La Carbonera de Carranza
29 Septiembre 2008 por Cucharete - Este artículo ha sido leído 93,350 veces
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Carranza, 12
Madrid (Chamberí)
Bilbao, San Bernardo
91 444 28 79
15 - 25
Un nuevo restaurante en Madrid transforma la antigua carbonera del edificio donde reside en un luminoso y colorido espacio que nos permite disfrutar de su cocina a unos precios más que asequibles: 15 € son más que suficientes para un recorrido por su carta. Ofrece un menú del día a 10,50 € así como un “Menú Nocturno” a 24 € para 2 personas (12 €/persona). Dispone de capacidad para más de 60 comensales, distribuidos en dos comedores en los que está permitido fumar. Horario continuo de apertura de 8:00h a 00:00h, sirviendo desayunos desde primera hora (los Sábados desde las 9:00h), comidas de 13:00h a 16:00h, meriendas de 17:00h a 20:30h, y cenas de 20:30h a 00:00h (hasta la 1:00h los Viernes y Sábados). Cierra los Domingos.
3,5
El Restaurante La Carbonera de Carranza ha cerrado.
Rayo: Acabamos de encontrar una joyita en la calle Carranza, una de las transversales a la famosa calle de Fuencarral. ¡Un NBBB! ¡Con lo que cuesta encontrarlos por Madrid! Las tres B’s ya sabéis lo que significan y lo solicitadas que están en estos tiempos de crisis, y la N… ¡Es que además es NUEVO! ¡Acaban de abrir!
El restaurante La Carbonera promete… ¿Os habéis fijado bien en su horquilla de precios? ¿Seguro? ¡No, no nos hemos equivocado! ¡Es real! ¡Es un local de 10-20 €! ¡Se puede comer o cenar prácticamente por el precio de los Mc’Patos o BurgerKongs! ¡Flipante!
Estando por la zona buscando un lugar donde comer un menú del día, nos llamó la atención el toldo de La Carbonera -olía a “nueva apertura”-, y al acercarnos a su cristalera, dijimos al unísono… “¡Este sitio es nuevo!” Y nos quedamos a comer allí mismo, pues estando a 10,50 € el menú… como para pensárselo. Pero eso os lo cuento más adelante, primero unas fotillos…
Sin duda alguna, estos cubiertos gigantes reflejados en un enorme espejo grabado serán su distintivo en la zona -aunque seguramente os quedaréis con otro “más colorido” que os enseñaré durante la cena- Porque ¡regresamos para cenar! ¡Sí! Después de probar el menú del día, que fue fantástico, no podíamos permitirnos -como Cucharetes que somos- dejar escapar la oportunidad de probar la carta del restaurante durante una cena, y redactar posteriormente un nuevo artículo cucharetero. El lugar prometía, y mucho.
Los mantelitos rojos sobre las mesas negras, a pesar de ser de papel, llaman la atención del viandante tanto como los precios que cuelgan de su fachada. Es que… ¡Menudos precios!
Además, al tratarse de un restaurante completamente nuevo, todo lo que lo acompaña es a estrenar -faltaría más-, con lo que puedes disfrutar de unas copas impecables, de una cubertería brillante y de una vajilla en perfecto estado. El clima es perfecto para la horquilla de precios que maneja. Nadie puede discutir que nos encontramos ante uno de los restaurantes más baratos de Madrid. De los de ¡WANTED 100.000$ REWARD!
La barra -como podéis ver reflejada tanto en los espejos de la fotografía superior como en la sección de FlashBack- está iluminada con unas lámparas muy atractivas, entrelazadas entre sí como si de un nudo de cristal se tratase. Y es que el local pinta moderno, y por eso su nombre viene acompañado de un: “PINCHOS-RESTAURANTE-CAFÉ”, que es lo que se lleva ahora y lo que buscan los madrileños -y demás mortales- para salir de comida o de cena sin que se resienta lo más mínimo la cartera y sin tener que tirar de los establecimientos de comida rápida, que existen restaurantes baratos con buena cocina, y La Carbonera es uno de ellos.
Las paredes del comedor superior lucen “refranes” autóctonos dónde se publicitan sus mejores viandas. No necesitas ni ver la carta, tan sólo examinar un poco el local y ¡listo! ¡A pedir unas raciones o unos pinchos!
Para desayunar o merendar es ideal la alargada barra que os muestro en la siguiente imagen -tenéis una panorámica en las secciones de FlashBack y Ninillas-.
Y como os comentaba al principio, disfrutamos de un menú del día barato, generoso y de calidad. ¡Y además en un local nuevo! No se le podía pedir más.
Por mi parte, pedí de primero unos Macarrones Bologñesa, que a parte de estar en su punto estaban muy sabrosos, y de segundo, opté por el Filete de Ternera a la Plancha, plato tradicional acompañado con patatas fritas que confirmaba la abundante cantidad de cada una de las raciones.
Los 10,50 € del menú del día incluyen pan –que por cierto estaba muy rico-, bebida –el agua es de lo mejorcito: Solán de Cabras, de la tierra de Ninillas- y un postre o café. Me quedé con la Tarta de Chocolate, contundente… pero con sabor a chocolate chocolate. ¡Muy rica!
Y de ese modo quedó marcado el lugar en nuestra retina, vamos… que había que volver para cenar y sacarlo en Cucharete, aunque ese día no tuviésemos pensado salir a una de nuestras citas gastronómicas. No todos los días se encuentra uno por la calle un restaurante nuevo con una franja de precios que te permite comer o cenar por 10 euros. ¿Es difícil verdad? Sobre todo en Madrid… Bueno, prácticamente es imposible. Así que cuando das con uno… ¡Que se entere todo el mundo! Y allí que volvimos sobre las 20:30h.
Como era tan pronto -aunque ya habían pasado unas cuantas horas desde que el menú del día nos había dejado literalmente a reventar- antes de la cena quisimos probar los pinchos de la barra, porque los habíamos visto en una mesita vecina y despertaron nuestra atención. Además, ya que estábamos descubriendo un local nuevo, hacerlo en todas sus facetas.
¡Son pinchos dobles! Y acompañados de una cañita… mejor que mejor. Al parecer salen calientes para todos los comensales, vamos, que no los encuentras en fila india de exposición en la barra y te quedas con los que llevan varias horas hechos, sino que los hacen al momento para ti, y además muy rápido. Nosotros pedimos uno de Queso de cabra con pimientos del piquillo confitados, otro de Solomillo con cebolla confitada, y otro de Salmón relleno de cangrejo. ¡Bien buenos que están! Y… ¡Hay 30 pinchos distintos para elegir! Para todos los gustos.
Después nos enteramos que durante la cena también se pueden pedir pinchos, o cenar sólo pinchos, o combinar lo que quieras, pinchos y raciones, o compartirlo todo, o no compartir nada… la verdad es que el restaurante La Carbonera es muy muy versátil, y se adapta a cualquier petición.
Mientras le dábamos a los pinchos, aprovechaba para fotografiar el comedor del piso de abajo, que todavía estaba vacío por las horas que eran. ¡Y la de tiempo que me llevó! Pues tienen un robot de luz que cambia el color de las paredes blancas cada cierto tiempo, pasando lentamente de uno a otro. Allí estaba yo con mi cámara… esperando las transiciones de color para que vieseis algunas de las posibilidades… ¡Me gusta el verde!
Pero ya veis… Violeta, azul, verde, amarillo… ¡Y más que hay! Como opinión personal, creo que la mayoría de los restaurantes y locales de copas pensados para gente joven, terminarán por ser blancos inmaculados… y serán las luces de color las que pinten las paredes de una forma u otra.
Fijaos en el mantelito de papel -de los absorbentes, vamos, de los buenos-, que cambia de color según la tonalidad de la luz: con la violeta se ve naranja, con la azul se ve azul, con la verde se ve completamente negro… ¡Y es rojo!
Todo el espacio de ladrillo visto es la antigua carbonera del edificio, de ahí el nombre del local, y todavía pueden verse las entradas por las que se tiraba el carbón.
Al fondo, podeís ver una enorme pantalla en la que puede proyectarse cualquier cosa, lo que es ideal para presentaciones, cenas de empresa, cumpleaños, fiestas… Sobre todo dada la excelente modularidad de las mesas, que permiten colocarlas como más convenga. Preguntamos si se podría poner la TV y nos dijeron que sin problema, que tenían pensado hacerlo para ver las carreras de F1 o los partidos. ¡Vaya idea! Ya tenemos un lugar para esos días de juntarnos con los colegas para ver a Alonso -a pesar de no verlo en el podio (siempre y cuando no corra de noche)- mientras tomamos unos pinchos.
Y dejando ya los colorines a un lado -aunque nos acompañarán durante toda la cena- pasamos a probar esa carta que presume de tan buenos precios, a ver que tal sale la experiencia.
A todo esto… ¡Tienen un Menú nocturno para dos a 24 euros! Con las bebidas de los dos incluidas y con varias opciones de platos y pinchos a elegir. ¡Cenas por 12 euros! Parece que sales de Madrid y todo, ya sólo con los precios.
Pero nosotros -ya que éramos 3- pedimos a la carta, y pidiendo lo que nos dio la real gana -por decirlo así-, nos fuimos a 18 euros por persona nada más. Añadiéndole a parte un vino de 14 euros que se nos antojó: un Melquior Colección Familiar MMI del 2005 de la D.O. Rioja, que ya lo habíamos probado en más ocasiones y no defrauda, más que correcto para estos menesteres de cenas cuchareteras.
Los primero en llegar a la mesa fueron las Anchoas sobre lecho de tomate confitado y lágrimas de Pedro Ximénez, las acompañamos de una ración de Pan, tomate y aceite. ¡Y dimos buena cuenta de ellas! ¡No os quepa duda! Quedar… no quedó ni una…
La Ensalada de arroz salvaje y gambas estaba deliciosa. Salsa de romescu y vinagreta bañando los ingredientes principales para nuestro disfrute. ¡Íbamos por buen camino!
Mis compañeros de fatigas os muestran la Ensalada tibia de solomillo y crujiente de queso azul y las Croquetas (de jamón ibérico y de gambas al ajillo).
Mi turno es para las Albóndigas con crujiente de puerro y cama de patata. No nos defraudaron en absoluto… No hacíamos más que recordar la franja de precios y el coste de la cena, nos parecía que estaba todo muy bien ajustado y que la relación calidad/precio era francamente notable.
Hay más o menos media docena de postres disponibles en la carta, así que optamos por una de sus representaciones, ya que dan la opción de pedir una Degustación de postres, así que ésa fue nuestra elección. Tarta de cava, Tarta de queso, Tarta de chocolate, Cuajada con sorbete de pacharán y Macedonia, como veis, probamos un poco de todo, pasando la prueba sin problemas.
Pues ahí lo tenéis… ¡A por él! ¡Un nuevo restaurante en Madrid con muy buenos precios y que no descuida la calidad de lo que sirve! ¡La Carbonera de Carranza! Imaginamos que pronto habrá que reservar para poder tener mesa, la verdad es que se lo merecen.
FlashBack: No hay experiencia equiparable a deleitarse con un paseo por nuestra ciudad, continuamente en evolución, en búsqueda de nuevas propuestas, opciones innovadoras pero que, al mismo tiempo, son poseedoras de una coherencia realmente atractiva. Y es que, en ocasiones, deseamos que nos sorprendan con un concepto distinto, algo que consiga romper los esquemas del mercado y la rígida relación oferta-demanda tradicional.
No muy lejos de los ejes principales del centro madrileño, nos topamos con el Restaurante La Carbonera de Carranza cuya entrañable historia surge hace ya unos cuantos años -puntualizando mejor, se puede afirmar que roza ya un siglo-, albergando en su interior el que por aquel entonces servía como almacén de carbón con el fin de abastecer de calor la finca en la que se encuentra. En honor a este hecho, su elegante rótulo pone de relieve esta curiosa historia a lo largo de su fachada situada en la mismísima calle Carranza.
Un original nombre que, sin embargo, esconde en su interior colores, sabores y elementos a los que no estamos acostumbrados a encontrarnos combinados de tal manera en el panorama gastronómico actual. Claro que, el principal de todos ellos es la clave de su éxito: un acogedor local donde el visitante se siente cómodo inmediatamente ofreciéndonos una sorprendente relación calidad-precio.
Su planta, a la altura de calle, nos recibe con una bancada expuesta a lo largo de su pared derecha. Escrito sobre su cerámica con aspecto de pizarra, podemos leer los nombres de algunos de sus personales platos al igual que una serie consejos que nos brinda la casa a la hora de dejarnos llevar por la diversidad de su carta. Un espacio perfecto para realizar un alto en el camino a cualquier hora del día, ya sea refrescándonos con una estupendamente tirada caña, degustando alguno de sus ideales sándwiches y pinchos o incluso su generosísimo menú del día.
Si preferimos compartir nuestra mesa con un grupo más grande, disponemos de una serie de mesas elegantemente vestidas en rojo y negro, tanto en la planta en la que nos encontramos como en la inferior, que nos permiten cumplir con esta función perfectamente. Siendo al fondo del local donde alcanzamos una vistosa barra iluminada con sus lámparas de estrambóticas formas que nos asombran junto con el resto del mobiliario realizado en metal. Si a todo ello le sumamos el detalle de poner a disposición de los clientes todo tipo de periódicos generalistas, económicos y deportivos, podemos decir que se ha pensado en nosotros en cualquier tipo de situación que nos encontremos. Múltiples opciones para elegir, ¿se puede pedir más?
Pues bien, visto lo visto, cualquiera nos esperaríamos una oferta culinaria de platos minimalistas a precios elevados pero algo nos dice al equipo de Cucharete que merece la pena investigar este establecimiento al detalle. Así que, aún siendo una hora del día no habitual para nuestras excursiones gastronómicas, tomamos asiento en la planta superior con el fin de evaluar y contaros nuestra experiencia al seleccionar el menú del día que nos podemos encontrar si acudimos a la Carbonera de Carranza cualquier día de diario.
¿Con qué nos encontramos? Una decoración moderna con la que con seguridad quedarás en muy buen lugar si acudes con acompañantes en alguna de tus comidas habituales del mediodía, un servicio atento y unos platos de cantidades más que abundantes. Todo ello por un precio muy de acuerdo al habitual que podemos encontrar en esta zona: 10,50€.
Tan sólo hay que echar un vistazo al álbum de instantáneas resumen de cada una de nuestras elecciones para darse cuenta de que, hasta para un buen Cucharetero es complicado terminar con tan dadivosas raciones. Os puedo asegurar que, si os tropezáis con la Ensalada de endivias con bacalao y crema de queso, no deberéis dejar perder la ocasión. Igualmente no dejéis escapar la Pechuga Villaroy que os encantará a los amantes de este plato, aunque debo reconocer que la cantidad en este caso me consigue superar. Una pena, porque hasta las patatas fritas se encuentran ¡deliciosas! Y, por último, como postre, una Macedonia de frutas, variada, ligera y sana para poder continuar perfectamente con el resto de la tarde. Sí, con el postre me he decidido esta vez por la opción simple pero mis compañeros os hablan del resto de elaboraciones para terminar correctamente vuestro menú.
¿Pensábais que aquí nos íbamos a quedar? ¡Por supuesto que no! Como buenos comensales agradecidos, cuando de un local salimos satisfechos lo más recomendable es volver a acudir en cuanto nuestro tiempo nos lo permita. Así que debido a que nuestra impresión había sido unánimemente satisfactoria, acudimos de nuevo a la noche para cenar. Dicho y hecho, decidimos acercarnos de nuevo al número 12 para comenzar calmando nuestra sed con tres cañas. Tres vasos de cerveza que nos llaman la atención por el arte que tienen los camareros tirando esta bebida de cebada. Muy fría y con la cantidad justa de espuma. Incluso nos preguntamos si se conseguirá hacer famoso este establecimiento gracias a este detalle. En este caso, seréis los lectores quienes debáis informarnos de ello a través de vuestros comentarios.
Y decidimos no dejar de probar alguno de los exquisitos pinchos elaborados en el momento, y que podemos degustar tanto en la barra como formando parte de nuestra cena sobre la mesa como un plato adicional. Todos los de la carta consiguen entrarnos por los ojos, pero finalmente pedimos tres: Queso de cabra con pimientos del piquillo confitados, Solomillo con cebolla confitada, y Salmón relleno de cangrejo. Éste último realmente consigue sorprenderme, el de solomillo me resulta muy bueno y, aunque como podéis adivinar el de pimientos del piquillo acaba en boca de Ninillas, seguramente a más de uno os encantará.
Aunque podríamos haber disfrutado con este grato comienzo ya en nuestra mesa, de todos es sabido que nos encanta llegar hasta el último rincón en todas y cada una de las visitas. De cualquier forma, el momento esperado llega y nos encaminamos hacia la planta inferior. ¡El verdadero tesoro escondido de La Carbonera! A ella bajamos a través de una fascinante escalera de metal y cristal que nos recuerda con su diseño a los famosos puentes de Calatrava. Según vamos descendiendo, descubrimos la auténtica carbonera de que os hablaba previamente. Eso sí, se puede comprobar que se ha conseguido un aspecto que nada tiene que ver con lo que estamos acostumbrados a encontrarnos en las antiguas plantas subterráneas que habitualmente poseen otros locales del centro de la ciudad.
Las mismas sillas de metal de la planta superior junto con sus mesas de piedra negra provistas de vistosos manteles rojizos nos reciben sobre la superficie de un suelo de madera agradable de recorrer. Desde la perspectiva en la que se sitúa su cubertería Salvinelli sobre nuestra mesa, alcanzamos a ver el fondo de la carbonera cuya pared resulta el lugar perfecto para poder proyectar todo tipo de presentaciones de empresa, fotografías como decorado de una celebración o incluso eventos deportivos gracias al proyector que dispone en la parte superior. Sin duda, se me ocurren numerosísimas excusas por las cuales no dudaría en volver de nuevo a formar parte de este cuidado escenario. Una buena propuesta en este área tan transitada y cercana a las zonas de marcha adyacentes.
De repente, un espectáculo de luz empieza a transcurrir delante de nosotros: tonos rojos, violetas, azules, amarillos, verdes… a diferente velocidad se superponen ante nuestros ojos atónitos. Claro que, transcurridos unos momentos, puede llegar a cansar, aunque siempre se puede solicitar al camarero, como hicimos nosotros, que fije únicamente alguno de ellos.
Una vez mimetizados con el entorno y, tras echar un vistazo a una carta de vinos con variedades de blancos, tintos, rosados, cavas y espirituosos todos de nuestra tierra, elegimos un Vino Tinto Melquior Colección Familiar MMI D.O. de Rioja del 2005. Se nos sirve rápidamente junto con un cesto de un pan muy adecuado para acompañar los platos que comienzan a llegar. Y no faltan unos cuantos picos para hacerle compañía.
Inauguramos la velada con unas muy bien presentadas, de forma alineada, Anchoas sobre Lecho de Tomate Confitado y Lágrimas de Pedro Ximénez junto con un plato de Pan, tomate y aceite. Una combinación perfecta, tanto, que de estas anchoas naturales elaboradas de forma artesana no dejamos ni una sobre el plato.
Me encanta el siguiente plato también tremendamente abundante -parece ser que esta característica no es sólo propia del menú del día- de Ensalada Tibia de Solomillo y Crujiente de Queso Azul. Y es que viene cubierta de almendra tostada que le consigue aportar un toque especial. Claro que, no le tiene nada que envidiar la Ensalada de Arroz Salvaje y Gambas que os muestra D. Rayo.
A continuación una ración de Croquetas Mixtas -la mitad de Jamón Ibérico y la otra mitad de Gambas al Ajillo-, de las cuales el primero de los dos tipos me consigue impresionar con más fuerza a pesar de que, al leer los nombres previamente, pensaba que sería al revés.
Por último, disfrutamos de una Degustación de postres (pequeña) compuesta por Tarta de Cava, Tarta de Queso, Tarta de Chocolate, Cuajada con Sorbete de Pacharán y Macedonia. Diversas selecciones de la carta que podemos ordenar individualmente y de las que personalmente eligiría, si con alguna me tuviera que quedar, la Cuajada.
Resulta arduo y complicado el añadir algo más a lo que no haya narrado ya previamente. Tan sólo me quedaría por resumir que la Carbonera de Carranza puede llegar a suponer uno de esos sitios de referencia óptimo para cualquier tipo de ocasión en la que además disfrutaremos de una relación calidad-precio inigualable. Incluso podréis poner final a vuestra cena con unos cafés al mismo precio que sus cañas: 1,20€. En resumen, un restaurante de los que ¡hay que probar!
Ninillas: Antes del verano se nos avisó de que la economía sufría una ligera “desaceleración”, durante el verano cambió la cosa y “la crisis” había hecho acto de presencia y campado a sus anchas. Pero lo peor aún estaba por venir… porque, nada más empezar Septiembre, los datos eran claros, y ni desaceleración, ni crisis, ni leches en vinagre… Ya nos lo han confirmado: ¡Estamos en recesión!
No creo yo, que nadie sea tan tonto ni tan iluso como para que le expliquen cómo va su cuenta corriente, lo cara que está la vida y sobre todo, lo mucho que cuesta llegar a fin de mes cuando los sueldos no se adaptan a ese ritmo de vida que supuestamente activaría la economía. Yo, personalmente, poco o casi nada puedo hacer, bueno sí… He aquí mi pequeña aportación, os presento el Restaurante La Carbonera de Carranza, uno de los pocos restaurantes “anti-crisis”.
La visita a La Carbonera fue el resultado de un cúmulo de coincidencias, pero sobre todo del hambre, ése que azuza al estómago cuando llega la 1:30 PM y no has metido nada en él desde el temprano desayuno. Buscábamos un menú del día y nos topamos con este restaurante que olía a nuevo. Sin pensarlo, fuimos “pa dentro” y nos sentamos.
El restaurante cuenta con dos plantas, ambas para fumadores. La primera está situada a pie de calle y la otra un piso más abajo, en la antigua carbonera del edificio, de ahí su nombre. No inspeccionamos mucho porque íbamos con un poquito de prisa, pero sí lo suficiente para darnos cuenta del potencial del sitio, sobre todo por sus precios.
El interiorismo responde a la máxima de un espíritu moderno y funcional, nada cargante y con personalidad propia. Si a un lado te ves reflejado en espejos colgados oblicuamente, en el otro, una pared de pizarra te muestra sus especialidades y un sinfín de platos ricos. Si a la izquierda te encuentras unas mesitas acompañadas por bancos corridos y sillas de diseño actual, a la derecha, una barra corrida con taburetes te invita a sentarte. Por supuesto, una no puede evitar ver al fondo el grifo de cerveza Mahou, ése que exalta mi espíritu cervecero, alumbrado convenientemente por unas originales lámparas.
Pero vamos a ir con la faena, La Carbonera de Carranza es una especie de todo en uno: Pinchos, Restaurante y Café. Desde las 8:00 de la mañana -desde las 9:00 los sábados- hasta las 12:00 del mediodía, ofrece una variada carta de desayunos: clásico, mediterráneo, español, escandinavo, natural, light, americano e inglés. Al mediodía, puedes comer su menú del día a 10,50 € o bien a la carta. Y, llegada la tarde, de 17:00 a 20:30, puedes degustar sus meriendas a base de chocolate, tortitas con nata, crêpes, tartas y sandwiches de varios tipos. Con la puesta del sol… Bueno, esto lo voy a dejar para más adelante, porque la realidad es que esa franja horaria también la disfrutamos.
Comenzamos con su menú del día: tres entrantes y tres segundos para elegir, pan, bebida y postre o café. Su precio, ya os lo he comentado: 10,50 €.
De entrante, yo me decanté por el Gazpacho, que venía acompañado en el momento de servirlo por cebollita, pepino, pimiento rojo y verde, por supuesto, al gusto de cada uno. Sabía rico y me lo comí enterito.
De segundo, opté por el Lenguado a la Romana, que como podéis apreciar se salía del plato y mira que era grande. Éste, no fui capaz de acabármelo. Para los postres, yo me decidí por una Tarta de Chocolate, mostrada por Rayo, que tampoco fui capaz de terminar. Vamos… que el menú del día fue un acierto y eso que íbamos a ciegas.
Claro que, cuando das con un restaurante de nueva apertura en Madrid y además con unos precios tan atractivos como los que tiene La Carbonera… La visita se debe hacer completa, todo lo demás… es tontería. De modo que, por la noche volvimos. Si fuera una película, se podría titular algo así como “El retorno de Cucharete”.
Empezamos con unos pinchos en la parte de la barra, acompañados por unas cañitas de Mahou. Los precios de los pinchos se mueven en torno a los 3 €, aunque eso sí, los pinchos son la rebanada de pan completa y no el típico pinchito de bocado. Además se elaboran en el momento, lo que hace que estén en su punto a la hora de comerlos. Nosotros elegimos el de Solomillo con Cebolla Confitada, el de Queso de Cabra con Pimientos del Piquillo Confitado y el Salmón Relleno de Cangrejo. No sabría con cuál quedarme, bueno sí… tal vez el de queso con pimientos, pero claro… es que a mí los pimientos me pierden.
Tras un buen aperitivo, decidimos cenar y nos ofrecieron hacerlo en la parte de abajo. Como la superior ya la habíamos probado, aceptamos y bajamos por su original escalera de tirantes. Debo añadir, que Rayo -con su santa paciencia- se estuvo un buen rato hasta conseguir las fotos.
La sala inferior de La Carbonera está pintada en un blanco, blanquísimo -como decía mi abuela- como si quisieran hacerle burla al nombre. De hecho, de su antigua ocupación aún quedan los boquetes por donde caían los trozos de carbón.
Se trata de un espacio abovedado y diáfano cuyo frontal está pensado para ejercer de pantalla tanto para proyecciones privadas como para eventos lúdico-deportivos del tipo: ¡Ganamos la Eurocopa! -Que ya está hecho- ¡Alonso a por el Mundial! -Que este año va a ser que no-.
El caso es que ese blanco se va tornando amarillo, rosa, rojo, azul, verde o violeta según se le antoja al robot encargado de la iluminación, consiguiendo un ambiente un tanto futurista.
Las mesas son modulares de dos y se van juntando dependiendo del número de comensales. Son de silestone -lo que le otorga un aspecto distinguido- y se visten con mantelitos y servilletas rojas de papel, pero del superabsorbente. Bueno, en realidad, con la horquilla de precios que maneja el restaurante, me sorprendió hasta que tuvieran mantelitos. Por lo demás, una elegante vajilla blanca y unos cubiertos de peso completan el conjunto.
Ojeando su carta, uno se da perfecta cuenta de que la factura no se va a subir por los cerros de Úbeda. Cuentan con varias secciones distribuidas en: Ensaladas y Entrantes, Para compartir… o no, Sandwiches y Pinchos (30 tipos distintos). Obviamente, no es un restaurante para pedir una lubina salvaje, pero la carta cuenta con entradas más que suficientes para ofrecer al comensal una comida o una cena variada.
Nosotros empezamos con una Ensalada Tibia de Solomillo y Crujiente de Queso Azul. Además de los ingredientes ya mencionados, llevaba también lechuga, láminas de almendra tostada y salsa de foie. El conjunto era muy resultón y sin duda me sorprendió, tanto por su sabor como por la generosidad de la ración.
Además de las Anchoas sobre Lecho de Tomate Confitado y Lágrimas de Pedro Ximénez que nosotros acompañamos con una ración de Pan, Tomate y Aceite, decidimos pedir también la Ensalada de Arroz salvaje y Gambas. También estuvo rica, sobre todo porque se acompañaba de salsa romescu y vinagreta, lo que la hacía más sabrosa.
Vinieron después unas Croquetas de Jamón Ibérico y de Gambas al Ajillo, -3 de cada-. Aquí me decanté claramente por las de jamón, las otras me parecieron más pesadas, tal vez porque el relleno era más contundente y quedaban menos cremosas.
Para terminar, unas Albóndigas con Crujiente de Puerro y Cama de Patata. Me gustaron, tal vez un plato demasiado contundente para la noche, pero de eso nadie tiene culpa salvo nosotros que fuimos quienes las pedimos.
Después vinieron los postres. No queríamos rompernos la cabeza, de modo que nos decidimos por un Surtido que tenía muy buen precio -7 €- y que incluía: Tarta de Cava, Tarta de Queso, Cuajada con Sorbete de Pacharán, Tarta de Chocolate, Macedonia y Crema Chantilly. La verdad es que estaban bien, sobre todo la Tarta de Cava y la Cuajada.
Nos preguntaron si deseábamos algún café o infusión. Como una cena sin sobremesa no es cena, aceptamos y, me llevé una grata sorpresa al ver la multitud de cafés de los que disponían. Etiopía, Hawai, Kenia, Jamaica, Tanzania, Timor Diak, Portugal y Papúa, ésos eran los orígenes de los granos. Además podías optar también por cafés de sabores, y por supuesto, de las modalidades más clásicas. No estábamos para muchas pruebas, así que yo me pedí un café con leche de los de toda la vida -a 1.20 €- al igual que Rayo. FlashBack se quedó con una infusión -también a 1.20 €-.
Al final, salimos a 18 € por barba. Tres personas con 6 platos, un surtido de postres y cafés, aparte el vino: un Melquior Colección Familiar MMI del 2005 de 14 €. Qué duda cabe que es un precio francamente ajustado, pero si aún con todo os parece que se os va del presupuesto, también se puede optar por un Menú Nocturno para dos por 24 €, es decir… 12 € por persona, que incluye una ensalada, una ración y dos pinchos -todo a elegir entre multitud de entradas de la carta- además de dos bebidas. Vamos… que por un poco más, dejas la comida rápida y comes unos platos ricos y decentes en un ambiente confortable y actual.
En definitiva, si buscas cenar a un precio asequible, ya sabes: Restaurante La Carbonera de Carranza, un restaurante anti-crisis.
Cucharete: La Carbonera de Carranza supuso para mi equipo el descubrimiento de un restaurante de nueva apertura en Madrid que destaca por los precios que muestra su carta, ya que lo hacen asequible para todo tipo de bolsillos, algo que se agradece en estos tiempos de crisis. Disfrutaron mucho de su comedor inferior, que muestra una moderna iluminación pintando de color las paredes a medida que discurre la degustación. Mi equipo cenó por 18 €/persona, tres personas con 6 platos de la carta, un surtido de postres y cafés. A lo que añadimos una botella de vino de 14 €. En la barra, la cosumición de 3 pinchos dobles y 3 cañas fueron 12,90 €.
Su asombrosa horquilla de precios. Su moderna decoración. Su colorida iluminación. Su gran pantalla para eventos, fiestas y presentaciones. El amable trato del servicio. Aceptan cheques restaurante (excepto Gourmet)
Pequeños detalles, habituales en un restaurante de nueva apertura, nada que no se subsane con rodaje.
3,5
El Restaurante La Carbonera de Carranza ha cerrado.
81 comentarios a “La Carbonera de Carranza”
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Buscando en la web algo que hiciera mención a La Carbonera de Carranza me encuentro con cucharete, y no tengo más remedio que poner mi comentario, pues suscribo completamente todas y cada una de las apreciaciones a que hacen mención. Estuve en este restaurante este fin de semana y quedé gratamente sorprendida por la relación calidad-precio que ofrece. No hubo uno solo de los platos y pinchos que pedimos que no nos sorprendiera, tanto en su presentación como en su calidad y abundancia y tienen una carta muy bien elaborada y surtida. El ambiente es muy agradable, sin estridencias, con música ambiente al nivel justo, del que no te deja sordo. La decoración es muy acertada, resultando algo distinto, y se nota que se ha puesto mucho interés en cada uno de los detalles. El personal correcto en todo momento. En fin, os recomiendo que lo visitéis pues merece la pena. Yo por mi parte, pienso repetir en cuanto pueda. Un saludo
Ufffff este sabado o viernes voy
Ayer salí a cenar, y después de echar un vistazo por la web, decidí ir a este restaurante. La verdad es que salí muy contenta con la elección. El lugar está muy bien, quizás las mesas algo pequeñas, pero por lo demás, genial. Los camareros están continuamente atentos, quizás sean algo inexpertos, les falta un poco de “tablas”, pero ponen mucho interés y dan muy buen trato a la clientela.
Con respecto a la comida, estaba todo riquísimo, decidimos pedir platos de la carta, pero la gente de alrededor pedía el menú nocturno y tenía todo una pinta buenísima. La verdad es que por poco dinero, sales harto de comer.
Nosotros pedimos un entrante (croquetas de jamón), dos platos para compartir (Merluza y Berenjenas) y vino. Teniendo en cuenta que la botella de vino costaba 12€, nos salió todo por 35€, y… nos invitaron al surtido de postres que se indica en la promoción, que estaba buenísimo.
Así que, la verdad es que creo que repetiré, y eso que me gusta mucho cambiar de lugar, y lo recomiendo. Además, está muy cerca de los bares de copas, por lo que que con más razón el ir a cenar allí.
Por cierto, llegamos a las 10 y solo había una pareja cenando, a las 10 y cuarto estaba toda la planta de arriba llena, y era un miércoles, así que si decidís ir en fin de semana, yo recomendaría reservar.
Poco más, muchas gracias a Cucharete por descubrirnos tantos lugares y con tantos detalles.
Yo también fui a cenar este miércoles, pero un poco mas tarde, sobre las 10:45 y ¡cierto!, la planta superior estaba “full” y nos sugirieron cenar en la planta inferior. A mi lo de las lucecitas “creando ambiente”no me va mucho: no se distinguen bien los colores de la comida (no sabes si has pinchado un tomate cherry o una ciruela claudia) y si van cambiando las tonalidades a intervalos muy cortos me da dolor de cabeza. Sin embargo, en esta ocasión no fue así. Nos preguntaron si queríamos algun color en especial y optamos por el verde, resultando un ambiente muy, muy agradable.
La carta es amplia y de lo mas variado, te cuesta elegir (con esos precios apetece el picoteo). Pedimos un timbal de arroz coronado con gambas que estaba esquisito. Después berenjenas (qué rebozado!) con mermelada de tomate. Hay que probarlo para creerlo, la fusión de sabores dulce-salado es sorprendente. A continuación tres pinchos: salmón, pisto con huevo y milhojas de foie y manzana (sin duda el producto estrella del restaurante!). ¡Son pinchos dobles! ¡Qué cantidad de comida! Yo ya no podía con el postre pero compartido… Nos pusimos de acuerdo y optamos por la tarta de queso. Agradeces que la presenten en tres pequeñas porciones ligeramente decoradas (y no el típico triangulote de cuando estudiabas las fracciones). Mmmmm…deliciosa: sabor y textura.
Sin duda alguna este restaurante es de lo mejorcito de Madrid, especialmente en lo referente a precio-calidad-cantidad. Apuntado está en mi lista para volver en mis próximas salidas.
¡Muchísimas gracias a los propietarios y a Cucharete por dárnoslo a conocer!!
No sabiamos donde ir a comer y vimos este restaurante en cucharete, y por las opiniones decidimos ir. Me ha gustado bastante, tanto el local como la comida y sobre todo el personal que es muy atento. En general todo muy bien, sólo que tardaban un poco entre plato y plato, pero vamos, supongo que sería algo puntual.
Muchas gracias a Cucharete y a La Carboneria.
Yo acabo de volver de cenar allí (más de dos horas poniéndonos las botas) y la verdad es que vengo con una impresión muy muy agradable.
Todavía no me puedo creer que hayamos comido tanto (y tan bien), por menos de 20 euros cada uno (acompañado del estupendo vino que nos han regalado gracias a Cucharete :))
Y si me lo permitís, creo que os voy a dar la réplica en mi blog, porque el restaurante lo merece.
Gracias por descubrir este sitio para nosotros ^^
P.D.: yo me quedo con las croquetas de gambas, jejeje
Hola majetes, buen sitio, buena comida,camaremos agradables y velada tranquilla fui con mi pareja el dia 2/10 y todo perfecto ,como dicen por aqui la horquilla funciono.
Bueno, pues lo prometido es deuda, y ahí va mi comentario. Excelente, por supuesto, pues el sitio lo merece.
El sabado quedamos a comer con unos amigos, y como había visto la sugerencia de cucharete, allí que decidí llevarles. La idea era ir a cenar, pero llamé para reservar y me dijeron que estaba a tope, así que decidimos comer en lugar de cenar, y no nos equivocamos, porque nos pusimos las botas…
El sitio está muy bien, es bonito y agradable, la comida está estupenda y los precios, sinceramente, un escándalo. Entre los cuatro, probamos 3 ensaladas, 3 platas para compartir (o no, como sugiere la carta) y un pincho (todos excelentes y para nada pequeños) y os aseguro que nos costó llegar a los 60€ entre los cuatro para incluir el buen vino al que nos invitaron gracias a Cucharete.com, pues finalmente pedimos unos postres para compartir e incluimos los refrescos previos de la espera de mis amigos.
En definitiva, un gran descubrimiento en una zona excelente, muy bueno, barato… y encima aceptan tickets restaurant. Me van a ver por allí más de una vez. Enhorabuena.
Hola a todos, yo estuve allí el viernes por la noche, y la verdad que estuvo muy bien. Tomamos las berenjenas a la mermelada de tomate, el pollo con miel, y tres pinchos. Aunque con menos cantidad también se come, pero era necesario para llegar a los 15 euros por persona, para tomar el postre, que por cierto, muy rico la degustación. El sitio muy bien, y los camareros muy amables. Volveré en otra ocasión.
Hola a todos me encantaria que alguien me comentara que hay mas en la carta,quiero ir con mi marido para celebrar su cumpleaños pero es un poco rarito a la hora de la comida gracias.
Cena de aniversario, encontramos este bar a través de esta web y nos pareció interesante, cerca de casa, nuevo bien de precio…por desgracia resultó un fiasco: comida mediocre, escasa y un camarero malentonado. Al final de la cena comentamos al susodicho camerero el postre de regalo que se ofrece mencionando esta web,él nos contesto subido de tono y de malas maneras que no entraba con el menú. Nos sentimos maltratados de forma gratuita, quizá por no llevar corbata ni blusa de seda. En fin, hay restaurantes mucho mejores en ésta zona, nosotros salimos de la carbonera de carranza con hambre y mal cuerpo.
Hola Elena y Julio,
en todo momento se indica que la promoción está disponible “al disfrutar de una comida o una cena a la carta”, nunca con un menú.
No consideramos que La Carbonera sea un restaurante para asistir con corbata o blusa de seda ni mucho menos, y creemos que el regalo del postre gratis o de una botella de vino valorada en 14€ completamente gratuita con el único requisito de comer o cenar a la carta por únicamente 15€ es más que destacable por parte del local.
Nos cuesta comprender como puede llegar a entenderse que ese tipo de acciones tan beneficiosas para los comensales pueden llegar a malinterpretarse y solicitarse cuando se consume un menú de un coste cercano a los 10€. De todos modos, plasmada queda vuestra opinión en el blog, ya que el trato en el personal de un establecimiento debe ser siempre cordial y atento.
Un saludo.
Pues yo estuve el fin de semana pasado (sábado para más señas) y estaba prácticamente vacío. Ciertamente es barato, pero no esperéis nada del otro mundo ni en cantidad ni en calidad.
No hemos malinterpretado la oferta, que no esté disponible con el menú es perfectamente razonable, lo que no es razonable es la forma que tuvo el camarero de decirnoslo, nos quedamos pasmados la verdad. Respecto a la “etiqueta”, lo que quise decir es que si hubieramos encajado en otro perfil de cliente, es problable que el trato hubiera sido muy diferente.Y reitero: la relacción calidad precio es bastante ajustada, comida normalita servida en plato elegante, nada más.
Hola a todos:
Ayer también estuvimos en la Carbonera 7 amigos y yo mismo cenando y quizás lo que hay que centrar respecto de la valoración del restaurante es el precio en el que nos movemos. Lo que quiero decir es que no puedes esperar que los “crujientes de pollo” sean de pollo de corral, o las gambas de la ensalada sean frescas por el precio que vas a pagar.
En fin, que nosotros cenamos una comida normalita pero sabrosa para compartir (8 platos y 8 pinchos) y bebimos abundantemente (al menos 21 cervezas), por 17.5 € persona.
Un poco lentos eso sí, pero de trato amable. Nos convidaron a dos surtidos de postres, en la tónica de todo lo demás.
Ajustado a lo que es y sin demasiadas pretensiones en la carta.
Un saludito.
Nosotros estuvimos ayer por la noche en el local, (estaba completamente lleno) celebrando el cumpleaños de mi pareja, y sólo puedo deciros que por lo que pagamos no se puede pedir más. Calidad, trato amable y un local agradable
Yo también estuve el sábado por la noche y estaba prácticamente lleno. Nos gustó tanto que anoche repetimos y, además de estar otra vez lleno, incluso ví gente esperando a que quedara alguna mesa libre.
Aunque he leído algún comentario negativo ya que nunca llueve a gusto de todos, coincido con la mayoría: Precios muy asequibles, camareros amables y, entre los precios bajos, las raciones abundantes y los pinchos dobles, cuesta llegar a los 15€ por persona para acceder a la promoción.
Como dice Cucharete, ¡¡una joyita!!
Hola a todos,
Ayer estuvimos con unos amigos que nos recomendaron este restaurante. Ellos habían visto la recomendación de cucharete y habían estado cenando otro día. Chicos, la verdad es que fue un descubrimiento muy agradable, tanto en la comida, como en la facturita.
Cuando llegamos, estaba hasta la bandera, tuvimos que esperar un ratito, pero nos invitaron a las cañas, por lo que la espera fue muy llevadera.
La comida es buena, bien presentada, género mas que correcto. Nos fue difícil alcanzar los 15 euros por barba para la oferta, pero lo conseguimos, y mereció la pena porque la degustación de postres es buenísima. Mira que es dificil encontrar restaurantes con postres caseros y de calidad, y encima de regalo.
El local además es muy agradable, especialmente el comedor de abajo, con una iluminación muy cálida. El trato de los camareros es muy bueno, son muy simpáticos y serviciales (se nos cayó una cocacola y rápidamente nos cambiaron el mantel y nos dieron otra, sin ningún problema y siempre con una sonrisa)
Puestos a recomendar algún plato, además de los postres, el milhojas de foie y manzana te hace saltar las lágrimas, y las albóndigas están también buenísimas.
Vamos que os lo recomiendo, aunque como se corra la voz, no va a haber forma de encontrar sitio…
Ayer sábado fuímos a comer a la Carbonera. Nos gustó el sitio sobre todo la parte de abajo, por su tranquilidad y buen ambiente con una música tranquila, menos mal que no era kiss Fm.
Para tapear, tomar un buen vino, siguiendo la recomendación, está muy bien, incluído el precio.
El jueves fui con mi pareja a La Carbonera, y la verdad es que nos gustó el sitio. Cenamos abajo, prontito, y estuvimos solos casi todo el tiempo. Todo lo que comimos nos gustó mucho, en especial el milhojas de salmón con rúcula, y los camareros nos atendieron de maravilla.
Además me gustó mucho el detalle de que nos informaran de según cuánto llevábamos gastado, cuánto nos hacía falta para llevarnos la botella de vino a casa (íbamos sin hambre y no cenamos mucho).
Un buen descubrimiento, seguro que volvemos. ¡Gracias Cucharete!
El viernes 10, fuimos a comer a la Carbonera,cuatro miembros del club de seductoras.
La comida estaba deliciosa, tomamos ensaladas variadas que compartimos todas y el fuente de postres surtidos.
El vino Sanz de Rueda estupendo, y la atención de Jorge su encargado muy profesional y agradable en el trato. La música tambien muy agradable y relajante de oir.
Salimos encantadas las cuatro , lo recomendaremos.
De acuerdo con Cucharete, una joyita.
El sábado 18 estuve con mi novio cenando en la Carbonera. Llame para reservar un poco tarde (el mismo día a las 19:00 de la tarde) pero pese a estar completo y debido a mis ganas por ir, me hicieron un hueco si estaba allí a las 9 en punto. Y a las 9 menos 5 minutos allí estaba.
La comida esta muy rica, relación calidad-precio muy buena. Como he leído mas arriba, por ese precio tampoco puedes pedir productos de primerísima calidad, pero aun así estaba todo muy rico.
Se nos fue la mano pidiendo, ya que pensábamos que los pintxos eran mas pequeños, pero eran unas raciones generosas.
El trato de los camareros, fue excepcional, se ganaron una buena propina. Fueron muy atentos, rápidos, simpáticos, …. vamos que ninguna objeción al respecto.
El ambiente del local tb me gusto mucho, con las luces, todo nuevecito, la música de fondo, la velita de la mesa…
Las únicas pegas que puedo poner, es que el plato que tenia en la mesa al ser una vajilla cuadrada y por tanto muy delicada estaba picada por un lado, y que el postre degustación de Cucharete, no era ni mucho menos tan grande como en la foto. Eran 4 trocitos bastante, bastante pequeñitos, y nos quedamos con ganas de que hubiera sido un poquito mas :(.
Tras leer la crítica favorable de Cucharete, y aprovechando que estaba por la zona, ayer día 21 estuve cenando en La Carbonera y he de decir que salí gratamente sorprendida, tanto de trato recibido como de la relación calidad-precio de la comida. Quizá la única pega es el tamaño de las mesas, resulta un poco pequeño para un local especializado en raciones- tapas en el que se suele pedir varios platos para compartir. En resumen, un sitio bastante recomendable para disfrutar de una cena informal y asequible (15 euros pp aprox.) sin tener que acudir a las típicas cadenas de comida rápida.
hola cucharetes!!!!!
fui a cenar hace un par de días con mi pareja y debo decir que me encantó! cogimos el menú nocturno que hay por 24 euros los dos y estaba todo buenísimo!!! lo recomiendo porque era basante comida y nosotros ni siquiera tomamos postre. El menú incluye una ensalada, una ración, dos pinchos y dos bebidas. Nosotros cenamos una ensalada de solomillo y queso azul buenísima, y una sartén de huevos, jamón y patatas que me encantó, porque tenía mucho mucho jamón y las patatas estaban buenísimas y totalmente caseras !!!! luego tomamos un pincho de solomillo y foie y otro que habíamos leído aquí de manzana verde y foie, que realmente nos gustó. Más que el de solomillo, que era pasable… como veréis no tomamos postre porque los platos eran bastante completos….
Muy buen descubrimiento cucharete! gracias y los que podáis… pasaros!!!! lo recomiendo!
La verdad que fuí a celebrar un cumpleaños, y tan sólo deciros que el trato excelente, la comida exquisita, y sinceramente en la parte de abajo se estaba genial, eso si, un pequeño inciso, las luces de colores desorientaban un poquito, y llegaban a marear; por lo demás deciros que es un RINCONCITO EXQUISITO.
Es una pena que las dos plantas sean de fumadores. A mucha gente que conozco, incluyéndome a mi misma, se le corta el rollo comiendo entre humo de cigarros.
Hay que reconocer que el humo de los cigarros amarga la vida de los que no fumamos.
Patetico…
Me considero un seguidor de los artículos de cucharete y eh de confesar que he ido a muchos de los restaurantes que anuncian. Y hasta ayer no había habido ningún fallo o error.
Normalmente los críticos de restaurantes pueden ser geniales hasta que un día hacen un trato de mercadotecnia con un restaurante y su visión objetiva queda nublada por el interés de dicho trato.
Creo que esto es lo que les pasó a los de cucharete con este restaurante.
Lo único que puedo decir es que se me amargo la noche. El trato no es malo, es malísimo.
¿Desde cuándo en los restaurantes te hacen el favor de darte de comer?, yo creía que no es un favor sino un justo intercambio, comida y servicio a cambio de dinero (el que sea necesario), no les pido una sonrisa, ni que me canten una canción. Pero por el contrario exijo que me traten con respeto, con el mismo con el que yo me presento e invito a mis amigos a cenar.
Pero bueno, nos trataron fatal, se tardaron las horas en atendernos, todavía después tuvieron el atrevimiento de recordarnos que se iban a tardar 45 minutos más. Y no contentos con eso todavía se atreven a darnos tarjetitas del lugar vamos…
También la comida bueno, ni siquiera se parece a las fotos que ponen, es como el Mac o como el Burger, se ve genial y cuando te lo dan o lo ves en el plato dices: ¿Pero qué es esto? Parece que te dan las sobras…
Fatal… yo los calificaría con un menos 5.
Bueno,ahí va mi comentario……. A mi la Carbonera me gustó, no me sorprendió pero me gustó, no en vano comer por menos de 15 euros ya es complicado en Madrid, y sorprender es difícil con ese importe…… digamos que está correcto el sitio…. claro que si le añades el vinito gratis como nos pasó a nosotros que eramos 4 y nos llevamos 2 botellas que pedimos distintas, eso ya mola más, por lo que he de decir que la cena estuvo muy bien…. sobre todo la compañía, pipi, santi, y pedro
Fui con mis amigos porque lei vuestro artículo, y nunca me habéis fallado en la recomendación de un restaurante, y esta vez tampoco.. Y por los comentarios que veo, casi todos son favorables, así que parece que lo hemos disfrutado muchos de los que os leemos, aunque Manuel debió tener un día para el recuerdo, porque deja al restaurante fino. Está bien que si las cosas no son como se espera se de caña, pues ya que sales a cenar y pagas, esperas que todo sea perfecto, pagues 15, 25, o 40 leuros. Pero que no le eche la bronca a mis cucharetes, que ni los conozco ni ellos me conocen a mí pero les sigo desde siemrpe, y siempre me fijo en sus promociones, que llevan unas cuantas ya…., y siempre las hacen despues de su critica al local, por lo que no creo que nada les nuble su vision, me parecen peña muy honesta. Por ahora no me han fallado, excepto en el restaurante
referencia a otro restaurantede la callereferencia a otro restauranteque a mí no me gustó tanto como a ellos, pero que tampoco era malo.A ver si a aprtir de ahora dejo más comentarios, pq he ido a un porrón de ellos y casi nunca comento, y soy seguidora 100 por 100 vuestra. besos……..
Fuimos a la carbonera el viernes, menos mal que hicimos reserva, el local estaba lleno a reventar. Nos pusieron en la parte de abajo, comimos muy razonablemente y el trato fue cordial. Al final decidimos volver a comer el sábado y todo fue correcto.
Siempre nos hemos guiado por los restaurantes de Cucharete y esta vez , en nuestra opinion, han vuelto a acertar. Creemos que es muy complicado en Madrid poder comer bien por esos precios y en la carbonera lo hacen.
Gracias cucharetes !!!
Nos gustó el ambiente. Local acogedor, decorado con buen gusto y de trato amable. Cenamos ayer, que por cierto llenaron hasta arriba, nos parece asombroso que por este precio (a nosotros nos costó todo 30 euros, dos personas), cenaramos tan ricamente y tanta cantidad.
Gracias cucharete por darnos a concocer este y otros sitios tan estupendos. Como siempre, muy acertada vuestra opinión.
Hola cucharetes,
yo estuve el sabado pasado con unos amigos y mi mujer, la verdad es que se come bien aunque sin muchas pretensiones. Por el precio que tiene, ni tan mal.
El sitio es pequeño pero acogedor, y lo de las luces no es tan malo.
Lo peor es que no decis lo de que hay que gastar 15 euros por persona, si lo llegamos a saber habriamos pedido mas para poder tomar el postre degustacion.
En fin, a seguir asi que esta web mola por los buenos consejos que da.
Hola Daniel,
en el texto de la promoción del vino o el postre gratis en La Carbonera de Carranza está correctamente explicado.
Un saludo.
Hola cucharetes,
Acabo de cenar en La Carbonera de Carranza y es cierto que despues de tanto comentario bueno puede que me esperara algo más.
Hemos sido 4 personas y hemos pedido:
- abanico de tomate con queso de cabra gratinado, muy buen nombre pero eran 2 tomates en rodajas con aceite y orégano, lechuga y un minusculo trozo de queso de cabra en un lado y no estoy segura de que estuviera gratinado… 7 euros
- croquetas de gambas al ajillo, sabrosas y buenas, cada una a 1,10 (comparando con otros sitios muy castizos donde las hacen de bacalao, el doble de grandes y por 0,80 euros…)
- palitos de pollo con vinagreta de miel, venian como 3 tiritas de medio cm de ancho de pollo por persona, 6,50 euros
- berenjena con mermelada de tomate, muy rica la mermelada, ninguna pega para este plato, 7 euros
- cada una nos hemos pedido un pincho que creo que es lo más acertado del local, hemos pedido milhojas de fois, queso de cabra con pimientos del piquillo y, mouse de queso y datil con bacon, a 3 euros cada uno.
- no tenían las famosas albóndigas
El trato de los camareros ha sido excelente, muy agradables pero un poco lentos entre plato y plato, he pasado un frio espantoso, no sé si era porque estabamos en la parte de abajo o es la ola de frio polar pero la calefaccion estaba apagada y la musica ha sido un poco galactica y estridente para el ambiente tan bonito que se puede crear en este local.
Quiza he sido un poco quisquillosa, he visitado varios de los restaurantes que recomendais y 5 cucharetes y siempre he estado de acuerdo. Creo que el frio, mucho nombre de plato con poco resultado y la tardanza hacen que no vuelva a repetir, quizá con el menú de mediodia…
Hola, anoche estuve cenando aquí con unos amigos (7 en total) y pedimos el menú nocturno para cada dos personas, más un segundo plato y un pincho adicional para el “impar”.
He de decir que salvo una de las ensaladas (la de ibéricos) que me dejó algo indiferente, todo lo demás estaba buenísimo. La ensalada de solomillo genial, con una salsa de sabor original, así como el pincho de salmón (milhoja), algo diferente.
Los postres, más que correctos, aunque me quedo con las ganas de probarlos individualmente (pedimos un surtido) para poder opinar sobre el tamaño y lo empalagoso (o no) que resultaría el pastel de chocolate para mí sólo.
El precio es espectacularmente ajustado. Al igual que otros restaurante tipo
referencia a otro restauranteoreferencia a otro restaurante(ambos delreferencia a otro restaurante), por 15€ por persona cenas a gusto.Sólo un “pero”. Al ser sólo dos camareros para todo el local, por muy martes que fuese, se queda corto. El servicio es muy leeeento. Eso sí, educados, majetes, etc. Como debe ser.
Sin duda, aunque me decepcionó la lentitud, repetiré.
Bertold.
Hola, frecuento cada semana vuestro blog. El sábado pasado por la noche fuimos a este sitio (reservando con una semana de antelación) y nos pusieron la peor mesa de todo el local… la cosa no empezaba bien. La primera mesa al lado de la barra, del baño, de la salida de platos de cocina… y de todo lo q allí “se cocía” y no precisamente en las cacerolas…
Eran las 22:30… os comento q salimos de allí pasada la 1 de la mañana. No he visto camareros más ineptos.
Una lentitud bochornosa. Encima, como estábamos al lado de la barra, etc. nos enterábamos de todo lo q pasaba q no sabían si habían pasado una visa, que salía comida y no se enteraban de para quién era… mucha falta de organización. Q creo q es básico, salían las croquetas y un camarero (q olía bastante a sudor, por cierto) las olía para ver si eran de gambas o de jamón… muy fuerte!!!
Pasó media hora larga hasta que nos trajeron dos miserables cervezas, a la hora larga de sentarnos nos trajeron la ensalada de arroz con gambas y salsa romescu (q se debió acabar y nos tocó una salsa de pimientos). Esta ensalada la encontré con el arroz muy reseco, bueno, toda en general era como muy reseca, sosa e insulsa.
Luego pedimos rabas de calamar y cuando había pasado media hora desde que trajeron la ensalada nos preguntaron qué más habíamos pedido. Diez minutos después nos dijeron que no había rabas… “bueno, pues crujiente de pollo, lo q sea, son casi las 12 de la noche!!!”
El crujiente de pollo, bastante mediocre. Tanto por la fritura como por la salsa “aguada” (creo que se les había acabado la miel del aliño porque luego vimos entrar a un camarero con un tarro de miel…)
Lo último q habíamos pedido eran 3 pinchos… pues tardaron otra media hora, con preguntas de por medio (cuando hacía más de una hora y media q habíamos pedido!!!!) y los fueron trayendo por goteo tardando 20 minutos entre uno y otro… luego encima se equivocaron en la cuenta porque nos cobraron también las rabas. En fin, bochornoso.
El “encargado” era majete, nos pidió varias veces perdón alegando a que se les había roto el lavavajillas, etc. pero nosotros que estábamos en todo “el meollo” sabíamos q el problema radicaba en la inexperiencia, falta de personal MÍNIMAMENTE cualificado y una mínima organización para saber qué platos se han servido ya en cada mesa…
No creo que vuelva, cosa que me da mucha pena porque la verdad es que los precios están genial pero tardar 2 horas y media en comer 4 cosas…
Hola
La verdad q me encanto el local, la comida, y el ambiente mas, soy colombiano y fui con m novia q es española y me dio la razon.
Se lo recomiendo
Nosotros estubimos el sábado cenando en este restaurante y os cuento como nos fué.
Llegamos mas de media-hora antes de nuestra reserva, nos sentamos en la barra y nos tomamos unas cervecitas con unos pinchos. Estos bastante buenos. Mientras disfrutaba de mi pincho de salmón, observaba como todo el rato los camareros se metían y se burlaban con un camarero (que debía de ser nuevo), era peruano o algo de eso, y la verdad, que muy espavilado no era……pero se pasaron con el chico…todo el rato metiéndole caña. A mi me dió bastante pena.
Al margen de todo esto…….a nuestra hora, nos avisan de que ya tenemos nuestra mesa lista, y nos bajan a la parte de abajo. Nos pusieron justo debajo de la escalera, y la impresión que tube es de un sitio frio (de hecho hacía un poco de frio). Pedimos las “famosas” croquetas, unas tiras de pollo y una ensalada.
Solo deciros que me tiré toda la noche en el servicio, por la cantidad de “fritanga” que llevaba la cena. Yo en mi casa hago croquetas mucho mas ligeras que esas. Tienen una costra gordísima de frito. El pollo super rebozado con mas fritanga…….bufffff.
A mi no me gustó nada el sitio. Poco humanos (por lo del camarero), frio, comida “fritanga”. NO quiero hechar la culpa todo a este lugar, seguramente si hubieramos pedido otra cosa, no nos hubieramos encontrado con este problema.
Bueno, pues eso….que yo no pienso volver.
Un saludo
Uff al creador de esta pagina lo felicito xq me ayuda un monton a la hora de elegir un restaurante. ademas kien escribe los articulos se lo tiene que pasar super bien conociendo restaurantes y cenando d lujo asi q !!!!!!!!Gracias!!!!!!
Buenas!! ayer estuvimos mi novio y yo cenando en la Carbonera, y la verdad que salimos decepcionados. Llegamos 30 minutos antes de la hora de la reserva y no habia mesas dispponibles, así que hasta las 23.25 no pudimos entrar a cenar, el encargado nos dijo que nos invitaría a un chupito por la espera y aún lo estamos esperando. Los platos la verdad que también muy decepcionantes: pedimos una ensalada de ibéricos que para empezar traían “tropezones de carne” con la grasa incluída, pero no era carne hecha no, era cruda, concretamente cinta de lomo adobada cruda, estaba asquerosa, nos tuvimos que sacar varios trozos de la boca porque no había quién masticase eso!!!! así que nos comimos las escasas hojas de lechuga y ya está.Además pedimos una ración de pan con tomate que tampoco era nada del otro mundo. Para seguir escogimos dos croquetas que sí que estaban buenas pero que cada una costaba 1.10, me parece un precio excesivo para una “bola” minúscula rebozada. A continuación pedimos las “patatas con huevo y jamón ibércio” que dejaron que desear porque eran simples patatas fritas en tiras ( tipo Mcain) con huevo revuelto. Lo que sí estuvieron buenos fueron los pinchos de solomillo, concretamente el de foie y el de cebolla confitada, a pesar que que estaban más fríos que un cubito de hielo. Y por último escogimos una degustcaión de postres pequeña, su precio era de 7 euros, que tampoco era nada del otro mundo.Me parece excesivo los tenedores que se le dan a este restaurante aús así por el precio asequible que tienen todos sus platos, pero emos d etener en cuenta de que el precio es es puesto que los platos son casi todos pinchos y de escaso tamaño. Salimos como para ir a cenar a otro sitio, con el estómago casi vacío. Si vais hacedlo a una hora no muy tarde porque cuando ya va finalizando la noche no te atienden del todo bien y con reserva puesto que aún así tendréis que esperar un rato porque no dan más de sí, los camareros son muy inexpertos…y menos mal que en la zona de abajo sólo cuentan con 10 mesas!!! es por esta razón por la que tuvimos que esperar tanto tiempo, porque el local es muy pequeño. En la parte de arriba también cuentan con 5 mesas más o menos, pero es mñas tipo bar que abajo que tiene más pinta de restaurante. Conclusión: no creo que volvamos a ir.
Vainilla, no sereís la competencia porque es alucinante que conteis mesas y sillas, que la comida este mal, y que todo os salga mal y que los camareos sean inexpertos. No sé exactamente cuantas mesas y sillas tiene el restaurante. Nosotros eramos 12 (6 mesas) y por lo menos había treintay tantas personas mas en la parte de abajo y por lo que vimos al salir en la parte de arriba mas de lo mismo.
La comida muy correcta y el trato también, terminamos con una copita de cava que nos invitaron. El precio muy contenido. Se come bien en este sitio y más con el precio que tiene. Me fastidia tanto tiquismiquis subido a más.
Nosotros si repetiremos
Hola,
solo deciros que el sábado cenamos 4 personas y genial. Nos costó todo 90 euros pero os detallo lo que tomamos y la verdad q por todo lo q comimos me pareción un regalo.
- 6 refrescos y 2 copas de vino
- 1 jamón ibérico
- 1 pan tomate
- 1 croquetas jamón y otra de gambas
- 1 sarten (huevos rotos con jamón)
- 1 abanico tomate con queso cabra
- rabas calamar
- 3 tartas (2 queso y 1 chocolate)
- 3 cafes
La verdad q todo estupendo y el trato fenomenal.
Un saludo y gracias CUCHARETE por enseñarnos nuevos restaurantes
Hola!
Estuve en La Carbonera con mi chico hará cosa de 2 semanas. Pedimos:
-2 copas de tinto Ribera del Duero.
-Ensalada de ibéricos con vinagreta de miel. La idea era buena, pero la ensalada estaba “saturada de sabor” por la vinagreta, era demasiado fuerte. Predominaba el sabor potente de ésta frente al resto de los ingredientes.
-Crujiente de berenjenas con mermelada de tomate. Aquí nos esperábamos más, pero el crujiente de berenjenas resultó ser un plato de berenjenas rebozadas.
-2 tostas. Una de foie con manzana y otra de solomillo con queso brie. Las sirvieron sobre pan tostado, y como tardaron bastante en traerlas (más de 20min) el pan estaba frío y tanto el foie como el solomillo no estaban calientes (sólo un poco templados).
A mi personalmente no me gustó mucho el trato, si bien es cierto que soy una persona exigente en este aspecto. Los platos los dejaban caer sobre la mesa y derramaron el vino al servir ambas copas. No fue nada exagerado, pero sucedió así. Esto no me habría importado demasiado (estamos hablando de un restaurante económico) si la comida hubiese estado buena, pero la ensalada resultó demasiado empachosa, las berenjenas correctas, y las tostas perdieron toda su gracia al servirlas frías. Personalmente me hubiera conformado con un sólo plato que hubiese estado caliente y bien cocinado. Dado que casi todos los comentarios de La Carbonera son positivos, supongo que tendrían un mal día, pero no quería dejar de comentar mi experiencia.
Un saludo
Hola, yo fui hará un mes a picar algo y me pareció barato pero las raciones fueron bastante exiguas y el sabor más bien mediocre. Los platos que se fotografían aquí no los vi por ningún lado.
Me llama la atención que a la gente le encante y luego haya media docena de malas críticas (incluyendo la mía).
Lo que está claro es que es irregular. Me gustaría ir otro día a ver si es que tuve mala suerte, pero habiendo tantos restaurantes espectaculares en Madrid, no sé si podré darle una segunda oportunidad.
Cucharete, podríais verificar de nuevo.?
Creo que debe de haber otra Carbonera de Carranza, porque a la que yo he ido no se parece nada a la que contáis.
Fuimos a comer 4 personas entramos a las 14:30 y salimos 16:20.
No penséis que estuvimos todo el tiempo comiendo, p.q. estuvimos casi todo el rato esperando.
Después de mucho rato nos trajeron el caldo del día que estaba frió y saladisimo hasta el punto que ninguno se lo pudo acabar.(no nos los cobraron)
Luego como habíamos pedido pinchos, nos los fueron trayendo uno a uno con una lentitud desesperante. Total fueron 6 pinchos que aunque no eran nada del otro mundo no estaban mal.
Pensábamos haber pedido mas cosas, pero dada la lentitud, decidimos pedir la cuenta e irnos a tomar el café y el postre a otro lado.
Nos cobraron por los 6 pinchos, 2 colas, 2 cañas, 2 tintos de verano (con la gaseosa sin gas) y una copa de vino un total de 35,80 euros.
Los vasos por fuera estaban con huellas de queso y uno roto.
La verdad prefiero pagar un poco mas y comer en condiciones.
¡NO PIENSO VOLVER!
Hola a todos, pues yo lamento discrepar, no he leído las opiniones de todo el mundo pero me parece que la comida es directamente mala.
Puedo dar mi opinión de lo que nosotros pedimos
La ensalada de arroz salvaje, más que salvaje es asilvestrado, no sabía a nada, me recordó a cuando uno va al médico y le dice “arroz hervido sin nada más”. Es arroz blanco y arroz salvaje frío, si al menos la salsa templara un poco tendría un pase, pero ni eso.
El crujiente de pollo, es un filete de pollo empanado, (más bien chamuscado) y el aliño de miel…. para mi gusto sabía a…. es que no sabía a nada.
Las albóndigas, la opinión general entre los que fuimos es que eran de lata.
Lo único las berenjenas, no estaban mal, pero nada más.
Las salsas es la misma para todos los platos, para la ensalada, para las berenjenas, para las croquetas, para las albóndigas…
El servicio mejor ni hablar, no es que sea lento, es cansino, se confunden con los platos, tarda muchísimo, se confunden con las cuentas, tardan muchísimo, o se olvidan de lo que se pide.
Sinceramente me parece un
palabra no permitida.Estuvimos esta semana en La Carbonera celebrando nuestra cena de navidad (del trabajo). Simplemente, maravilloso. El personal muy atento y agradable, y los platos muy ricos (pedimos un menú para compartir, éramos unas 45 personas aproximadamente). Nos reservaron toda la parte de abajo para nosotros y el precio lo mejor de todo, sin comentario.
Nunca nos había salido una cena de empresa tan bien de precio y tan bien servida. Gracias La Carbonera. Estuvimos muy bien atendidos y muy bien servidos. Volveremos, por supuesto!
Nosotras estuvimos el pasado 5 de diciembre tomando el menú del día. Os resumo:
Macarrones carbonara
filete con patatas
arroz con leche
todo 10,50 euros, nos parece realmente de regalo y encima estaban los de españa directo grabando un especial sobre este local.
Ya sabemos donde comer nuestro menú diario.
Hola!
Encontré esta página hace poco tiempo por casualidad y debo decir que me parece un sitio estupendo. Los artículos publicados son muy detallados y ofrecen la opinión de varias personas.
El viernes pasado estuve con mi chico cenando en este restaurante y la verdad es que nos encantó a los dos!
Mi experiencia fue estupenda, el servicio muy agradable y atento, no nos hicieron esperar en absoluto y pasaron a charlar un rato con nosotros para ver si nos había gustado la cena.
Era la primera vez que iba a un restaurante recomendado por esta página y además de repetir en este restaurante, repetiré en hacer caso a las recomendaciones de Cucharete!!
El lunes 22 de diciembre fui con mi chico a comer allí el menú del día… en fin… una y no más, Santo Tomás. La lasaña de primero: normalucha, nada espectacular con una salsa roja recién salida de un tetra brik que dejaba mucho que desear. Bienmesabe, es decir, cazón de segundo: ni él ni yo pudimos comerlo. A ver, ese acompañamiento de lechuga iceberg deslavada sin aliñar no es de muy buen gusto. De postre cuajada; dos rectángulos de una sustancia blanca gelatinosa con poca miel alrededor.
La verdad es que las fotos os quedan muy bien a la vez que
palabra no permitida. Cuando entras en La carbonera de Carranza sientes de todo menos calidez. De las luces discotequeras de la parte de abajo mejor no hablar. El servicio… lento (y no estaba lleno) y caótico, se olvidaron del pan, de las bebidas, de la cuenta, de la aceitera…Conclusión: decepcionante y malo-malo, no creo que le dé otra oportunidad.
El viernes 26 de diciembre estuvimos cenando un grupo de seis personas en el restaurante y la verdad es que quedamos encantados. Nos dieron una mesa en la zona de abajo donde la reservé, ya que a mi me parece más bonita. La decoración es minimalista, mejor dicho inexistente pero ese es su encanto. Para cenar pedimos unos platos al centro para compartir y luego cada uno pidió su pincho y todo estuvo muy bueno. Como postre pedimos el plato variado que también estaba bueno aunque la siguiente vez pediré directamente la cuajada….mmmmmhhhh…que rica. Por último decir que los camareros muy amables y atentos aunque de vez en cuando un pelín lentillos. En cuanto pregunté si podían cambiar la luz del restaurante lo hicieron y hasta nos dejaron elegir a los comensales la que más nos gustaba. Que más decir…volveremos a repetir…y muy pronto ya que cuando nos trajeron la cuenta quedamos aún más encantados…pagamos 80€ por 6 personas!!!! Hay que tener en cuenta que no es un restaurante de lujo pero para ir de tapeo está muy bien y la decoración muy cuidada.
Yo soy un empleado de una empresa de la zona de Carranza. Descubrí el sitio por las recomendaciones de Cucharete. Mi experiencia como cliente habitual es que el menu del día que ponen en La Carbonera es dificil de igualar.
Estuvimos cenando durante las Navidades en la Carbonera y nos pareció un sitio ideal. La relación precio-calidad es fantástica. Los platos conjugan perfectamente imaginación, sabor y cantidad. El ambiente también está acorde con el tipo de comida que se sirve, muy agradable. El servicio fue rápido y muy atento. Realmente me encantó el lugar, así que repetiré en breve.
Por destacar algunos detalles, me quedaría con la presentación de los pinchos, eso de estar pensados para compartir me parece muy buena idea. Los postres también son deliciosos.
En fin, creo que me faltan cosas por destacar del lugar, pero creo que ya he dejado claro que el lugar pasa a ser uno de mis preferidos.
“Un desastre”
1 hora y 50 minutos para una ensalada, pollo rebozado con salsa de miel y albondigas, del postre pasamos no era plan dormir en el restaurante.
La ensalada templada no estaba mal (sólo tardaron 45 minutos en traerla)
Pero el pollo una ridiculez exactamente media pelluga de pollo cortada en 6 tiritas finas y rebozadas o sobraba plato o faltaba comida porque era de risa bailaban los mini rebozados, los de la mesa de al lado (en tono de broma) nos reclamaron su parte porque pidieron lo mismo y coincidíamos en que de un plato sacaron dos, de pena.
En cuanto a las albóndigas viendo las fotos de vuestra página me animé a pedirlas, pensando que a lo mejor era excesivo para la noche…. de risa…. 5 minialbóndigas que nada más probarlas me recordaron al sabor de esas albóndigas con tomate que vienen en lata y que me obligaron a empezar a cocinar y preocuparme por comer sano.
De pena eso si con ambiente de boda entre plato y plato hacías la digestion y no era un entrante y dos segundos sino primero, segundo y tercero.
Después de todo esto y de aguantar una mesa con 30 personas al lado gritando como puede hacerlo 30 de 20 años con 20 botellas de vino encima, pues eso lo normal, decidimos que una y no más… eso de salir sordo de un restaurante y cabreado como que no. los tres platos nos salieron por unos 30 euros precio ajustado para dos horas de entretenimiento.
Hola a todos,
Ayer mismo, estuvimos cenando 3 amigos y pedimos un menú nocturno (1 ensalada, 1 plato para compartir…..o no, y dos pinchos y dos bebidas. No incluye postres con lo que el ahorro apenas es de un par de euros)
Además pedimos otro plato para compartir, más bebidas y surtido de postres.
Todo estaba muy rico y en grandes cantidades. (Ensalada templada de solomillo y queso azul, albóndigas con crujiente de puerro y cama de patatas, “sartén de la abuela” y pinchos de solomillo con cebolla confitada y solomillo con brie). A mí me gustó especialmente el solomillo con cebolla confitada y la sartén de la abuela.
Es un restaurante muy recomendable y ajustado de precio. La atención fue rápida y buena…….. la verdad es que casi estábamos sólos.
Me pareció adecuado el juego de luces pero…….cuando el color es verde, azul o rojo no sabes si estás comiendo patatas con jamón o el postre de la casa hasta que no lo degustas. Yo casi prefiero ver la comida.
En resumen, lo recomiendo como una gran opción por la zona centro.
Hola a todos!!
Anoche estuve cenando con mi novio…y la verdad me gusto muchisimo,la relacion precio calidad es bastante buena,pedimos un entrante y dos platos para compartir mas un surtido de postres…cuatro cervezas dobles y todo por 30€!exquisito recomiendo la tarta de chocolate que rica…
El unico fallo que les veo,es que tienen pocos empleados para la noche lo cual no dan abasto con tanta gente…tardaron un buen rato para traernos el postre…asique alfinal no nos lo cobraron.Por lo demas todo muy muy bien.
Os lo recomiendo eso si teneis que reservar con mucha antelacion…!!
Esta claro que repetiremoooss!!!
Buenas¡
y estuve este sabado y me quedé gratamente sorprendido. La sala es estupenda y acojedora. Una especie de cueva, con las paredes blancas inmaculadas y un proyector de colores que hace que cambie de color lentamente, impresionante. Todo esto acompañado de un hilo musical agradable.
El servicio de lo mejor, dos chicas muy simpaticas y atentas que no dudaron en recomendarnos y explicarnos platos cuando nos vieron con dudas.
Nosotros probamos:
Ensalada de Solomillo puffff espectacular.
Pincho de Solomillo con cebolla confitada.
Crujientes de pollo con aliño de miel.
Milhojas de Foie y manzana verde al cremat.
Tar de queso casera, la mejor que he probado sin duda.
Botella de lambruco.
TODO por 37€ dos peersonas.
Calidad precio no creo que haya nada mejor. Volveré.
Hola a todos!!
El viernes pasado estuvimos en La Carbonera, y bueno…
Todavia estamos valorando qué fue lo que más destacariamos, si la tortilla de patata congelada, el pincho de solomillo que nunca conoció sartén….
Los camareros fueron simpáticos, aunque se olvidaban de nosotros constantemente, tuvimos que esperar mas de media hora para unos pichos que pedimos de entrantes, se olvidaron incluso a la hora de pagar, que tuvimos que perseguirlos hasta la barra para que nos dieran la cuenta.. porque estabamos muertos de frio (nos dieron la mesa al lado de la puerta) y queriamos salir de alli a terminar de cenar en otro sitio más cómodo.
A su favor tenemos que decir que el pincho de pisto con huevo estaba muy bueno, el de bacalao normal y el de cuatro quesos aceptable. Los precios son baratos, un poco más que en un bar normal, cada pincho eran unos 3€.
La verdad es que apriori el sitio tenia buena pinta pero es bastante flojo. El servicio no es bueno pero son amables. Ejemplo: estabamos 4 en el restaurante y para servirme una misera bola de helado tardaron mas de 20 minutos.
La combinacion de sabores es bastante mala no sé quien concina pero no sabe mucho de cocina. Los platos son muy simples pero los destrozan echandoles salsas de bote con sabores muy artifiales, lo que pasa que con la decoración modernilla y la vajilla actual parece que te vas a encontrar otra cosa.
Yo no vuelvo a pesar de que me salga mas barato que un menu del dia.
salu2
Hola a todos,el jueves pasado estuvimos en la Carbonera de Carranza y he de decir que para mi acompañante y para mi, todo estuvo bien.
Nos gusto la comida,el trato y la rapidez,he de matizar que el restaurante estaba vacio con lo que no se si es habitual que no tarden en servirte los platos o era por las circustancias.
La comida me gusto en especial la ensalada templada de ibericos y lo que menos el pincho moruno(para mi gusto sabia poco),lo demas todo muy bien y a buen precio!!!Gracias por la oferta Cucharete!!!
Solo una cosa el postre de yogurth buenisimo pero bastante escaso.
El Sabado repetire con un grupo de amigas y ya os dire si la rapidez es la misma.
Me ha dado tiempo a leerme todos los comentarios antes de recibir mi primer plato. El incordio, entenderán ustedes ha sido mayúsculo ya que el resto de mi mesa ya había acabado su entrante. Sumen los escasos modales de los camareros y tendrán una velada tontisima y decepcionante. Las albondigas normalitas, el resultado total mediocre. Voy a ver si busco más lectura mientras sigo esperando.
Estuvimos cenando el viernes pasado. Fue una gran decepción despues de haber ido, convencidos por vuestras fotos y opiniones tan positivas. La comida muy, muy floja. Relación calidad-precio… más que cuestionable. Pedimos unas anchoas con tomate confitado que para el precio de 13€ estaban saladísimas. El abánico de tomate y queso de cabra, decepcionante el tomate (sin saber de los que venden en cualquier sitio, de plástico) y una rodajita de queso. Abusan de la salsa de soja en la mayor parte de los platos. No han conseguido el equilibrio de los sabores, pues en el plato de milhojas de foie y manzana… predomina demasiado el dulzor de la manzana haciendo desaparecer la suavidad del foie.
En general, no nos gustó y no repetiremos.
El viernes por la noche fuimos a cenar mi hermano con su mujer y mi novio y yo a la Carbonera. Quiero comentar que desde mi llamada para reservar todo fue amabilidad, la chica que me cogio la reserva fue amable y servicial en todo momento.
He de decir que fui muy predispuesta por las opiniones que el equipo de Cucharete emitio de este restaurante pero desde luego en mi opinion es un lugar a tener en cuenta para comer o cenar bien y a precios asequibles, les doy la razon. Los cuatro cenamos por 15 € por persona (3 entrantes, 4 tostas) mas 3 cañas, 1 copa de vino y 2 aguas. No pedimos postre porque estabamos llenisimos!!! y el tiempo corrio deprisa! ^_^
Mi unico punto negativo es que no disponia de zona de no fumadores (llevo mal el tabaco, que le voy a hacer, lo pase mal entre ataques de tos, pero sabia donde iba e hice lo que estuvo en mi mano para sobrellevarlo). Bueno, la escalera me dio un poco de vertigo al bajar, en las zonas de cristal.
Como digo, el trato muy bien, el servicio fue muy atento, la comida muy buena (a excepcion de las albondigas que fueron tal vez lo que bajo nuestro gusto eran demasiado normalitas- es lo malo cuando las que hace tu madre te parecen fantasticas, jejejeje, pero para gustos los colores). Recomiendo este sitio sin problemas, las tostas increibles (solomillo con cebolla confitada o con brie, la nueva de pollo de corral… buenisimas).
Volvere!!! eso seguro!
Hola, soy Jade de nuevo. He de hacer una correccion: fueron 5 entrantes: 2 de croquetas (jamon y gambas), ensalada de Ibericos, albondigas y ¿el puchero de la abuela? no recuerdo bien el nombre.
Asi si qeu cuadra que estuvieramos que reventasemos, jejeje.
Y como dije: ¡Volvere!! ^_^
Hola:
Fuí a comer la semana pasada a este sitio alentada por las buenas críticas que hay al principio de este blog, no sólo por parte de los críticos sino de la gente (lección: no te guíes sólo de los comentarios que están al principio, lee hasta el final). Quise soprender a mi marido llevándolo a un sitio que me pareció que estaba bien, tanto por el precio como por su aspecto de cocina informal pero con cierto toque de creatividad.
Pedí que nos sentaran en la parte de abajo, la decoración me pareció curiosa y afortunadamente no había música estridente.
Pedimos para empezar croquetas variadas y a continuación ensalada de ibéricos y dos tostas, una de milhojas de foia con manzana y otra de solomillo con cebolla caramelizada. Para terminar pedimos una Crepe y una tarta de chocolate.
Les haré un pequeño repaso de la comida: las croquetas bien, fué lo que más nos gustó, la ensalada nos pareció espantosa, las tostas correctas, la crepe normalita y la tarta de chocolate correcta y escasa.
No me parece que sea un sitio muy barato, dada la escasa comida que ponen, la atención fué amable y nos invitaron a un chupito (un detalle a su favor).
Conclusión, habiendo cantidad de sitios buenos en Madrid donde puedes comer por el mismo precio no volveré, me pareció realmente un sitio mediocre.
Hola:
La verda es que es la primera vez que me fio de internet para estas cosas, suelo ir siempre a los mismos restaurantes.
Anoche invite a mi novio a la carbonera y la verda es que tenía buenas espectativas, pero el trato ,la comida y el precio fueron mucho mejor de lo que esperaba.
Es un bar barato, comes bien. Los pinchos son grandes y es difícil destacar uno entre los dos que pedimos, porque estaban buenisimos.
En dos palabras quede encantada. Os lo recomiendo a todo el que quiera gastarse poco y recibir un buen trato y buena comida.
Gracias a los camareros por hacer de una simple cena algo especial.
Bueno la verdad que anoche leyendo las críticas de la web, decidí conocer este sitio.
La verdad que es bastante acogedor y la comida muy deliciosa y con unos detalles de decoración sencillos pero agradables.
Las croquetas de gamba una verdadera maravilla (soy fanático de este rico manjar) y la tarta de queso no tiene nombre. Una verdadera delicia.
Respecto al servicio un poco despistadillos, pero no malo del todo.
La verdad que repetiré.
Ayer por la tarde leí en “Cucharete”, que la “Carbonera de Carranza”, era un sitio muy recomendable para ir a cenar en plan informal y para allí nos fuimos ayer por la noche mi pareja y yo.
El local es bastante impersonal, las sillas según mi pareja bastante incómodos, (yo me senté en uno de los bancos de una especie de madera prensada que componen las mesas que son bastante pequeñas la verdad, en cuanto te traen la bebida, y el plato ya está toda llena).
En el local estábamos dos parejas en la mesa de al lado y nosotros dos en la otra, por lo demás vacío en la parte superior, en la parte de abajo habían como 8 o 10 personas más.
De menú nocturno nada de nada, todo a base de carta. Nada más llegar nos dieron la carta, pedimos dos cervezas, después entre que miras la carta, la comentas y te vas al baño transcurren 10 a 15 minutos más, las cervezas aún no había llegado. Tomaron nota de la cena y reclamamos las cervezas, transcurrieron 5 minutos más y trajeron las cervezas.
Al cabo de 15 minutos más trajeron la primera parte de la cena que consistía en “Cazuela de la Abuela”,( creo que se llama así) y consiste en una sartén de dos asas, como una paellera con patatas fritas, huevos revueltos y tacos de jamón. Las patatas estaban recocidas y refritas, el huevo revuelto tirado por encima y el jamón en tacos fritos y reseco, todo frió, blando y sin sabor.
Yo ya estaba harta de tanta patata fría y sosa, pero mi pareja aún seguí atacando los tacos de jamón refrito, cuando en un descuido se nos llevaron el resto de la cazuela, más o menos un cuarto de sartén, sin darnos tiempo de reaccionar ( el camarero, parecía el “Correcaminos huyendo del coyote”, por la velocidad con que se llevó la cazuela).
Como se nos había terminado las cervezas, pedimos otras dos, al cabo de 10 minutos trajeron los pinchos templados, como no habían traído las cervezas las volvimos a reclamar y al cabo de 10 minutos más trajeron las cervezas (nos dijeron que se les había acabado el barril y lo habían tenido que cambiar), total 20 minutos para que nos trajeran otras dos cervezas. Si tenemos en cuenta que los pinchos los trajeron templados, a la hora de atacar la cerveza (que por cierto estaba muy fresquita) y los pinchos, estos últimos estaban completamente fríos. Los pinchos consistían en dos rebanadas pequeñas de pan de pueblo partida en dos. La carne del pincho de “Solomillo con Brie”, esta muy tierna, pero el queso completamente frío y hecho un bloque, el pincho de “Sobrasada con miel”, estaba cargadísimo de sobrasada y el queso que llevaba por encima completamente tieso, te lo tenías que comer por separado porque era un pedazo de queso completamente tieso.
Total la cena consistente en 4 cervezas muy tardías, una cazuela fría y sosa de patatas y jamón refrito y soso con huevos fríos revueltos por encima y dos rebanadas pequeñas de pan de pueblo frías y dos cafés nos costaron 31 euros. He comido mucho mejor en plan de tapeo y tostas en muchos otros sitios de Madrid y por mucho menos tiempo de espera entre plato y plato y por supuesto entre cerveza y cerveza.
El servicio del personal del local, correcto pero muy impersonal, parecía que estuvieras comprando en una gran superficie.
Yo por descontado no vuelvo más y además tampoco lo pienso recomendar a nadie.
Mi valoración de 0 a 10 sería de 2.
Fuimos al cine el miercoles pasado, y viendo las criticas de cucharete y los comentarios de la web, nos fuimos para La Carbonera.
Deciros que es un sitio informal, donde cenas muy tranquilamente, y lo mas alucinante bastante barato. No puedo poner pegas porque el servicio es agil, la comida (sin grandes alardes) es muy aceptable.
En resumen, ideal si no te quieres hacer un agujero en el bolsillo y pasar una velada agradable
Siempre hago caso a cucharete, pero en esta ocasión he de decir que este sitio no se merece ni estar publicado aquí. Sin duda la peor cena de mi vida. Todo malísimo!!!
Si, si se merecen estar en cucharte y en otros sitios mas. Seguimos a este sitio casi desde que empezó y no deja de sorprendernos con sus ofertas , promociones, y sugerencias. Nosotros somos prácticamente clientes de la casa y desde el primer momento nos encantó.
Adelante chicos de La Carbonera y gracias Cucharete por apostar por sitios como este, informales, económicos y de calidad.
Estuvimos en La Carbonera del sábado pasado. Ya habíamos ido mas veces, pero reconocemos que cada vez que repetimos es para mejor. Han cambiado la carta, con nuevos pinchos y nuevos platos. El servicio es muy familiar, nada lejano como en otros sitios y lo mas importante, si dices que vas al cine te dan preferencia y son super rápidos.
genial y original este sitio.
Somos de fuera de Madrid, y por medio de esta web conocimos La Carbonera. Hoy sábado fuimos a comer alli, y sólo deciros que la elección fue un completo éxito.
Tomamos una combinación de menú especial y carta. Las cantidades y la calidad muy razonables y el precio adecuado. Muy agradable el gesto de invitarnos a los chupitos finales para ayudar en la digestión.
Gracias a esta web sin conocer ningún sitio de Madrid, pudimos disfrutar de una comida fantástica antes de ir al estadio.
Agradecidos a La Carbonera y a los que han hecho posible esta iniciativa de conocer sitios por internet
Ayer estuvimos cenando uno de sus menús navideños y la experiencia no pudo ser más desastrosa y desagradable. Fue la cena con peor relación calidad precio de mi vida. 35 euros y nos fuimos sin cenar.
Para empezar una ensalada de verde y raviolis, unas berenjenas y unas albondigas. Todo decente pero escaso. Luego venían los “platos fuertes”: las tostas. Claro que más que tostas eran directamente canapés partidos por la mitad (ni siquiera tocabamos a uno por persona… 35 euros!!!!) como los que te ponen gratis con una caña en innumerables bares de Madrid. Y por supuesto muchas veces más ricos, porque ayer alguno de ellos (la brandada de salmón por ejemplo) era incomible. Y todo “regado” con un ali-oli totalmente industrial. El solomillo era inxesistente y la última tosta fue tan patética que se quedó en el plato. Un trozo de pan con un poco de bacon y un pimiento del piquillo de bote… y la salsa ali-oli que no falte. Muy cutre (vuelvo a recordar, 35 euros!!!!). De los postres no hablo, porque sólo probé uno de chocolate y me pareció comprado en un supermercado. La gente echaba pestes de esa bandeja de trozitos de tartas regadas con nata de bote a presión totalemente líquida.
Capítulo a parte merece el vino (decente, eso sí) pero muy escaso. Ni siquiera nos pusieron las dos botellas por persona. Hubo que “pedirlas”.
Por supuesto en mi vida volveré a ir ahí y agradecería a esta web que vuelva a ir a ese sitio y revise su críticas si es que lo considera oportuno.
Estuve ayer, y si la comida estaba bastante buena, pero tampoco me sorprendio en exceso: los pintxos buenos, pero los estandar, la verdad.Influyo tambien que nos toco la camarera empanada que no tenia muy claro cual es su trabajo..en fin.
Estuvimos celbrando una cena de Navidad con unos amigos. El menú era cerrado y sobre el papel parecía estar equilibrado con el precio. La sorpresa fue descubrir que el menú navideño parecía de vigilia por lo escueto o de racho de campamento veraniego por su calidad. Sin duda la relación calidad-precio está descompensadísima. Las tostas parecían canapés, las raciones eran como una prueba de cata y el surtido de postres parecía una broma. Sin duda no vuelvo a ir, la cena más cara de mi vida, teniendo en cuenta con lo que nos cobraron y nos ofrecieron.
Hola,
No me parece una buena recomendación La Carbonera de Carranza. Estuve comiendo allí el 7 de enero. Y debián estar de “rebajas”. Todo bastante poco cuidado: las patatas grasientas y recocidas, los pinchos fríos, el bacalao y el salmón de uno de ellos reseco; pero el colmo fueron las croquetas, renegridas y no están hechas de una bechamel más o menos ligada, están hechas con engrudo (harina con agua que no ha cocido). No es de recibo. No volveré y recomendaré a mis amigos que lo eviten.
No nos gustó especialmente. La comida está bien pero tardaron una barbaridad entre plato y plato. Cada cosa que pedíamos teníamos que repetirla varias veces y esperar y esperar. El rollo del juego de luces te hace no saber de qué color es lo que estás comiendo y en la gastronomía también es importante el sentido de la vista. Saludos.
Hola! acabamos de llegar a casa, hemos cenado en la carbonera y maldita la hora que se nos ocurrio. Nos ha estropeado la noche, estamos tomando sales de frutas, y no es broma!
Toda la comida malisima, la sarten de la abuela era un patatada con sabor de aceite de meses, las setas rebozadas solo eran reboce y el crujiente de queso de brie sabia a moho!!!
Y por no decir el postre, que menudo postre, un brownie que no sabia absolutamente nada a chocolate.
El servicio…. cansinos es la palabra. No es normal que tarden tantisimo en traer los platos y menos aun la bebida que estuvimos esperando por ella media hora despues de preguntarnos 4 veces que queriamos tomar.
Hasta ellos mismos se dieron cuenta de su nefasto dia y nos quisieron recompensar con un chupito a cuenta de la casa.
Lo tenemos clarismo, NUNCA MAIS CARBONERA.
Ummm… que buena pinta tiene esto, no?? además, suelo moverme poir la zona, así que lo tendré en cuenta…
Dicho queda cuchareteros!
Saludos!
Decir que ha cerrado
este sitio esta cerrado, hay ahora un restaurante de sushi.
saludos!