente en todos sus rincones.

Cuando hace buen tiempo disponen de una terraza, que a base de barriles y bancos de madera te siguen ubicando en el universo yankee.

En el interior todo te conduce al otro lado del atlántico; desde las paredes con cuadros de Chesterfield, noticias de aquellos lares y relojes de Coca-cola; hasta el suelo, todo de madera. Todo ello sin olvidarnos de los camareros que van vestidos al más puro estilo tejano.

Las mesas son suficientemente amplias, al igual que el local, lo que lo hace apropiado para parejas que van con niños. Además dispone de una carta amplia y variada, apta para casi todos los gustos (obviamente el pescado no es su fuerte) y que va desde los aritos de cebolla, chiles, nachos, ensaladas y sopas; pasando por las típicas costillas y carnes a la parrilla, sandwiches, fajitas y hamburguesas. También tienen combos para aquellos que no tienen las cosas claras, o que gustan probar un poquito de todo; y para finalizar, una repostería de elaboración artesanal.

En esta ocasión pedimos para compartir Alitas de pollo (al más puro estilo cajún), que se sirven con dos salsas.

De segundo pedí Fajitas mixtas (tiras de ternera, pollo y verduras en tortas de trigo), vienen muy bien presentadas en tres niveles, primero las tortas de trigo, luego varias salsas, y en último lugar la carne y las verduras.

El postre lo compartimos, (ya os lo ha comentado Flashback), estaba bueno, aunque yo me quedo con el Cookie con helado.

En conclusión, un restaurante al que voy si me viene de paso, donde el servicio es correcto y la comida aceptable.

Aparte del Ribs de Ciudad de la Imagen, tenéis otros en: Ctra. De Barcelona Km. 14′200, C/Gregorio Benítez 4, C/Abada 8, C.C. Parque Corredor (Torrejón de Ardoz), C.C. Parquesur (Leganés), C.C. Megapark (S.S. de los Reyes) y C.C. Plenilunio (Coslada).

Cucharete: En este restaurante podéis encontrar una de las mejores muestras de comida americana al estilo Texas. Está claro que este tipo de cocina no es la mejor ni la más sana pero hay muchos detalles que hacen que salgas contento y satisfecho. Te puedes tomar cualquier cerveza de origen americano ó australiano a la entrada o cuando llega el buen tiempo en su terraza exterior, también disponible para cenas. Mi equipo cenó por 22 €/persona.

Los cacahuetes de la barra, la decoración y ambientación musical texana y su postre estrella (a Flashback sé que le encanta). Disponen de tarjeta de cliente Country Card con la que acumular descuentos y obtener regalos. Admiten cheques de comida.

En horas punta los camareros se ven un poco desbordados y el servicio puede llegar a tardar demasiado. Aunque suele haber sitio y el sistema de reservas funciona bastante bien, es recomendable evitar las horas punta previas o posteriores a las sesiones de cine del Kinepolis.

3,0