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Condesa de Venadito, 1
Madrid
Barrio de la Concepción
91 127 20 50
44 (50 en Diciembre)
El Restaurante El Templo del Placer nos ofrece cada fin de semana un espectáculo erótico en el que que los clientes se convierten en partícipes exclusivos del mismo sin que ninguno de ellos se quede al margen. Grandes dosis de humor de la mano de Endorfino y Chumino Power así como dos streapteases con una chica y un chico de lujo. Ofrece únicamente un menú -de 44 € (50 € en Diciembre)- en un comedor -para fumadores- que da cabida a 100 comensales. Su horario de apertura es de 22:00h a 2:00h los Sábados durante la temporada de Invierno, abriendo también los Viernes en Primavera.
3,9
Rayo: ¡Artículo inusual en Cucharete! Así que… ¡Preparaos que vienen imágenes con curvas! ¡Curvas de las buenas! ¡Peligrosas! ¡De las que no estáis habituados a ver en nuestros análisis! Pero es que la ocasión lo merece… Os cuento: Celebrábamos un cumpleaños, por lo que teníamos que elegir un restaurante que se saliese un poco de la línea editorial del blog, algo diferente, y… ya de paso, le dábamos un toque de sal al mismo, que lo necesitaba. Así que… ¡dicho y hecho! Os presentamos… ¡El Templo del Placer! ¡Un restaurante erótico en Madrid!
Mucho espectáculo, mucha fiesta y muchas ganas de pasárselo bien -relegando la cocina a un segundo plano- FlashBack y yo… ¡Acojonados en nuestra silla! ¡Por si te sacaban al escenario! Porque ya veréis… ya veréis que el restaurante se las trae… ¡Y que bien se pasa cuando miras desde tu mesa! -Pensando en lo bien (o mal) que lo estarán pasando algunos-. ¡Pero para eso se va a un restaurante con espectáculo! ¡Para disfrutar! Y lo veréis detalladamente a lo largo de este post.
Depués del video que muestra FlashBack con nuestra divertida entrada al local, donde tuvimos que revelar la contraseña secreta recibida días antes por mail al Sr. Endorfino -el gracioso “espermatubbie” de blanco-, nos encontramos con una especie de fotocall dónde el equipo del restaurante nos fotografía para posteriormente publicarnos en su web oficial. Acto seguido, te sorprenden multitud de tonos rojo pasión que prometen una “caliente” velada, vamos… que tiene toda la pinta de que el restaurante hará honor a su nombre: El Templo del Placer.
En el momento de la reserva telefónica nos solicitaron un nombre de grupo -completamente obligatorio-, y como habíamos visto de todo en su web -algunos nombres prácticamente impublicables- nos decantamos por… ¡Los Orgásmicos! De modo que, ese peligroso sábado de Noviembre, el equipo de Cucharete y sus acompañantes -éramos 7 personas- nos transformábamos en… ¡Los 7 Orgásmicos!
Como podéis apreciar en las fotografías del comedor, todas las mesas muestran un letrero con los nombres de los grupos que se sentarán en ellas. Te acompañan hasta la mesa justo después de hacerte la foto y… ¡A esperar! Con algo de tensión, por supuesto, porque no sabes muy bien que pasará durante la velada por mucho que vayas preparado para todo. Os daréis cuenta cuando veais un video que os mostraré más adelante, que os dejará… ¡Con la boca abierta!
Como podéis ver, hay largas mesas preparadas para grupos grandes, y es que acudir en grupo al Templo del Placer es una de las mejores opciones para disfrutar de este local como se merece: ¡A tope!, ya que el ambiente de fiesta se multiplica enormemente. Luego ya… la sangría y la cerveza -barra libre durante la cena- hacen el resto.
Los nombres de los grupos que nos acompañaban aquella noche eran también muy originales, fijaos en la siguiente imagen, que os muestra la mesa de “Angelitas abiertas hasta el amanecer y el Agente Jonh Po-John” ¡Genial nombre de grupo! Pero había más todavía… Por allí también estaban “La Familia Grillada”, “Las Diosas Pecaminosas”, “Las Jons”, “Caravana del Aberre” y… ¡”Las Diosas Picantes”! ¡Buenísimo también!
El sutil centelleo de las velas envuelve al restaurante en un clima de misterio que se ve acentuado por el pergamino que aparece en diferentes zonas de la mesa. ¡Que no sabemos todavía qué es! Y que abriremos más adelante…
Todo está colocado en su sitio, y creedme que parece mentira que al final de la velada el comedor quede patas arriba. ¡Cómo debe ser después de una jornada de fiesta! ¡Para eso estamos aquí!
¡Y aquí tenéis nuestra mesa! ¡La de los Orgásmicos! Con nuestra velita, nuestro pergamino… y todo lo necesario para empezar “nuestra dura jornada de trabajo cucharetil”, que esta vez se podría resumir en… ¡A comer y a disfrutar de la noche! ¡A dejarse llevar! Que esto, señores y señoras, es… El Templo del Placer!
Ya os había comentado más arriba que la bebida está servida, y que la reponen abundantemente durante toda la cena. ¡Sangría y cerveza por doquier! Nosotros obviamos la cerveza y le dimos “caña” a la sangría, mucha fruta y poco alcohol, pero en la medida justa para olvidarse de las jarras que llevas. Todos perdimos la cuenta, pero os garantizo que cayeron unas cuantas. El resto de bebidas -refrescos, vinos, etc.- se abonan a parte si se solicitan.
Antes de comenzar, nos hacen abrir el pergamino que tenemos presente sobre las mesas, con el añadido de que… “Si se dice, se hace. Si lo hace uno, lo hacen todos. Si se puede imaginar, se puede hacer”. Un “conjuro” que “acongojó” a más de uno… porque nos esperábamos cualquier cosa.
El escrito aúna los “10 Mandamientos del Placer” que os paso a relatar detalladamente:
1 • Amarás a Endorfina sobre todas las cosas.
2 • No tomarás el nombre de Endorfina en vano.
3 • Santificarás todos los placeres.
4 • Honrarás a Endorfina y a todos los placeres terrenales.
5 • Matarás siempre tu ansia de placer.
6 • No cometerás actos no placenteros.
7 • No dejes nunca de proporcionar placer a otras personas.
8 • No fingirás falso placer ni satisfacción.
9 • No consentirás pensamientos ni actos no placenteros.
10 • Desearás siempre el placer ajeno como el tuyo propio.
Así que… Preparados… Listos… ¡Ya! ¡A por la cena!
Comenzamos con un Farfalle a la salsa de Pesto -que os muestran mis compañeros- que no sorprendió ni mucho menos nuestros paladares, pero es obvio que más que de la comida, estábamos disfrutando del ambiente de fiesta que inundaba el local, del batiburrillo de voces y carcajadas, de un cúmulo de sensaciones que hacían que estuvieses a gusto. Después llegó el Arroz con Marisco -a modo de segundo entrante-. Unas raciones pensadas también para compartir. De nuevo el arroz, no podía calificarse ni mucho menos de sobresaliente, pero sin duda superaba al plato anterior -que no era difícil de conseguir-.
La cocina no era su fuerte, ya nos habíamos dado cuenta -aunque tampoco es lo que habíamos ido a buscar ese día-. No nos encontrábamos ante un “Templo Gastronómico”, sino ante el mismísimo ¡Templo del Placer! Y finalmente valoramos al local con un cúmulo de factores en los que prima la sensación con la que sales del mismo: La de habérselo pasado de P.M.
Además, entre plato y plato -sin dejarnos saborear bocado-, estaba el Endorfino por el medio todo el rato, haciéndonos reír, contando chistes muy graciosos, y deleitándonos con ocurrencias que hacían que toda la mesa de destornillase de la risa. Mesa a mesa, recorría el comedor brindando con los comensales. ¡En esta foto estoy atractivo coño! ¡No me digáis que no! (A FlashBack casi le mete un morreo del 15, mirad su sección… Casi, casi, casi.)
Cuando creíamos que iban a llegar los platos principales a la mesa, todavía quedaba un entrante más a compartir, los Crêpes. Quizás mejor que el segundo -y mucho más que el primero-, pero todavía muy lejos de ser considerado un plato destacable. ¡El Endorfino sí que destacaba! ¡Lo estábamos pasando en grande esa noche! ¡Qué risas!
Teníamos “finos” los platos de todos los entrantes que habían pasado por ellos, pero no importaba lo más mínimo porque llegaba la hora de… ¡La Pócima del Placer! Se anunciaba por megafonía y todo… Un brebaje a lo Panoramix que -palabras textuales del equipo del restaurante- te la pondría bien dura ¡durante toda la noche! ¡Jajajajaja! ¡Buenísimo! Una especie de jarabe milagroso sin contraindicaciones y que curaba todo menos la tos. ¡Pa’ dentro! ¡Todo el comedor al unísono! El ambiente de fiesta comenzaba a sentirse en todos los rincones del local.
Así que ¡ARRIBA todo el mundo! ¡Y a hacer un trenecito! Liderado -cómo no podía ser de otra manera- por Endorfino -el Popof del momento-. Todo el mundo disfrutaba de lo lindo, y el comedor comenzaba a parecerse más a un campo de batalla -festiva- que a un “restaurante” al uso (Ninillas os muestra un video del momento en su sección).
Todo el mundo en nuestra mesa se decantó por el Solomillo de Cerdo a la Pimienta, por lo que, con el fin de sacar algún plato más, opté por darle una oportunidad a la Lubina. Salvaje no era… y “domesticada”… no sé yo… Pero no se le podía pedir más, ya que con el Endorfino tocándote los &/$%! todo el rato, todo sabía mejor.
Os dejo un primer plano para que veais que la ración, pequeña no es. ¡Algo es algo! ¡Que había que empapar toda la sangría que corría por nuestras venas a estas alturas de la noche!
Más adelante os comentaré que nos reservamos gran parte de los videos que tenemos de El Templo del Placer para nuestra colección particular, pero es que éste… ¡Tengo que ponerlo por “huevos”! -Nunca mejor dicho- Ya que os dará una idea de lo que puede llegar a suceder en el Templo. ¡No tiene desperdicio! ¡Así que todo el mundo a darle a play!
Chumino Power -un pedazo personaje divertidísimo de 2 metros-, regó la fiesta con grandes dosis de humor -más en la sección de Ninillas-. ¡Es buenísimo! ¡Un CRACK! -con mayúsculas-. Y dejó a algunos literalmente… ¡En bolas! ¡Madre mía! ¡Y pensar que nos pudo haber tocado a cualquiera de nosotros! ¡De la que nos hemos librao! ¡Pa’ habernos matao!
¡Al Play! ¡Al play! ¡Dadle ya!
Como podéis ver… ¡En El Templo del Placer no se andan con chiquitas! ¡Aquí se viene a pasárselo bien con todas las de la ley! Pero cuidado dónde pones el límite porque… ¡Chumino Power no se corta un pelo! ¡Tenedlo muy en cuenta! Si es que una despedida de soltero se lo pasa pipa, pobrecillos los “conejillos de indias” de Chumino. No olvidarán esa noche en su vida: “…manos arriba, manos abajo… manos arriba… manos abajo… se me ve… no se me ve… uy cómo se me vea… manos abajo… manos arriba…” ¡Jajajajajajaja! Mortal el vídeo.
Después llegó la Tarta de postre, un trozo más que generoso que nos comíamos poco a poco, entre baile y baile con Chumino, que venía con su CD cargado de éxitos bailabes y “saltables” -como podéis ver en la sección de FlashBack-. ¡Fiesta!
Llega la hora del streaptease de Tamara -la chica cañón del Templo del Placer-. Se anuncia por megafonía y… ¡Selecciona a tres chicos de las mesas! a dedo ¡Directos al escenario los elegidos! Según vosotros… Esos “inocentes” han tenido… ¿Buena suerte? ¿Mala suerte? Bueno… a ver si lo dicen en los comentarios… Nosotros allí estábamos al pie del cañón, observándolo todo, para hacer las fotos del reportaje cucharetil que teníamos en mente. Y… ¡Menudas fotos sacamos! No pongo en duda que muchos de los que continúen la lectura del artículo acabarán por reservar en el Templo del Placer en breve. ¿Un cumpleaños de un amigo? ¿De una amiga? ¿Una despedida de soltero? ¿De soltera? ¿Una cena de antiguos compañeros de la carrera? ¿Una divertida cena de empresa? ¡Al Templo!
Tenemos unos vídeos flipantes, pero como os comentaba anteriormente, por respeto al estupendo show que hacen los profesionales que trabajan para el restaurante -y a las personas que escogió la stripper para su número-, no vamos a publicarlos aquí. Además… Youtube los etiquetaría como eróticos, y solo podrían visualizarse bajo registro. Pero bueno… alguna fotillo que despierte vuestra curiosidad por el sitio tenemos… y si no me creeis… continuad bajando.
Es una pena no poder mostraros la cara de los chicos que disfrutan desde su silla -ya no digamos los videos-, porque os aseguro que sus expresiones son de un “no sé qué, qué sé yo” dignas de interpretar. ¡Sin duda se lo estaban pasando en grande! Tanto el que está encima de este texto (al principio del número) como el que está debajo (al final del mismo). Nos mirábamos durante el streaptease echándonos unas risas porque cualquiera de nosotros podría haber estado ahí. ¡Habrá que repetirlo! ¿Quién es el siguiente que está de cumple? ¡Qué avise!
¡Ya veis que el restaurante tiene “chicha”! Bueno, podríamos verlo de otra manera… ¡Tiene de todo menos chicha!
Después de la Chica Bond -ahora que estamos en pleno estreno de la última de la saga 007- llegó el anuncio del supermegaguapo stripper para las chicas. ¡Un Mister Universo espectacular! Así que se creó una expectación en la sala fuera de lo común, sobre todo por parte de las chicas… ¿Y a quién nos encontramos? ¡A Endorfino! ¡Jajajajaja! ¡Qué risas!
Poco a poco sacaba a unas y otras al escenario, haciéndolas partícipes de un número para el recuerdo -sobre todo para el recuerdo de ellas, con un streaptease payasete-. Unas pasaban un poquito de verguenza y otras… ¡Disfrutaban a tope con él siguiéndole la corriente!
Pero después del farol que se marcaron los del restaurante, llegó lo que todas esperaban, el super macizorro cachas para ponerlas a todas mejor de lo que nos había dejado a los chicos la Pócima del Placer que os comenté más arriba. ¡Y salió Ninillas al estrado junto con otras 3 chicas de la sala! Los vídeos son buenísimos, el chico se lo curra -no hay duda- pero… para verlo tendréis que visitar el Templo, nosotros os dejamos alguna fotografía que seguramente despertará las “endorfinas” de muchas lectoras. ¡No es para menos! (En la sección de Ninillas, mucho más sobre el “tema”)
¡Ahí lo tenéis! ¡El Templo del Placer! Un restaurante erótico, con stresptease de chico y de chica, con mucho gancho, con mucho Endorfino, con mucho Chumino -Power-, con muchas risas, y sobre todo… ¡Con muchas ganas de fiesta! No penséis en un local para disfrutar como nunca de vuestro paladar… ¡Pensad más en disfrutar de la lengua!
¡A pasárselo bien! ¡Que de vez en cuando toca!
FlashBack: Ya nos habíamos puesto en situación, en algún artículo previo, sobre lo que viene a ser un restaurante espectáculo. Sin embargo, ¿qué es lo que entendemos por un restaurante temático? Todo el equipo de Cucharete junto con unos amigos con quienes vamos a celebrar una noche de cumpleaños, nos desplazamos sin la más mínima idea de lo que nos vamos a encontrar. No os dejaré con la miel en los labios y me adelantaré en mi artículo hacia unas breves pinceladas de lo que este establecimiento nos ofrece: erotismo, humor, diversión, espectáculo y múltiples sorpresas de las que cualquiera de los comensales puede ser partícipe hasta el límite que se proponga, a no ser por supuesto que el factor espontaneidad le pille totalmente desprevenido, pero en cualquier caso supone un entretenimiento del que todos llegan a disfrutar, y mucho, debido a su originalidad. Puesto que nos lo han recomendado como un sitio especialmente dedicado para celebraciones en grupo, no dejamos de aprovechar la ocasión para poder conocerlo finalmente.
La idea se presenta simpática ya que, tras realizar nuestra reserva y obtener la dirección del local, acabamos en uno de esos restaurantes que muchos estamos acostumbrados a frecuentar en los mediodías gracias a sus suculentos menús del día. Sin embargo, todo se transforma con nocturnidad y así ocurre con el Templo del Placer, un espacio que se hace realidad únicamente durante las veladas en aquellos días cercanos al fin de semana. Claro que, antes de acceder a él, tendremos que lidiar con la barreras que nos presenta el señor Endorfino. Y como una imagen vale más que mil palabras, un video debería valer como un millón más. Así que os invito a acompañarnos a continuación en la aventura de conseguir acceder a esta nueva experiencia. ¿Lo conseguiremos?
Es increíble comprobar, para quienes habíamos conocido este lugar acariciado por la luz del día, la transformación que completa una vez se caracteriza como el Templo. Una misma base de troncos rodeando las paredes, mesas de madera, robustas sillas y caminos conjuntados con servilletas de tela en llamativo color rojo carnoso. Sobre ella, se ambienta acertadamente todo el local haciendo uso velas encarnadas, luces halógenas y unos estores de tela que consiguen aportar la intimidad suficiente para compartir en grupos de variopinto número de asistentes un sinfín de ocurrencias y momentos festivos. De ello parece que se va a encargar nuestro amigo Endorfino y toda su tropa de amigos. Por un momento, pensar en todo ello, consigue envolvernos en un cúmulo de sensaciones donde destaca una gran expectación.
Mesas de tres, de cuatro, de siete como la nuestra y hasta con tantos comensales que darían como para celebrar una boda íntima, pueblan el moderno salón. El conjunto de grises y rojos bajo un mar de pequeñas luces que en algunos instantes nos recuerdan a un mar de estrellas a pequeña escala, permiten dar mucho juego al variar su intensidad y acompañarnos a lo largo de los diversos momentos estelares de la velada. Diversos instantes que llenarán nuestra cena de de una sinfonía de entretenimiento. Eso sí, deberemos ser puntuales a la hora de nuestra reserva o quizás nosotros seremos parte de los primeros compases de la misma. ¡Quien avisa no es traidor!
Es un punto imprescindible el ser observadores puesto que sobre la mesa se encuentran algunos elementos que no suelen ser habitual encontrarse en un restaurante al uso. Así que lancémonos sin pensarlo rápidamente hacia el discreto pergamino que no, no es el menú que vamos a degustar ni el programa de actuaciones que vamos presenciar como ocurre en los conciertos. Se trata de los 10 mandamientos que deberemos de sabernos al dedillo. Rayo os los muestra en su totalidad en una instantánea que parece correr el peligro de salir ardiendo, al igual que tras leerlo, todo nos lleva a pensar que enseguida comenzará a arder mucho más que las delgadas velas que nos iluminan a cada uno de los grupos.
Porque si existen diez mandamientos de obligado cumplimiento, antes de acudir nos daremos cuenta además del protocolo a seguir antes de llegar al local. La fase de la parte previa más importante al reservar nuestra mesa por teléfono será la de elegir un apodo de guerra para quienes hemos osado a formar parte de esta maquinación temática. Esta nomenclatura no sólo servirá para indicarnos donde debemos de tomar asiento, sino que servirá para identificarnos entre el resto de miembros de la sala. Por lo tanto, es esencial elegir un buen nombre original con el que todos nos identifiquemos.
Una vez todos dispuestos y conocedores de las normas, brindaremos por una auténtica noche que haga honor al nombre del Templo del Placer. Esta vez nos acompañan -por orden de antigüedad de aparición en nuestro blog- Marta, Gonzalo, Manu y Carlos. Puesto que tanto las jarras de cerveza como de sangría se sirven en régimen de barra libre, aprovechamos el momento para levantar nuestras copas repletas de esta bebida afrutada tan refrescante en pro de una noche prometedora que, quizás esta vez no lo sea tanto para nuestros paladares, pero sí en su conjunto en cuanto al resto de interesantes elementos que la rodean. Y hablando de un poco de todo, ¿dónde está Endorfino?
Dejémosle estar por unos momentos, ya que llegan a nuestra mesa los primeros platos para compartir. Se trata de unos cuantos llevaderos y con forma de lazo Farfalle a la salsa de Pesto aderezados con aceitunas deshuesadas, taquitos de jamón cocido y pedacitos de queso fresco. Un plato sencillo al mismo tiempo que simple pero que nos sirve para acompañar el resto de bebida que se encuentra sobre la mesa y entretener nuestro estómago a lo largo de los múltiples movimientos estratégicos que ocurren en derredor nuestro como parte del espectáculo.
El segundo de los entrantes, a razón de uno por cada cuatro comensales, es un Arroz con Marisco que, si bien se encuentra en su punto y dispone de unos ingredientes atractivos a nuestros ojos, no sorprende excesivamente al paladar. Así que, reguemos nuestros vasos con sangría y sigamos prestando atención, por la cuenta que nos trae, al escenario que se encuentra en el rincón más cercano al fondo del comedor aunque la acción ocurre incluso encima mismo de nosotros.
Y si no, ¡que me lo digan a mí! que desprevenido de la presencia de Endorfino, me veo obligado a realizar un brusco giro de cuello con el fin de evitar lo que podría llamarse un buen morreo de este ser con aires de “espermasonaje” piloto -por aquello de las gafas que porta- embutido en su estrafalaria indumentaria mezcla de la trinidad formada por un diablo, el fantasma de la sábana y otros peculiares aderezos seguramente de cosecha propia.
No experimentaron menos sus roces y cariños tanto Manu como Carlos. Ya que hay que reconocer que Endorfino es totalmente impredecible haciéndose ganar el afecto de todos y la admiración, gracias a su verborrea cómica que consigue despertar la carcajada de todas las mesas. Uno de esos personajes al que en un primer momento temes pero mientras se mantiene a un metro de distancia de tí, puede acabar provocándote unas grandes agujetas en la mandíbula de tantas y tantas carcajadas seguidas.
De repente, se hace un alto en el espectáculo y en nuestro camino entre entrantes y segundo plato de la cena en el que ha llegado el momento de que todo el restaurante se tome al ritmo dle conjuro del restaurante la esperada Pócima del Placer. Un chupito dulzón, afrutado y ligero que parece tener unos grandiosos poderes que consiguen hacer disfrutar al máximo a quienes lo toman del ambiente erótico-festivo del Templo del Pacer. Para quien quiera más detalles, al vídeo que os enseña Ninillas después de beberse uno de estos “chupitos mágicos” me remito. Esto sí que es todo un ¡efecto inmediato!
Una vez hemos intimado con el resto de comensales del restaurante y nos conocemos todos de primerísima mano, llega el plato fuerte -gastronómicamente hablando- de la noche y se trata de unos colocadísimos en su presentación Solomillos de Cerdo a la Pimienta que vienen acompañados de unas pequeñas patatas cocidas y champiñón en rodajas dentro de la salsa. Un plato más consistente que el resto con el fin de hacer un fondo de estómago para las jarras de sangría con las que, a estas alturas, muchos y muchas ya se han homenajeado.
Para quienes comienzan a echar en falta una compañía para nuestro amiguillo vestido en blanco, con gafas negras y larga cola, aparece ni más ni menos que Chumino Power, su versión travestida -rizando aún más el rizo- que nos deleita con el mejor de los humores ácidos de la velada. Increíble actuación por la multitud de ocurrencias con las que espontáneamente nos consigue hacer cómplices totalmente personalizadas para los comensales que nos encontramos finalizando nuestra en la sala. Y es que es capaz de ganarse la cercanía cómplice de todos a pulso a pesar de permanecer en este caso en el escenario.
Incluso, por si pudiera llegar a parecer poco su espontánea actuación como acompañamiento a nuestros postres -los cuales podéis ver en la sección de mis compañeros-, no duda en marcarse algún que otro baile con la ayuda de aquellos visitantes del Templo del Placer que no han sido capaces de escapar a sus garras. Os dejo a continuación una píldora a modo de vídeo con la que espero que os divirtáis tanto como lo hacen las numerosas mesas que nos acompañan esta noche.
Claro que el verdadero postre y plato fuerte de la cena, no parecen haberlo sido ni Endorfino ni Chumino Power -aunque si suponiendo unas fantásticos entradas-, pasando a un segundo plano cuando aparece Tamara -la amiga salvaje de ambos- revolucionando a todos los asistentes, especialmente a algunos chicos, escogiendo a los tres especímenes del género masculino que la acompañarán en su provocativa y erótica actuación. Un momento que hace subir la temperatura del Templo a un ritmo de pasos agigantados.
No solo su atractiva indumentaria consigue cautivar a muchos varones y féminas, sino que sus sugerentes movimientos y la sutil pero respetuosa manera de hacer partícipe a sus colaboradores en el espectáculo hace disfrutar a todos de cada uno de los segundos que permanece en lo alto de la reducida tarima que hace las veces de escenario.
Como no podía ser menos, no tarda en llegar su complementario en masculino con una extraordinaria masculinidad potenciada con un ligero toque machista que más que seguir subiendo la temperatura, pretende calmar las aguas aportando una alta vis cómica haciendo de pausa indispensable a los momentos previos de la que sí será la auténtica última sorpresa de la velada. ¿Alguien se imagina qué o quién puede ser?
En efecto, ¡seguro que todos lo habéis acertado! La velada cierra con la auténtica parte del espectáculo dedicada a poner en un aprieto esta vez a algunas de las chicas que acaban de finalizar su cena entre las que selecciona igualmente su equipo de actuación. Aunque algunas de ellas nos lo podrían relatar de primera mano -nunca mejor dicho-, delego esta tarea en nuestra querida Ninillas que os podrá contar los entresijos de su experiencia personal.
Una vez adentrados en el maravilloso mundo de los restaurantes temáticos, podríamos llegar a la conclusión de que no culminaremos nuestra velada deleitando al paladar con unas auténticas exquisiteces, aunque su original ambientación, el completísimo espectáculo y su diferente orientación participativa lo convierte en una opción a tener muy en cuenta tanto para sorprender como para sorprendernos a nosotros mismos en fiestas especiales, despedidas, cumpleaños e incluso bodas que no deseemos que se acojan a los patrones estándares creados socialmente en torno a este tipo de acontecimientos. Una ocasión de compartir una serie de actuaciones divertidas y atractivas aptas para todo tipo de gentes, géneros y edades -mayores de dieciocho años, por supuesto-.
Ninillas: Señoras y señores… ¡Hoy nos vamos de fiestaaaaaaaa! Ya iba tocando un restaurante que se saliera de los parámetros convencionales y… Aquí lo tenéis: El Templo del placer. Sólo con el nombre uno ya puede intuir de qué va el asunto, pero por si acaso hay algún despistado, nosotros os mostraremos un reportaje muy, pero que muy gráfico de lo que allí podéis encontraros.
Pero vamos a comenzar bien, por el principio, como debe ser. Íbamos de cumpleaños y nos apetecía hacer algo distinto, buscábamos un restaurante espectáculo y sobre todo… diversión, mucha diversión. Nos hablaron del Restaurante El Templo del Placer y decidimos darle a la reunión cumpleañera un toque más erótico-festivo. Llamamos, reservamos, y nos pidieron un nombre de grupo facilitándonos la contraseña secreta para tener acceso al recinto. Nos costó un poco pensar el indicado, pero al final dimos con uno. Esa noche de sábado íbamos a ser “Los Orgásmicos”.
Con puntualidad inglesa -como ellos mismos nos habían indicado en un mail que recibes dos días antes de la cena- nos presentamos en la puerta a las 10:00 PM y, poco a poco, todos los grupos iban dando la contraseña a un “tipo” difícil de definir, y que minutos más tarde supimos que era nada más y nada menos que el Doctor Endorfino. Porque claro, en todo buen templo que se precie se ha de rendir culto a una Diosa y en El Templo del Placer esa Diosa es Endorfina, de modo que el Doctor Endorfino viene a ser una especie de representante de la Diosa en la Tierra o más bien en El Templo.
Tras cruzar la puerta nos hicimos la foto obligada de grupo en su fotocall, la muestra inequívoca de que “Los Orgásmicos” iban a disfrutar esa noche de los placeres divinos y humanos en el Restaurante El Templo del Placer. Nos condujeron a nuestra mesa y lo primero que pude apreciar es que todos los allí presentes tenían la misma intención: pasarlo bien a toda costa.
El Restaurante El Templo del Placer podríamos ubicarlo dentro de la categoría de restaurantes temáticos, afinando más, yo diría que de tipo erótico y, por supuesto, salpicado de humor, mucho humor. Está muy focalizado en despedidas de soltero, también de soltera, divorcios, cenas de empresa, cumpleaños y en general en cualquier grupo, ya sea grande o pequeño, con ganas de ver algo distinto y dispuesto a romper con los límites establecidos. Es por ello que no tiene unos días de apertura convencionales, sólo abre los sábados por la noche, y llegada la primavera también los viernes.
El Restaurante El Templo del Placer no es precisamente un sitio que sobresalga por la decoración. Se ha buscado un espacio agradable y diáfano donde cualquier mínimo detalle no pase desapercibido en ninguna mesa y todo el mundo pueda disfrutar del espectáculo. Además cuentan con un escenario, aunque dado que estamos en un templo, yo lo llamaría más bien altar, que es donde se desarrollan todas las actuaciones.
Por lo demás, ya os digo, poco que contar, paredes grises haciendo juego con las sillas, mesas de madera vestidas por caminos rojo pasión -no podían ser de otro color-, y como acompañamiento, una vela para que empiece a arder el fuego que llevamos dentro.
Antes de cenar, y sin excepción, uno debe leer detenidamente los 10 Mandamientos del Placer y, por supuesto recitar alto y claro su conjuro:
Si se dice, se hace.
Si lo hace un@, lo hacen tod@s.
Si se puede imaginar, se puede hacer.
Es decir, que una vez dentro, uno tiene que ser de mente abierta, receptivo, y sobre todo operativo. Y si no… ya veréis ya.
Dado que es un restaurante para grupos, la cena es a menú cerrado. Por 44 € -50 € en Diciembre- ofrecen una cena compuesta por 3 entrantes -en raciones que se distribuyen por cada 4 comensales-, un principal, un postre y tanta sangría y cerveza como tu cuerpo sea capaz de asimilar. La sangría es flojita y la bebes como zumo, o eso creía yo… porque tras unas 6 copas más o menos, lo cierto es que mi cabeza no estaba al cien por cien.
Comenzamos con un Farfalle a la salsa de Pesto, pretendía ser una ensalada de pasta, en concreto de lacitos, con aceitunas, jamón york y queso fresco. La realidad es que se trataba de un plato lleno de lacitos con 4 trocitos de cada cosa y 4 aceitunas. En cuanto a cantidad, hombre, estirarse no se estiraron mucho, dos platos para 7 personas. Mire por el resto de mesas y venía a ser una ración por cada 4 personas.
Entre plato y plato, el Doctor Endorfino iba segregando su sustancia a base de verborrea y gracia natural. Daba rienda suelta a los instintos más primitivos y nos adoctrinaba con las enseñanzas básicas de su Diosa Endorfina. Vamos… que el tío iba de allá para acá y no sabías por dónde demonios iba a salirte, si con el rabo de demonio para atrás o el de salido hacia delante.
Tras la ensalada nos llegó a la mesa un Arroz de Marisco, igualmente dos platos para 7 personas, mostrado por mis compañeros. Yo os muestro unos Crêpes, que suponían nuestro tercer entrante. Servían uno por persona, y bueno, fue lo que mejor me estuvo, iban rellenos con carne picada y un poco, poquito, de jamón. Tenían su aquel.
Antes de cambiar de tercio fueron llegando a las mesas estos chupitos, que allí llaman la Pócima de Placer. Con un sabor que recordaba al jarabe para la tos, se suponía que al tomarlo a los hombres se les elevaba su espíritu más íntimo y a las mujeres las dejaba muy preparadas para… En definitiva, que era la leche la Poción.
Lo cierto es que, ya sea por la poción, por las ganas de aquella noche de todos los allí congregados, o por algo tan simple como el Doctor Endorfino agitando su rabo entre mesa y mesa… nos empezamos a animar y mucho, y sino no vean esta pequeña muestra.
Acto seguido, hubo que levantarse e hicimos una conga que iba recorriendo todo el restaurante. Al final, todo el mundo levantó el culo del asiento y se unió al recorrido porque claro, si vas es para disfrutar y no para calentar la silla, de modo que si hay que levantarse y bailar, se hace, si hay que salir al escenario y sufrir con un maromo mientras… ¡Uy! Creo que me estoy adelantando.
Tras el baile volvimos a darle al diente, en este caso se trataba un Solomillo de Cerdo a la Pimienta -la otra opción era Lubina-. El solomillo… pues qué os voy a contar, no era nada del otro mundo, aunque eso sí, la ración era generosa.
Justamente antes del postre, hizo acto de presencia otra diosa, esta vez muy terrenal, en forma de dragqueen. Su nombre lo decía todo: Chumino Power. Su estatura era proporcional a su talento. Irónica, sarcástica, divertida… No hay suficientes calificativos para describirla. Sin duda, me hizo pasar uno de los mejores momentos de la noche, se me saltaban las lágrimas con cada uno de sus comentarios. Aunque no me cabe la menor duda de que no les hizo tanta gracia a los voluntarios obligados a los que dejó en cueros literalmente -como muestra el vídeo que tiene Rayo-.
Y he aquí el postre: Ambrosía de Zeus. Una ración generosa con sabor a toffee, que con la sangría mezclaba muy, pero que muy bien, o al menos a mí me lo pareció.
Tras la cena, el ambiente se calentó y mucho, sobre todo se calentaron los tres afortunados que disfrutaron en primera línea de la Conejito Tamara, una preciosidad de chica con curvas de escándalo que se marcó allí una coreografía de lo más sugerente e hizo las delicias del sexo masculino. Las caras de los que tocaron la mercancía, son dignas de ver, pero no en Cucharete, más que nada por respeto.
Como contrapunto a Tamara, a las chicas nos llegó Míster Carabinero, una especie de Míster Universo venido a menos, que si bien no desprendía mucho erotismo, sí supo sacar muchas risas e hizo que pasáramos un buen rato.
Pero claro, no hay dos sin tres, y aún quedaba por llegar al escenario “el hombre”. Porque decidme -sobre todo vosotra-s como llamaríais sino a este pedazo de maromo que estaba de toma pan y moja.
Pidieron voluntarias para salir a su lado, y yo… pues mira, “pa allí” que fui, no fuera a ser que me quitaran el sitio, que sólo había cuatro, y preparamos la cámara cucharetil para tomar las mejores instantáneas de su número.
El chico, como podéis apreciar, estaba muy, pero que muy, muy bien. ¡A ver esos comentarios de las lectoras! ¿Qué os parece? Se notaba su experiencia en el tema, pues todas las chicas de la sala disfrutaron con su sensual streaptease.
Tras el streaptease, continuamos dando buena cuenta de la sangría, y alguno que otro se pidió una copa. Estuvimos allí hasta las dos de la madrugada. Cuando salimos de allí, una bocanada de aire fresco, demasiado, me recordó que estábamos en el planeta Tierra y que los placeres divinos y humanos habían quedado atrás. Pero lo que no van a quedarse atrás son mis conclusiones, que esta vez van a ser breves y muy intensas. El Restaurante El Templo del Placer hay que tomarlo como lo que es, un sitio para disfrutar de un show erótico-festivo donde la gastronomía pasa a un segundo plano. Hablar de texturas, puntos de cocción o sabores, tiene poco sentido en El Templo, sobre todo cuando puedes disfrutar de Endorfino, desternillarte de risa con Chumino, alimentar la vista con Tamara o pensar que existe un mundo mucho más proporcionado con “mi boy”. En definitiva, que ir al Templo del Placer es la opción ideal para pasar una noche cargada de bailes, erotismo y grandes dosis de humor. Yo espero volver dentro de no mucho tiempo.
Cucharete: ¡Vaya fiestorro que se pegó el equipo cucharete! Si es que les dejas solos y se me escapan al sitio más insospechado: ¡Un restaurante erótico con streapteases y todo! La verdad, es que no hay más que leer detenidamente el artículo para ver que se lo pasaron de lujo en El Templo del Placer, seguramente estarán esperando a que aparezca cualquier excusa (un cumpleaños, una despedida de soltero, de soltera, una fiesta, una cena de empresa…) para regresar de nuevo. ¡Que los conozco! Mi equipo cenó por 44 €/persona, siete personas con 3 entrantes, 1 plato principal, postre y barra libre de sangría y cerveza.
Endorfino, que nos acompaña desde la entrada. Chumino Power, genial, se mire por donde se mire. Los streapteases del chico y de la chica. La barra libre de cerveza y sangría. El ambiente de fiesta de todos los asistentes.
La cocina no es su fuerte, pero queda compensado por las actuaciones.
3,9
12 comentarios a “El Templo del Placer”
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Muchas felicidades chicos, me ha sorprendido ver por aqui al Templo. Estuve hace unas semanas, en un cumpleaños, buscábamos algo original y la verdad lo conseguimos, repetiremos tan pronto podamos. Nos lo pasamos de miedo, no paramos en toda la noche de bailar, cantar, reir…… a la cumpleañera la sacaron al escenario y yo no os puedo ni contar cómo acabe la noche, jejeje.
Animo chicos y os felicito por vuestra profesionalidad y hacer de un cumpleaños un día tan especial
La verdad que nosotros si que nos lo pasamos bien en el Templo, fue una experiencia inolvidable
Es mas… Al final el novio se arrepintio y no se casa…………… Jajajajaja son bromas.
No tenemos nada que decir fue todo un espectaculo y la organizacion un 10 y esperamos vernos pronto
Tenemos fotos muy comprometidas http://www.eltemplodelplacer.com/blog/?s=los+platanos+canarios
Jajajaja. Menos mal que no han salido publicadas en el blog.
Chao saludos a todos y especialmente Eduardo enhorabuena a ti y a todo tu personal, hasta los camareros.
;D
Cena de empresa:
Este año ya sabemos donde celebrar nuestra cena de navidad, muchas gracias Cucharete. Esto era justo lo que buscabamos.
Decidimos salir a cenar una noche a un sitio diferente y llamamos al Templo … vaya nochecita!!! Risas, solomillo, sangría, chicos, boy … ¡¡Es el mejor con diferencia!! Muy recomendable
Buenas tardes, estube con unas amigas en el templo del placer y queria comentar que la decoracion me parecio espectacular y el trato genial , me impresiono porque me parecio un sitio diferente con una cena riquisima y sobre todo pase mucha risa , hay que repetir.un saludo
Aprovecho que en cucharete son un poco templarios para trasmitir mi felicitación y agradecimiento al restaurante por el servicio prestado en la despedida de mi amiga Sonia. Gracias por vuestro saber hacer, por el trato prestado y por hacer que disfrutáramos y lo pasáramos fenomenal.
El sitio estuvo genial, la comida muy buena y los espectáculos fueron muy divertidos y entretenidos, pero sobre todo me quedo con lo bien que nos habéis tratado en todo momento, tanto en la gestión previa como en la despedida el mismo sábado.
Nos encantó el maestro de ceremonias griego, buenísimo, animando todo el tiempo e implicando a la gente. Realmente lo pasamos muy bien, y la novia está encantada con su despedida, que al fin y al cabo es lo importante.
Trasmitirle mi felicitación y agradecimiento también a Jose Luis.
Seguiremos en contacto para futuros eventos de este tipo que puedan surgirme y para cualquier cosa que necesitéis,
Un abrazo
Genial artículo para el no menos genial restaurante erótico-humorístico-festivo de la noche sabadera madrileña!!
Me habéis ayudado a recordar (con tanta barra libre algún detalle se resiste a salir de nuevo a la consciencia) aquella noche en que sucumbí a los placeres más terrenales sin necesidad de salir del Olimpo!!!
Genial rotura de hielo, Genial presentación, Genial organización, Genial ambiente, Geniales actores, chuminas, boys & girl, decoración, iluminación…GENIAL NOCHE la de aquel día..fue una mezcla tal de risa, sorpresa, sensualidad, acidez (de Chumina claro, la comida sienta de miedo cuando estás tan…bien), que sin duda sabes que quieres volver a formar parte del reino de los dioses…placenteros, por supuesto.
Gracias por transportarme de nuevo al Olimpo, gracias Edu, Joselu, Endorfino y Cía, por tratarnos con tanto cariño (Endorfino lo demuestra sin tapujos) y a los que no conocéis el Templo pero sí el placer..animaos a mezclar el terrenal y el divino en este lugar!!
Espero volver por navidad como el turrón!
Un abrazo,
una Templaria.
Soy del grupo Puros Arteche y puedo decir:
¡YO TAMBIEN ESTUVE EN EL TEMPLO DEL PLACER!
Mi experiencia fue especial, porque en el día más importante de la vida de mi amigo Carlos, SU DESPEDIDA DE SOLTERO, fue “Comando Actualidad” programa de TVE al Templo del Placer, Al principio estabamos algo cohibidos, pero no sé que es lo que tiene ese restaurante, un ambiente que te envuelve, los animadores, los espectáculos, la barra libre de sangría, el resto de tías de otras despedidas, las ganas de cachondeo… no lo sé; será una mezcla de todo… pero nos olvidamos de las cámaras… y sacamos el lado más salvaje que llevamos dentro..
No puedo decir más, Hay que estar allí y vivirlo para poder explicarlo.
Os dejo el link de Puros arteche,
http://www.eltemplodelplacer.com/blog/?s=puros+arteche
Muchas gracias Cucharete y muchas gracias a todos los que habéis estado en este restaurante… “El Templo del Placer” y opinado sobre el… la verdad es que vaya nombrecito… ya tengo ganas de que llegue el día.
Todos los años, llegadas estas fechas, quedamos todas las amigas que nos conocimos en el Instituto, y organizamos, ahora que ya rondamos la treintena y algunas tienen hasta niños, una cena para recordar viejos tiempos y ponernos al día, y este año le ha tocado a una menda lerenda… y me habéis ayudado mucho, muchísimo, ya que llevo varias semanas buscando algo nuevo, algo original, algo divertido y que les pueda dejar a todas perplejas y no olviden con facilidad, y ya lo he encontrado.
He llamado al Templo, que por cierto me ha atendido Eduardo y fenomenal, y he reservado mesa para el próximo jueves 11 de diciembre, cosa que me ha extrañado ya que se decía que sólo abrían los sábados, bueno, igual es por las Navidades, lo que os iba contando y con esto acabo, he reservado una mesa para diez, bajo el nombre… “Salidas de emergencia buscan extintores grandes y seguros”..jejejeje… ya os contaré como nos lo pasamos, aunque por lo que opina todo el mundo, imagino que será una noche para espectacular!!
Muchas gracias de nuevo Cucharete y seguid así, la verdad es que con vuestros artículos, críticas y opiniones, nos ayudáis muchísimo a la hora de elegir un restaurante en la gran jungla de los Madriles…. MIL BESOS!!!!
Hola, soy de un grupo que en su momento se hizo llamar “campanilla y las chochis”, la verdad es que cuando me preguntaron el nombre de grupo me había parecido como de cachondeo, pero no pensé que fuera a ser tan importante luego ésto de tener un nombre que nos distinga.
Lo bien que la hemos pasado lo que nos hemos reído, vamos, una pasada.
Impresionante el animador, el endorfimo éste, nos hizo morir de la risa, en todo momento pendiente de todo y con una marcha como pocos.
La atención tanto previa como en el mismo restaurante es impecable, y si les toca la atención personalizada de Edu, mejor ni les cuento, una de mis amigas todavía está pensando…jejejeje
nos han sacado fotos, hemos bailado, hemos participado de los espectáculos y nos llevamos un recuerdo increible del lugar, seguro volveremos.
Anda que los Cucharetes me llevan a unos sitios, que cualquiera de estos días “me rajo….” :-))
La verdad es que pasamos un muy buen rato, incluso para mi que soy un poco vergonzoso para estos temas (jajajajaja!!!!, me moría de la risa!!!), pero seguro que fue porque no me tocó ni subir al escenario, ni participar más que de las risas y de las “panorámicas”, y solo de algún que otro susurro al oído por parte de Endorfino (en otro caso, OTRO GALLO CANTARÍA, jajajajaja….).
Desde luego es un sitio más que recomendable para ir en pandilla, en donde la comida queda por supuesto en segundo lugar ya que lo principal de todo es el cachondeo y pasar un rato más que divertido. Y esto último, garantizado desde que entras por la puerta del local, hasta que sales….. Jajaja….qué bien me lo pasé!!!!
Un saludo a todos los Cuchareteros…..y Felices Fiestas!!!
Sabiendo a lo que va uno…pues bueno, vale…pero desde luego deja mucho que desear, son lentos, los tiempos entre platos aburridos, porque el único que lo intenta es el tal Endorfino, maestro de ceremonias con chistes y chascarrillos anticuados y a veces tontos que no te provocan ni la risa…El resto de animadores…pues venga, como relaciones públicas en una disco cojonudos, pero para animar el cotarro…no!. Los espectáculos, los de siempre, la Drag con chistes del siglo pasado y la striper y boys, cuerpazos, pero no deja de ser lo mismo que en otros sitios. El local amplio, pero cuando llegas allí no es lo mismo que aparece en su web, parece una nave adaptada, y si encima hace frío como el día que estuvimos nosotros, te congelas con las puertas constantemente abriéndose para salir a fumar. La comida, mejor ir de tapas o a un buen restaurante y gastarse el dinero en buena comida, y luego ir a algún sitio a tomarse una copa con espectáculo, está mala, sin sabor, la lasaña de setas (eran champiñones bañados en limón o vinagre para camuflar el sabor y la negrura), yo probé el pollo, sin comentario. ¿Y que luego tienes una copa en el Keeper?, sí, pero no marca conocida, así que ahórrate el viaje hasta Juan Bravo y ve a la zona por la que quieras salir porque no merece la pena. ¿Quereis otro comentario más?, te roban, hay que andarse con cuidado con todo lo que dejas encima de la mesa y alrededores, nos quitaron un Iphone de encima de la mesa, y sin acusar a nadie…los únicos que se acercaron a la mesa fueron camareros y el equipo animador, claro que ellos le quitan importancia, sobre todo el Jefazo, que no abrió la boca ni para decirnos dejadme un teléfono de contacto que por lo menos si aparece os llamamos, en fín, que delicadeza la mínima, y luego enterarte de que les pasa todas las semanas porque nos lo comentó alguien de dentro…En fin, si es vuestra primera despedida o salida de este tipo, es un sitio flojo y cuando has ido a otros te parece tremendo pagar por lo que te dan…es malo de naricess!!!!