-
Ramos Carrión, 6
Madrid (Chamartín)
Alfonso XIII (Línea 4)
91 413 71 55
35 - 50
Encontrar el Restaurante El Secreto no es tarea fácil, pues su nombre ya nos indica que está bien escondido, por lo que esperamos daros suficientes pistas para que podáis desvelar su ubicación. Su comedor -en el que está permitido fumar- tiene capacidad para 85 comensales. Ofrece un menú del día a 15 € + IVA de Lunes a Viernes que varía diariamente, además de un menú degustación disponible de Martes a Jueves a 35 € -IVA incluido-. Los platos que muestra su carta, basada en una cocina tradicional con toques de autor, presentan raciones muy generosas. Su horario de apertura es de 13:30h a 16:15h y de 21:00h a 00:00h. Cierra los Domigos todo el día y los Lunes por la noche. Disponen de 2h de parking gratuito en el Hotel Confortel de la C/ López de Hoyos, 143.
4,5
AVISO: Este restaurante ya no existe.
Rayo: Hoy no sé si os voy a presentar el Restaurante El Secreto o el “restaurante secreto”, porque su localización se las trae… ¡Os aseguro que no lo encontraríais a la primera sin nuestra ayuda! Claro que… para eso está Cucharete, para ayudaros a descubrir lugares que merecen la pena, así que esperamos explicar claramente dónde se encuentra ubicado, pues a mi parecer, es obligado llegar a su comedor y disfrutarlo como mandan los cánones, con una magnífica velada a la carta.
Su dirección oficial es C/ Ramos Carrión, 6, continuando la calle en la dirección del tráfico tras pasar el Parque del Banco, justo donde marca el gracioso cucharetillo en el mapa que precede a estas líneas. Pero el secreto está en que en ese mismo punto del plano, hay una callejuela privada a la izquierda, ¡y es por ahí por donde os tenéis que meter! ¡Ese es el “Secreto”! Si os fijáis bien, nos lo indica también un luminoso blanco con una flecha, pero lo tapa un poco el enorme árbol de la calle. ¡Investigad un poco! ¡Descubrid el secreto! (Tienen 2h de parking gratuito concertado con el Hotel Confortel -a 150m del restaurante- en la C/ López de Hoyos, 143, por si vais allí directamente).
El restaurante El Secreto es uno de los locales de nueva apertura en Madrid -de esos que a todos nos gusta descubrir y experimentar en primera persona- lleva abierto un año exactamente y su nombre está basado en el aclamado mensaje -con gran repercusión en todo el mundo- de Rhonda Byrne, quien basándose en la Ley de Atracción, explica que la energía fluye donde concentras tu atención. Así que… queridos lectores… ¡Tenedlo en cuenta! ¡Si deseas algo con todas tus fuerzas, podrás conseguirlo! ¡O eso dice “El Secreto”! -el libro-.
Brenda Barnaby llega más lejos todavía con “Más allá de El Secreto” -publicado recientemente como una explicación mentalista de todas las claves de su predecesor-, así que quizás en este restaurante, continuando el discurrir literario… ¡Vayan cada día también a más! Y año tras año tengamos ¡una nueva versión mejorada!
Al entrar, nos encontramos a la izquierda una especie de “fotocall ajedrecista” que bien dará un jaque mate a cualquier famoso que se acerque por allí -hemos encontrado algunas fotos que así lo certifican por la Red-. Así que si queréis un recuerdo… ¡Click! ¡Foto al canto!
Unos pasitos más, y una enorme planta nos deja entrever un sinfín de tonalidades rojas que definen el clima que disfrutaremos en el Restaurante El Secreto a lo largo de nuestra estancia.
Enormes lámparas cilíndricas -apoyadas por un pequeño ejército de halógenos- se encargan de distribuir la luz en el salón. Un ambiente cálido, seductor… ¡Apasionado! ¡Red Power!
No destacan por sí mismas ni la vajilla, ni la cubertería, ni la cristalería, pero conforman un “todo” que sí conjuga perfectamente con el entorno, mesas vestidas con doble mantel y servilletas de tela viviendo en un ambiente rojo pasión marcado por gruesas líneas negras que marcan su personalidad -guardando los secretos de los comensales en una “cárcel” de lo más pintoresca y moderna-.
Las mesas están suficientemente separadas unas de otras para que el espacio se torne agradable -a pesar de los ecos que se producen cuando el local está lleno a tope-. Las más elegantes son las redondas de mantel negro, con su gran lámpara vigilándolas en todo momento. ¡Coged una si están libres!
Observando la mesa de cuatro que aparece en la imagen que os muestro a continuación… ¡Dan ganas de regresar al Secreto! ¿A vosotros no os despierta el apetito?
La vela que marca la mesa lo convierte en un restaurante romántico muy a tener en cuenta cuando buscamos un lugar que nos haga disfrutar en una ocasión especial, nada mejor que proteger nuestros más valiosos secretos a la luz de una coqueta vela. La iluminación recorre suavemente el local tintando la luz blanca con un poquito de color que no molesta en absoluto.
La fotografía anterior llama la atención e invita a visitar el restaurante, no lo discuto… Pero es que la que viene a continuación pone la guinda que falta a todos los hasta ahora indecisos, una mesa prácticamente solitaria, al lado de una de sus ventanas del ala derecha del local, perfecta para cerrar cualquier negocio mientras disfrutamos de la buena mesa. ¡Qué paz!
A medida que nos alejamos del pasado y van pasando los minutos, la luz se vuelve todavía más tenue y las mesas ganan presencia y encanto acariciando un clima misterioso a la vez que sensible y tierno. El local se llena de atractivas velas flotantes sobre granadina -bien roja, como no podía ser de otra manera en este salón- que los camareros encienden en cada mesa. Nosotros llegamos los primeros -justo a la hora de apertura- y visualizamos detenidamente todo el proceso mientras realizaba las fotografías, de ahí que no salgan todas las mesas con su “redondo barquito luminoso”.
Pero dejemos a un lado los tonos rojo pasión que nos dejan con las ganas de ir a conocerlo y vayamos directamente a hincarle el diente al Restaurante El Secreto para ver si realmente merece la pena, que para eso estamos aquí los cucharetes, esta vez acompañados por Mario, un compañero mío, que también se trajo a un amigo. ¡No come mal el chico!
El Secreto nos ofrece un menú del día a 15 € +IVA con unos platos muy llamativos para tratarse de un menú diario, así como de unas raciones más que generosas, eso es lo que me comentó Mario -que comió a mediodía un Cocido Completo que le impresionó gratamente-, y por eso cité a todo el equipo de cucharete esa misma noche, para probar su carta y verificar de primera mano las opiniones de mi colega sobre el mismo.
Éramos cinco personas, y después de estudiar minuciosamente la carta y dejarnos recomendar en la medida de lo posible por el servicio, optamos por 4 entrantes, 5 platos principales y 3 postres -porque estábamos literalmente a reventar, y sin probarlos no nos podíamos ir-.
Comenzamos con unas Croquetas de boletus que os presentan mis compañeros y que estaban bien ricas, aunque no llegaron a enamorarme del todo -lo siento, pero las de mi abuela Teresa…. es lo que tienen-, claro que, no te ponen 10 piezas en todos los sitios, se trata de una ración más que contundente, perfecta para compartir. Le siguieron unas Delicias crujientes mar y montaña con cebolleta y su mojo thai que me resultaron más divertidas. Ocho piezas presentadas sobre una pizarra, que llega caliente a la mesa, y que pudimos disfrutar mientras comentábamos experiencias cucharetiles a nuestros acompañantes desde que comenzamos con este proyecto grastronómico. ¡Qué risas!
Impresionante la generosa ración de Ensalada de jamón de pato, calamarcitos y langostinos al balsámico -Ninillas os la presenta en primer plano-. Además… ¡Estaba riquísima! Venía salteada con frutos secos y aderezada con un guiño de módena. La compartimos entre todos y no hubo problema alguno de racionamiento, la verdad es que sorprende la generosidad de los platos del Secreto sin que ello conlleve una reducción de la calidad ofrecida teniendo en cuenta el intervalo de precios en el que nos movemos -que a pesar de no ser económico tampoco es de lo más exclusivo-.
Al igual que la ensalada anterior, las Vieiras albardadas con jamón bellota y salmorejo son plato obligado en el Restaurante El Secreto. ¡Buenísimas! Por no decir… ¡Buenisisisisisísimas! No os las perdáis, porque es un plato redondo. ¡Qué “placer paladariego”! Todo conjuga a la perfección, la vieiras, el jamón de bellota, el salmorejo… ¡Sólo por este plato merece la pena visitar El Secreto! Fijaos detenidamente en la imagen… acercaos a la pantalla… despacito… ¡Cuidado que se os cae la baba chicos!
A todo esto, con el gustazo de las vieiras se me había olvidado indicaros los vinos que disfrutamos en esta ocasión, que por cierto se ofertan a unos precios muy competitivos en carta -pensad que encontramos un Blecva a 70 € y un Valbuena 5º Año a 80 €, y todos sabemos qué precios lucen en otros locales similares, mucho más elevados-. De todos modos, nosotros para los entrantes optamos por un Vallegarcía Viognier 2006 por recomendación directa de nuestro camarero. ¡Y no se equivocó en absoluto! ¡Un Vino de la Tierra de Castilla Buenísimo! Amplio y cremoso, llenándonos la boca de sensaciones frutales. A 21,40 €, merece la pena que lo probéis. Y para los platos principales nos decantamos por un Pedro Martínez Alesanco Crianza 2005 de la D.O. Rioja, que nos sorprendió gratamente a todos. Tempranillo y garnacha con 14 meses en barrica que deja atrás a muchos conocidos de gama alta. ¡Y tan sólo a 12,90 € en El Secreto! ¡Aprovechaos!
¡Llegan los platos principales a la mesa! Aquí tenéis a Mario con la Lechona confitada con puré de reinetas, escarola con granada y chips de ajo. El plato sale borrosillo en la foto, no me extraña, Mario nos viene con chaqueta y corbata y la cámara -que no es tonta- ¡es lo que enfoca! ¡Hay que j*d*rs*! -Ninillas os lo presenta nítidamente en primer plano-. Como imaginaréis, todos probamos un poquito de todo -como siempre- con los tenedores volando de lado a lado, y la lechona estaba… ¡De muerte! ¡Deliciosa! ¡Qué bien había elegido Mario! ¡Qué envidia! Los lectores carnívoros que probéis el plato, ya nos lo contaréis en los comentarios… Se notan las 3 horas que lleva encima su elaboración y le va como anillo al dedo esa crema de reinetas.
Su colega prefirió el Solomillo de buey con salsa de trufa y tagliolli al parmesano, que presentaba una materia prima de gran calidad -aunque no de las mejores que he probado- y que disfrutó enormemente, pues la ración, en consonancia con las demás viandas, era más que generosa. Para mi gusto, era excesivo el baño de salsa de trufa, pero he de reconocer que le iba francamente bien, se nota la experiencia del Chef en todos los platos que iban saliendo, pues las mezclas de sabores estaban muy conseguidas. Ningún plato nos disgustó.
Ninillas dio buena cuenta de su Taco de bacalao con salsa de cebolla y miel de tomillo y FlashBack de su Corvina a la brasa con coca de verduritas asadas y salsa de hinojo. Yo por mi parte… le di caña a una Perdiz guisada al chocolate con migas y uvas. ¡Muy buena! Y… ¡qué bien le quedaba la salsa de chocolate! Una excelente pieza estofada con cebolla, vino blanco, ajo, canela y laurel, que junto con esa salsa de chocolate -que repito, estaba deliciosa- hacían del plato un auténtico placer cucharetil. Si la pedís, ya me diréis qué os parece.
Es una señora ración -como podéis apreciar en la imagen- a la que -como el nombre del plato indica- acompañan unas migas -riquísimas, por cierto- y unas pequeñas uvas. ¡Un plato de lo más sabroso!
¡Estábamos a punto de reventar! Claro que, por mi parte, tampoco quedó nada en el plato -es lo que tiene cuando todo está bueno-. Y allá que nos fuimos a por el tercio de postres, eso sí, únicamente tres, pues llegaban de sobra para compartir los cinco. Personalmente, los considero excesivamente caros para el restaurante en el que nos encontramos, pues van desde los 8 hasta los 9,50 € del Secreto de chocolate -que hay que pedir al inicio de la comida- y los sorbetes los encontramos a 7,25 €. Cierto es que la calidad prima por encima de todo en las fantásticas sobremesas y podrían llegar a justificar su precio, pero se escapan a las posibilidades de mucha gente que pierde el placer de poder probarlos por el “acongoje” que les supone el verlos en carta.
Aquí tenéis una sabrosísima Pasta filo con manzana al aroma de almendra y helado de baileys. ¡Qué buena estaba! ¡No nos cogían las cucharas! ¡Había peleas! El helado de baileys delicioso, muy recomendable. ¡Y muy fresquito!
Y llegamos a la foto “tontolaba” de la noche, no hay más que verme la cara, y es que de vez en cuando toca salir con cara de gili en Cucharete, pero no cabe duda de que la Sopa de piña con gelée de frambuesas y croqueta de chocolate bien lo merece. A pesar de no ser uno de los postres que más me encandiló, nadie puede negar que su presentación es de lo más curioso. Se trata de una sopa de piña con ginebra y frutos rojos que resulta muy sabrosa, acompañada de unas croquetas de chocolate que no llegaron a convencerme del todo.
El Secreto de chocolate y helado de naranja sanguina -que tuvimos que pedir al inicio de la cena, por su delicada y lenta elaboración- es la sobremesa más exclusiva de la carta y está realmente deliciosa. Os muestro el coulant abierto para que observéis su corazón naranja -FlashBack y Ninillas lo hacen con el postre presentado tal cual llega a la mesa-. ¡No os lo perdáis! Aunque no sabría si decantarme por éste o por la pasta con helado de baileys…
Habrá que regresar en un futuro para descubrir algún secreto más que este nuevo restaurante madrileño pueda ocultar en su carta y nos haya pasado desapercibido. ¡El mundo está lleno de secretos por descubir! ¡Y el Restaurante El Secreto es uno de ellos! ¿Os ha quedado claro dónde está? ¡Pues a por él!
FlashBack: Nuestro mundo se encuentra repleto de misterios ocultos. Prueba de ello es que, incluso en la faceta gastronómica que nos afecta de pleno, nos topamos con locales tales como el Restaurante El Secreto que así lo atestiguan. Secreto por múltiples motivos: cuenta apenas con un año de vida en la palestra, parece esconder una cocina bastante recomendable -tal y como los rumores han hecho llegar a nuestros oídos- y su situación en el entorno de la Avenida de América es altamente discreta. Algo que comprobamos en nuestra propia experiencia cuando alcanzamos la dirección indicada y debemos acceder al paso estrecho perpendicular en el que se encuentra finalmente este establecimiento.
Aunque haya comenzado de tan enigmática manera, no es mi intención convertir este artículo en una versión culinaria del exitoso programa de Iker Jiménez. Así que, comenzaré a transformar lo desconocido en un gran libro abierto que os acerque lo máximo posible a este singular restaurante.
La primera impresión que obtenemos es la de un espacio moderno, íntimo y con la particularidad de que raramente encontraremos a comensales que lo conozcan por casualidad -debido, como comentaba, a su particular localización-. En la zona, además, es complicado estacionar entre semana pero parece que han tenido en cuenta este aspecto y todos sus clientes habituales conocen el acuerdo que tiene establecido con el aparcamiento privado del Hotel Confortel con dirección López de Hoyos, 143, que nos permite mantener nuestro automóvil a buen recaudo gratuitamente durante dos horas. ¡Un gran alivio! No deseo ni por asomo imaginarme lo que supondría de otra forma acudir un martes, miércoles o jueves y verme involucrado en la gran batalla de numerosos vehículos en doble fila que suelen encontrarse por la zona en busca de un estacionamiento disponible. Digamos pues, que una vez satisfechas nuestras necesidades primarias de acceso cómodo al local, nos decidimos a comprobar el resto de prioridades de la pirámide que todo buen restaurante debería proporcionarnos.
Bajo un distintivo logotipo en blanco sobre negro algo complicado de leer -razón suficiente para que prestemos más atención a él intentando descifrar su contenido-, descubrimos un comedor diáfano con más que suficiente separación entre sus mesas, capaz de agrupar ciertas áreas haciendo uso de cristales translúcidos con sabia destreza. Las líneas horizontales de la pared, más que conseguir achatar su altura -tal y como siempre han afirmado las leyendas psicológicas-, le aportan un toque estilizado, quebrado por unas incursiones en rojo verticales que contienen la denominación del local en su parte superior.
Ciertas lámparas halógenas se localizan estratégicamente en el techo potenciando los destellos de la cristalería simétricamente ubidada sobre los manteles. No pasan desapercibidas sus ostentosamente originales lámparas cilíndricas que ocupan acertadamentes aquellos espacios allá donde nuestras cabezas ya no logran alcanzar. En el extremo contrario, un suelo de tonos madera claros y oscuros, permite compensar el conjunto decorativo con una base elegante.
Aquellos clientes que deseen ocupar de los sitios dispuestos a lo largo de la cristalera que conforma la fachada principal del local -que, como describía anteriormente, linda con el curioso callejón que nos permite acceder a su entrada-, pueden disfrutar de cerca de unos particulares maceteros alargados en las inmediaciones de estas mesas. Además de conseguir la caricia de una mayor potencia de luz sobre sus viandas y poseer una vista general del salón comedor. La opacidad del vidrio permite asegurar su intimidad de los viandantes próximos aunque, por tratarse de una calle sin salida, no se puede decir que aporte alteración alguna a lo largo de la velada.
Elegimos una posición bien centrada dentro de la sala desde la que podemos disfrutar de todos los elementos decorativos previamente descritos. Desde mi silla -no especialmente llamativa en diseño pero cómoda y funcional-, observo una mantelería realizada con una tela de calidad en impoluto blanco. Los bajo platos aportan la nota de color a la mesa, cuya cubertería posee unas divertidas curvas al alcance de nuestras manos. Nunca mejor dicho.
La mayoría de las estancias están previstas para grupos de cuatro personas, algunas de ellas con tabla redonda aunque en su mayoría poseen formas cuadradas. En todo momento, aunque nos encontremos en el perímetro interior del restaurante, se respira una sensación de amplitud gracias a la distancia entre mesas y los elementos visuales que las flanquean. Una serie de componentes escogidos con la atención suficiente para no provocar una situación que llegue a colmar nuestro sentido de la vista.
El curioso entramado de blancos y negros, no se encuentra únicamente en las paredes del establecimiento. Sino que lo hallamos también en la mantelería de las mesas. Así que podemos elegir el tono de tela que más agradable o elegante nos resulte para disfrutar de nuestra cena. Un juego de formas y colores que pone El Secreto a nuestra disposición, provocando esa, siempre deseable, sensación de ruptura de la monotonía.
Mientras os permito disfrutar de una visión panorámica del interior, me dedico unos minutos a investigar de un vistazo rápido la estructura de la carta. En ella encuentro Entradas con nombres tan atractivos como la Lasaña de changurro y puerro en salsa de crustáceos, Ensaladas y Arroces variadas al mismo tiempo que con creativas composiciones, Pescados y Carnes. Elegimos como siempre una gran representación de los platos en compañía de nuestro simpático amigo Mario, que se ha decicido a compartir la vivencia culinaria con nosotros junto a su acompañante. Y regaremos todos ellos con un Vino Blanco Vallegarcía Viognier D.O. de la Mancha del 2006 de las Bodegas Vallegarcía, muy apropiado para aquellos que desean conocer un blanco diferenciado que sorprenda a su paladar -quien se atreva como nosotros hacemos con muy buen resultado, espero que nos de su opinión personal a modo de comentario-. Como segunda opción, nos decidimos por un agraciado Vino Tinto Pedro Martínez Alesanco Crianza D.O. Rioja del 2005, elaborado con un 80% de variedad tempranillo y un 20% de garnacha, y que sorprende por su gran gama aromática principalmente.
Mientras se nos reparten las barritas de pan individuales, echamos un vistazo general a aquellos pequeños detalles siempre tan importantes como la agradable vela flotante que se encuentra en el centro de nuestras copas presidiendo y aportando calidez a nuestra velada. Como se puede comprobar, todos los detalles parecen orientados a aportar el entorno ideal para una cena en pareja o en grupos íntimos, principalmente de cuatro comensales. Lo que no elimina el que suponga una opción interesante para cualquier evento navideño o de empresa en estas épocas.
Encaminémonos pues hacia la aventura de los entrantes que hemos escogido para compartir. En primer lugar, se nos sirve un plato con numerosas Croquetas de boletus que nos resultan interesantes al mismo tiempo que originales. Sin perder el carácter de una croqueta tradicional y con un muy suave gusto a boletus. Precisamente, en mi opinión personal, habría potenciado ligeramente el sabor de esta seta, aunque lo cierto es que son un visto y no visto sobre el plato. Nos encantan a los cinco.
Atractivas al presentarse sobre una piedra de pizarra y muy crujientes -sí, perdamos nuestra vergüenza y tomémosla con los dedos antes de que se nos despedacen bajo nuestro tenedor- son las características principales de las Delicias crujientes mar y montaña con cebolleta y su mojo thai que os muestran mis compañeros. Claro que si un entrante recordaré con especial cariño, no será otro más que las siguientes -fijáos que curiosa presentación- Vieiras albardadas con jamón bellota y salmorejo. Excelente la elaboración del jamón ibérico y de unas vieiras de estupenda calidad que conjugan de modo muy elegante con el sabor del apetitoso salmorejo.
Al mismo tiempo que todavía sigo recordando las vieiras y la abundante Ensalada de jamón de pato, calamarcitos y langostinos al balsámico que nos resulta exquisita, comienzan a llegar los platos principales. En primer lugar, el gran Solomillo de buey con salsa de trufa y tagliolli al parmesano que ha elegido el acompañante de Mario y del que, gracias a su generosidad, degusto una pequeña porción. Una materia prima apropiada con una salsa más que acertada de la que tan sólo reduciría la cantidad de la misma levemente para potenciar aún más el sabor de la carne.
Por fin llega mi elección como segundo plato. Esta vez me decanto por un producto del mar que resulta ser la Corvina a la brasa con coca de verduritas asadas y salsa de hinojo. Un plato que merece mención aparte y que no me arrepiento de haber ordenado. Se acompaña de un hojaldre reventado -con lo que su textura es muy distinta a aquellos en los que se utiliza abundante levadura-, sobre el que se han añadido unas estupendas verduras escalibadas asadas al horno. Y lo cierto es que la salsa le acompaña perfectamente e incluso el brochazo visual decorativo bajo el hojaldre recibe la atención de toda la mesa.
Mario elige una apasionante Lechona confitada con puré de reinetas, escarola con granada y chips de ajo -que podéis inspeccionar en la sección de Rayo-. Por supuesto no puedo resistirme a deleitarme con un trocito que me ofrece y compruebo su increíble sabor característico por las ramas de canela y la pimienta de Jamaica que se utilizan en su elaboración. La salsas de manzana reineta y la realizada con el propio jugo de la lechona son un auténtico lujo de compañía. En fin, me vuelvo a centrar en mi más que interesante Corvina, de la que os ofrezco un primer plano que sin duda permite comprobar lo más notable de la pieza.
Llega a estas alturas la hora de atacar a la nada despreciable carta de postres. Una seductora lista de nombres, a cada cual más llamativo, de elaboraciones caseras y artesanales a las que no nos podemos resistir. Tan sólo empuja a pensárselo los altos precios de los mismos que se encuentran entre los 8€ y los 9,50€ -si no tenemos en cuenta los sorbetes- ¿realmente merecerán tanto la pena? Comenzamos con la opción estrella del restaurante: el Secreto de chocolate y helado de naranja sanguina que no debemos olvidar pedir al inicio de la comida, debido al extenso tiempo que se necesita para su elaboración. Y lo cierto es que supone una auténtica delicia de coulant de chocolate con carácter propio elaborado a base de cacao de Méjico. ¿El helado de naranja sanguina? Sinceramente, ¡es necesario probarlo!
Tampoco deja nada que desear la Sopa de piña con gelée de frambuesas y croqueta de chocolate. Se puede ver a continuación como se sirve la sopa de piña sobre la gelatina de frambuesas y moras. Además de, aunque no aparezcan en la instantánea, unas riquísimas croquetas de chocolate que se presentan en un plato aparte. Incluso seguro que más de alguno se atrevería a mojarlas dentro del conjunto principal.
Muy ligera e igualmente con su sello gastronómico y decorativo personal, resulta la Pasta filo con manzana al aroma de almendra y helado de baileys. La pregunta que nos hacíamos era: ¿cómo será un helado de baileys? pues sinceramente con un gusto perfectamente conseguido a baileys. El toque que lo acerca, sin duda a la perfección, lo aporta el coulis de mango y arándanos.
Por último, como toda interesante velada merece, finalizamos la cena con una serie de cafés que nos acompañan mientras proseguimos debatiendo sobre nuestras impresiones acerca de cada uno de los platos. Un café de bastante calidad.
La principal conclusión, que quizás sea más difícil de rebatir, es la sensación que conseguimos al acudir a El Secreto de haber localizado un interesante enclave en el que su jefe de cocina aporta un carácter muy propio a cada uno de sus platos, combinando con acierto los muchos sabores a su disposición. Uno de esos restaurantes muy a tener en cuenta para visitar cuando la ocasión realmente lo merece y que, una vez conocido, corre de boca a oreja inmediatamente.
Ninillas: Tendemos a buscar culpables cuando algo va mal, creo que es intrínseco a la naturaleza humana. Ahora bien, cuando algo marcha bien, la cosa cambia y no hace falte nadie que nos ponga la medallita, ya lo hacemos nosotros. Hoy no voy a enumerar culpas ni buscar culpables, tampoco me voy a poner medallas, pues no las merezco. Lo que sí voy a hacer, porque es de justicia, es presentaros al responsable de nuestra visita al restaurante de hoy. Se llama Mario, y fue quien nos descubrió esta joyita ubicada en la zona norte de Madrid, concretamente en el Barrio de Prosperidad. Aunque debo aclarar que encontrarlo no fue tarea fácil. Su dirección es C/ Ramos Carrión, 6, una dirección como otra cualquiera, pero claro, encontrarla ya es otra cosa…
Nosotros nos acercamos por Corazón de María y dimos más vueltas que un tonto. La razón es bien sencilla, Ramos Carrión se corta con Clara del Rey y “ni pa trás” dábamos con el restaurante. Tuvimos que llamar a Mario para que nos indicase. La mejor opción para aquellos que deseen degustar su cocina, cosa que a buen seguro ocurrirá con muchos de vosotros tras ver el post, es hacerlo por López de Hoyos, caminar por la acera derecha de Ramos Carrión y, cuando veáis una calle sin salida… Ahí está, escondido para el viandante, haciendo honor a su nombre porque aún no os lo había dicho, pero aquella noche cenamos en el Restaurante El Secreto.
Nada más cruzar el quicio de la puerta, nos esperaba Mario y su acompañante -tímido, de los de fotos no- y una vez reunida toda la expedición cucharetera, comenzó una velada de las de recordar, no sólo por las risas y la buena conversación, sino también por las suculentas viandas que aquella noche comimos.
Lo primero con lo que uno se encuentra a mano derecha es con la barra, sencilla, nada pretenciosa e ideal para recibir al comensal. Aunque para recepción, la que hace el Señor Ignacio, que ejerce de Jefe de Sala.
Le pregunté si el nombre del restaurante lo habían puesto a propósito, por lo escondido que está. Pero no, me equivoqué, es debido al libro de Rhonda Byrne titulado El Secreto. Vino a mi cabeza entonces la escena vivida con mi hermano un año atrás -él es un lector voraz, además de mi asesor personal en lo que a libros se refiere-. Haciendo una revisión de su biblioteca vi El Secreto entre sus últimas adquisiciones, le pregunté si era de misterio o de templarios. Él se rió y me dijo: “No, Nines, es de autoayuda, así que no te lo cojas”. ¡La madre que lo parió!, que por cierto es la mía también, ¡Qué bien me conoce! El caso es que no lo leí, si mi hermano me dice que no es para mí, yo ya no me molesto en llevarle la contraria, le hago caso y punto, son demasiados años juntos.
Por lo que sé, que es más bien poco, el libro se basa en lo que se conoce como la “Ley de Atracción”, consistente en la idea de que las personas atraemos todas las cosas buenas o malas que vivimos. Vamos… positivismo a tope. Bueno, y también que se convirtió en un bestseller tras la aparición de su escritora en el show de Oprah Winfrey, y es que Oprah es mucha Oprah. Hasta aquí el libro, ahora vamos con el restaurante, que es lo mío.
El Restaurante El Secreto tiene capacidad para 85 comensales distribuidos en dos estancias que en realidad conforman un único comedor. Mesas de dos, de cuatro, de seis… bueno, en realidad del número de personas que se desee, pues el local es amplio y da mucho juego. Cuentan además con unas cuantas mesas redondas que son una gozada cuando el grupo se amplía. Aunque desde luego lo más importante es que las distancias entre cualquiera de las mesas es más que suficiente para mantener una conversación sin ser partícipe de la de la mesa de al lado.
La decoración está basada en el blanco y el negro. Y es que sus paredes están pintadas con bandas negras horizontales, que tan sólo se ven interrumpidas de vez en cuando por el nombre del restaurante iluminado de rojo. Rojas son también sus enormes lámparas, que aportan un toque cálido al ambiente, haciéndolo muy propicio para una cena romántica con la pareja o para cualquier reunión de amigos.
El resto va acorde a la atmósfera que han querido plasmar: sencilla, agradable a la vista e íntima. Las sillas son de madera y tapizadas en rojo haciendo juego con las lámparas y acompañan a unas mesas vestidas con un bajo mantel de negro riguroso y un mantel y servilletas de un blanco impoluto, excepto en las redondas, donde cambian el orden. La cristalería, la vajilla y la cubertería son correctas para el restaurante que nos ocupa.
Pero vamos a ir a la “chicha”, porque el verdadero “secreto” de este restaurante está en su cocina. Al frente de los fogones está el Chef Gonzalo Guillén, que nos presenta una cocina tradicional con leves toques de autor, y por supuesto basada en productos de mercado. De hecho, la carta experimenta un cambio notable cada 4 meses, aunque mantiene sus platos más representativos. Además, al mediodía y de lunes a viernes, cuentan con un menú del día por 15 € +IVA. Por cierto, que nos comentó Mario que el cocido se sale, para ser un menú del día. Los Martes, Miércoles y Jueves por la noche ofrecen un interesantísimo Menú Degustación por 35 € que incluye aperitivo, un entrante, un pescado, una carne, un postre, café, y de bebida una copa de vino. Vamos… que está muy ajustado el precio. Por supuesto, también disponen de menús para grupos que se adaptan según considere el cliente, pero aún así los que yo ví rondaban los 40, 50 y 60 €. Respecto a su carta de vinos, no es muy extensa, aunque tienen suficientes referencias para cubrir su cocina. Lo que sí cabe destacar nuevamente es el precio. En pocos sitios encontraremos esos caldos a esos importes.
Su carta está estructurada en 4 apartados: Entradas, Ensaladas y Arroces, Pescados y Carnes. Cada uno de ellos rellenado con nombres tremendamente descriptivos de los platos, como a mí personalmente me gusta. Vale que quedan nombres muy largos, pero a la hora de pedir no vas a ciegas y sabes lo que te puede llegar a la mesa más o menos.
Nosotros éramos 5 y nos dispusimos a pedir como siempre, pero Mario nos echó el freno y nos dijo: “Mirad que aquí las raciones son grandes”. Total, que ni para él ni para nosotros: 4 entrantes a compartir y un segundo para cada uno. Aún con todo, Mario no dejaba de repetir: “Nos hemos pasao”.
Abrimos con unas Delicias crujientes mar y montaña con cebolleta y su mojo thai. Como veis se presentaban en un plato de pizarra y me parecieron un entrante tremendamente original e ideales para compartir. Por cierto, la masa de las delicias era casera y no veáis cómo se nota la diferencia. El relleno era a base de cerdo, cebollino y especias chinas molidas. Me encantaron estas delicias.
En primer plano os muestro la Ensalada de jamón de pato, calamarcitos y langostinos al balsámico. La ración no era generosa, era generosísima. Una ensalada en condiciones, vaya. Que, ¿cómo estaba? Pues a ver, si os digo que llevaba chipironcitos, langostinos, mézclum de lechuga, un salteado de frutos secos, golpe de módena y chorrito de un buen aceite picual. ¿Cómo creéis que podía estar? Bien rica.
Pero si hay un plato imprescindible en los entrantes, ése es sin duda las Vieiras albardadas con jamón de bellota y salmorejo -mostradas por mis compañeros-. Son directamente un espectáculo de sabores.
Mario os muestra las Croquetas de boletus. No me sorprendieron, pero estaban ricas. Lo único que le cambiaría es el plato en el que llegan a la mesa. La ración no es corta ni mucho menos, pues vienen 10 unidades, pero la verdad es que al verlas en semejante plato… pues una de dos, o faltan croquetas o sobra plato.
Tras los entrantes vinieron los principales, éstos sí al gusto de cada uno, aunque por supuesto yo fui metiendo el tenedor en todos. Rayo con su Perdiz guisada al chocolate con migas y uvas -por cierto, las migas de muerte-, FlashBack con su Corvina a la brasa con coca de verduritas asadas y salsa de hinojo y el 5º en discordia fue a un valor seguro Solomillo de buey con salsa de trufa y tagliolli al parmesano -yo a éste le hubiera puesto menos salsa para apreciar mejor la carne, pero eso va en gustos-.
Por mi parte y habiendo bacalao en la carta… ¿Qué pensáis que pedí? Pues eso, Taco de Bacalao con salsa de cebolla y miel de tomillo. Como podéis apreciar, la ración era contundente. Desde luego Mario tenía razón, y de hecho no fui capaz de acabarlo.
La salsa estaba elaborada a partir de fumé de pescado, vino blanco, cebolla, miel y como acompañamiento unas pasas. El resultado era una salsa dulzona deliciosa que funcionaba a la perfección con el bacalao, que aunque de notable calidad le faltó un punto para ser de sobresaliente.
Si de los entrantes seleccioné las vieiras como el Top, de los segundos no me cabe la menor duda que me quedo con la elección de Mario: Lechona confitada con puré de reinetas, escarola con granada y chips de ajo. Rica no, riquísima. Pregunté por su elaboración y me dijeron que el “secreto” consiste en que se confita durante 3 horas en aceite de girasol -para que no le aporte sabor- a 60º junto con la canela, pimienta de jamaica y sal. El acompañamiento consistía en una crema de manzana reineta, el propio jugo del cochinillo y una ensalada de escarola con láminas de ajo y granada. En definitiva, un plato con sabores muy bien compensados, de los que nunca fallan.
En ese momento, es cuando yo me desabroché el botón, porque las raciones son enormes. ¡Madre mía! ¡Y aún quedaban los postres! Debo añadir que los postres son de elaboración casera, y que tal y como yo lo veo, se les ha ido la mano con los precios: 7.25 € para los sorbetes y de 8 a 9.50 € para el resto. Están muy buenos, pero aún así no se justifica el importe.
Nosotros elegimos 3 para compartir, puesto que no podíamos más. A continuación os presento la Sopa de piña con gelée de frambuesas y croquetas de chocolate.
Y éstas de aquí son las Croquetas de chocolate que acompañaban a la sopa de piña. Por cierto… que la sopa llevaba la alegre compañía de un chorrito de ginebra. Era un postre bien resuelto en cuanto a sabores y muy original.
Buenísima la Pasta filo con manzana al aroma de almendra y helado de baileys -mostrada por mis compañeros-, fue el postre que más me gustó. El que yo os muestro es el Secreto de chocolate y helado de naranja sanguina, un coulant de chocolate elaborado con cacao de México al 64% que al abrirlo dejaba ver un relleno de naranja sanguina que os muestra Rayo. Muy bueno. Sólo tiene un inconveniente, si es que se le puede llamar así, es que hay que pedirlo al principio de la cena.
Ahora sí que no podíamos más, de modo que pedimos unos cafés con leche -1.70 €- y nos dispusimos para el reposo del glotón. Claro que yo antes me fui para el baño a echar un vistazo. Si es que a mí me pierden los aseos.
Pues ya habíamos cenado, vivido la sobremesa y en definitiva, habíamos disfrutado del restaurante. Ahora vamos con mis “cositas”, que buenas o malas son mías y me gusta decirlas, aunque en este caso y viendo nuestro post ya os imagináis que gana lo bueno por goleada. Empezamos por el servicio, sólo puedo agradecer a Sergio, el camarero, el trato que nos dio, supersimpático, agradable… Vamos, de los que sabe cómo desempeñar su oficio y además se nota que le gusta. El ambiente, la verdad es que me gustó mucho, es perfecto durante el día para una comida de negocios o de empresa y para la noche, cuenta con la intimidad necesaria para una velada con tu pareja, o si lo deseáis, una reunión informal de amigos. Me queda su cocina, de la que sólo puedo decir que todos sus platos están muy bien resueltos, tanto en el contraste de sabores como en la elaboración y la presentación. En definitiva, que el Restaurante El Secreto es un valor seguro si se desea pasar una jornada gastronómica donde poder disfrutar de los sabores de siempre con ese toque personal que a sus platos imprime su Chef. Por si no ha quedado claro, yo volveré.
Cucharete: ¡Mis chicos han desvelado el secreto! -Nunca mejor dicho-. Pues el Restaurante El Secreto queda plasmado en este artículo como un lugar digno de descubrir y visitar. No se pueden dejar escondidos por Madrid unos platos tan generosos y tan recomendables como los que os han presentado. Al parecer, la ensalada, las vieiras y la lechona son realmente sorprendentes y obligatorias en la comanda, aunque el resto de su carta no se queda atrás. Mi equipo cenó por 44 €/persona, cinco personas con 4 entrantes, 5 platos principales, 3 postres, una botella de agua y 5 cafés. A lo que habría que añadir dos botellas de vino de 12,90 y 21,40 €.
Las sensaciones agradables que despierta su comedor. La separación entre mesas. El amable trato del servicio en todo momento. La calidad de su cocina y la cuidada elaboración de los platos. La generosidad de sus raciones. Los precios de los caldos en su carta de vinos. Admiten cheques de comida.
El elevado precio de sus postres.
4,5
61 comentarios a “El Secreto”
Escribe un comentario
IMPORTANTE: Por favor, intenta que tu comentario tenga que ver directamente con el restaurante analizado. Para cualquier otra comunicación tienes disponible la sección de contacto.
Debes estar identificado para escribir un comentario.
Lo conozco es un gran restaurante, se come estupendamente.
El sitio es muy agradable, los camameros monos y las o los que cocinan lo hacen muy bien. Yo conoci a mi actual novio en este sitio, y la verdad desde entonces mi vida a dado un vuelco que celebro.
Reservare para ir a cenar proximamente, no lo dudo. Este lugar cambio mi vida…
Conocimos el Secreto hace casi un año y desde entonces mi marido y yo estamos “enganchados”.
Vamos con bastante frecuencia y siempre salimos encantados y con una sonrisa de satisfacción en la cara…
El sitio tiene mucho encanto, la comida es riquísima, yo soy abstemia pero Jose siempre dice que le ponen unos vinos buenísimos, el trato de todo el personal es muy agradable y el dueño, Nacho, tiene un trato encantador y unos ojos azules que quitan el sentido. Merece la pena que lo conozcáis. Es uno de esos sitios a los que te apetece volver y recomendar a los amigos. ¡Ah! muy importante: una copa después de la cena alargando la sobremesa de forma agradable y sin que nadie te meta prisa… ¡un punto más a tener en cuenta!
Valla cacho de sitio mas guapo!!!!! este finde me voy con la churri seguro!!! a ver si hay sitio…
Ayer fui con mi novia para celebrar mi cumpleaños y salimos encnatados. El sitio tiene un servicio excepcional, todos encantadores, la comida muy especial y con sabores totalmente distintos a los “típicos” y el precio aunque alto, ajustado a la categoría del lugar(aún así tenían un menú diario a 15 euros en el que las raciones tenían muy buena pinta). Salimos encantados. En cuanto ahorremos volveremos.
Fenomenal sitio, hemos disfrutado muchismo!! No lo conociamos, pero segurisimo que volveremos y desde ya lo recomendamos.
El dueño encantador, no me cabe la menor duda que El Secreto se convertira en un icono de la alta gastronomia y la Buena Mesa en la Villa. Felicidades y ya sabeis contais con nuevo cliente.
Conozco el sitio desde el principio y cada vez esta mejor la comida es de 1º y el trato es de lo mejor, la verdad que siempre que voy la velada es genial y todos los que vamos salimos encantados y deseando regresar lo recomiendo como visita obligada.
Cucharete nunca me falla. Estuve ayer con unos amigos y salimos todos encantados. Verdaderamente la lechona y las vieiras son extraordinarias, pero no nos defraudó ningún plato. Un equipo de gente encantadora. Estuvimos todos de acuerdo en que volveremos pronto ¡por supuesto!
He disfrutado de El Secreto 4 ó 5 veces ya y siempre en compañia, por lo que he podido degustar casi toda su carta, no solo de lo que yo había pedido. Lo cierto es que tanto su muy agradable ambientación, sin extridencias decorativas, como la atención y simpatía de su personal -qué decir de Ignacio, su jefe de sala y co/propietario- y, por su puesto, su estilo de cocina, hacen que cualquier velada cumpla con las espectativas deseadas para este tipo de eventos. En mi recuerdo quedan las Vieiras Albardadas, La Lechona, La Corvina, El Solomillo, El Bacalao, La Pasta Filo con Manzana, solamente por recordar algunos platos, y también, algunos de los complementos de los principales, que por su calidad, tratamiento y sabor, bien pudieran constiruirse como platos protagonistas: arroces, migas, verduras, etc. Con una bodega equilibrada en tipos y precios, que complementa a la perfección la oferta culinaria.
No pasa desapercibida una cita en El Secreto y, como todos -a los secretos me refiero- al principio cuesta encontrarlos, pero luego andan en boca de todo el mundo.
Deseo a Ignacio y compañía la mejor y duradera suerte.
Estuve cenando el jueves por la noche con mi chica y otra pareja amiga: fenomenal. La cocina buenísima, la bodega muy selecta y muy aquilatada de precio, el ambiente muy relajado y el servicio muy agradable…
Os aconsejo que lo conozcáis. Es de esos sitios que merecen la pena. Por mi parte: ¿tengo que decir que volveré pronto? Y que quede constancia de que no me costó trabajo encontrarlo.
Fui a cenar el sábado con unas compañeras de la escuela y lo pasamos estupendamente. Como eramos muchas contratamos un menú cerrado. Nos dieron de cenar muy abundantemente y muy “exquisitamente”. Todo el mundo fué muy amable y aunque estaba lleno no estábamos agobiadas porque afortunadamente la separación entre mesas está muy bien pensada para que todo el mundo pueda tener un poco de intimidad entre tanta gente. Nos gustó muchísimo. Chicos de El Secreto: ¡volveremos!. Yo la semana que viene pienso llevar a mi familia…
acompañan unas migas -riquísimas, por cierto- y unas pequeñas uvas. ¡Un plato de lo más sabroso! Maybe thats deep-fry mice.
el sabado comomos en el secreto, no habia mucha gente, el servicio correcto, el vino bebimos matarromera, dos botellas, las migas fueron muy buenas, y eso que donde vivo es especialidad regional, las vieras como dice un comentario solo este plato merece la visita, la lechona ¡¡¡¡ INCLUSIVE!!!!, una de mis hijas pidio pescado, buenisimo, mi mujer la perdiz y le supo a poco, se hubiera comido una docena de rica que estaba.
Calsificacion general muy muy muy bueno.
Menuda cenita¡¡¡¡¡
Confié en vuestra página para ir a conocer este restaurante y además aproveché para cumplir con una invitación importante. La peor cena de mi vida. Carísima para lo que comimos y como se nos sirvió y presento.
De primero croquetas (con un
palabra no permitidaañadido). La carne fria. Solo 4 mesas en todo el restaurante y tardan en servir como si tuvieran 40. Confie en vuestra opinión y falle a mis amigos. 170 euros por no cenar. Por favor para quien quiera conocerlo y además no le sobre el dinero. Piensa en otro restaurante.Joder que buenas estaban las vieiras!! Las pedí porque las pedisteis vosotros y las dejasteis por las nuebes en vuestro artículo, y fueron flipantes, quedé genial con mi chico al elegir este local, me lo apunto entre mis preferidos de Madrid, que no son muchos. Tengo ganas de ir también a otro de vuestra web el mes que viene y ya os contare.
Bss
Yo fui el sábado a cenar con mi familia que vino de Navarra (donde se come muy bien )y les parecio todo buenííííísimo un servicio rápido con unas cantidades muy buenas y una presencia super cuca y eso que el restaurante estaba lleno. Piensan volver aunque sea sólo para comer en “El Secreto” y por supuesto yo también.
Siento ser el díscolo del grupo, pero no me gustó nada el sitio. Fuimos a cenar el sábado 10 de enero, y hacía un frío horroroso (casi más dentro que fuera…). Había reservado una mesa de las redondas (haciendo caso a vuestra sugerencia), y cuando llegamos nos dieron una mesa en una esquina que daba a la calle. justo pegados a las otras dos únicas mesas del restaurante que estaban ya ocupadas. La excusa que nos dieron era que en las mesas redondas hacía más frio aún porque los calefactores no funcionaban (sic).
Tardaron una infinidad en servirnos. Las croquetas eran completamente insípidas. Las migas no estaban mal. Pero los segundos eran realmente malos. El pescado no estaba fresco. Y el pollo del rissotto había caducado hace ya días. Eramos dos parejas y la mujer de mi amigo y yo pedimos el rissotto y muy educadamente no dijimos nada, pero fuimos dejándonos el pollo a un lado (yo pensaba que quizás el pollo de corral sabía así de mal…). Al final de la cena, pusimos en común nuestra experiencia…y los dos coincidíamos en que ese pollo llevaba en el Secreto más días de los debidos…
Los camareros estaban además de palique en la entrada, por lo que tuvimos que levantarnos hasta allí para pedir la cuenta…
Conclusión: un desastre (soy fiel seguidor del Cucharete, pero por ahora voy 2-2 (
referencia a otro restaurante- ptsa ptsa,referencia a otro restaurantemuy bien vsreferencia a otro restaurante- bastante mal y El Secreto - de horror!!).Gracias de todas maneras.
Este fin de semana estuve con mi chico y otra pareja a cenar en este maravilloso restaurante (según tantos buenos comentarios y buenas críticas por cucharete).
Lamentablemente todo lamentable. El restaurante vació, el servicio como dice infra-k de cháchara, lento, torpe etc.… Pedimos agua por 2 veces, consiguiéndolo a la 3ª. Encontramos
frase no permitidade la comida.La ensalada (por decir algo), cebolla confitada con sabor imposible de definir. La carne Solomillo frio, Ibérico frio sin ningún tipo de salsa y sin nada de sal.
Como una profesional del sector y con más de 15 años de experiencia en organización de grandes y pequeños eventos para empresas, tuve que degustar infinidad de menús en todo tipo de restaurantes y catering. Mi experiencia me dice que nunca mas volveré y nunca recomendare este restaurante excepto que quiera quedar mal.
De nuevo lo lamento pero es lo que siento.
Conocí El Secreto por casualidad hace ya casi 1 año. Desde el primer momento me quedé enganchado. Por cuestiones de trabajo como siempre fuera de casa y salgo a cenar con mi mujer una o dos veces por semana, con lo cual creo tener una opinión un tanto “autorizada” como cliente de la restauración y quiero daros mi opinión.
1º) Como casi todos los días en El Secreto con algún compañero. Podemos comer en otros restaurantes de la zona un menú más barato pero nos gusta mucho más el del El Secreto: la calidad, la preparación, la presentación, el trato, el sitio, etc., etc. Unos días pagamos 15 Euros por el menú y nos vamos encantados y otros (sobre todo si va algún jefe) comemos a la carta y nos damos un homenaje, saliendo todavía más satisfechos.
2º) Siempre, y digo SIEMPRE, he comido un pescado fresquísimo, una carne de primera calidad y un pollo fresco de corral, corral. Digo yo que en casi 1 año de asiduidad al restaurante me tendría que haber tocado ya ese pescado pasado y ese pollo caducado… ¡Pues no!
3º) Si a “infra-K” le sirvieron un pescado que no estaba fresco y un pollo caducado desde hacía varios días ¿por qué no se quejó enérgicamente al jefe de sala, que por cierto está siempre presente y preguntando por todas las mesas si está todo correcto? Es lo menos que se debe hacer cuando te dan de comer “tan mal” en algún sitio y yo por su comentario entiendo que no lo hizo. Francamente, no lo entiendo. Creo que no tiene explicación alguna ¿o si la tiene…?
4º) Acudo con mi mujer a otros muchos restaurantes y en casi todos después de cenar te dejan un rato de sobremesa y enseguida, de un modo u otro, te hacen entender que es hora de marcharse. En El Secreto te dejan charlar y tomar copas hasta muy tarde.
En alguna ocasión me han dado las 2 o 2,30h y me he tenido que levantar a pedir la cuenta yo también. Pero no lo he tomado como una dejadez o negligencia de los camareros, sino todo lo contrario, ellos tienen la atención de no estar presentes, en posición de firmes esperando a que yo les haga el famoso gesto de pedir la cuenta. Si lo hicieran así, me sentiría intimidado y desde luego me iría mucho antes. De modo que se lo agradezco: estoy tranquilo charlando con mis acompañantes y tomando unas copas (como muchos otros clientes) y cuando mi sentido común me dice que ya está bien y que debemos irnos me levanto, me dirijo a la barra (no tengo que buscarlos) y pido la cuenta.
Distintas formas de ver las cosas ¿verdad? depende de con qué actitud te muevas por la vida.
Para gustos están los colores y respeto todos los gustos. Pero me cuesta mucho creer todo lo que dicen “infra-K” y la madrileña. ¡Lo siento!
No me gusta hacer malas criticas a un restaurante donde veo que le ponen ganas y son atentos con los clientes, pero estuve comiendo el sábado con mi mujer y os resumo como fue la comida:
Trato y atencion exquisita pero la relacion comida-precio……..
De primero croquetas y migas:
Las croquetas estaban ricas, pero la presentacion muy pobre, con unos granitos de ¿sésamo?. Como dice Ninillas estan un poco solas en tanto plato. Unas hojas de lechugita, alguna salsa, o algo no vienen mal.
Las migas bastante ricas, pero como cualquier migas de menú de cualqueir restaurante de la mancha, extremadura…., nada excepcional.
De segundo solomillo con salsa de trufa y lechona. Ambos platos estaban, digamos, bastante buenos, sin llegar a ser nada espectacular ni las raciones muy grandes.
Los postres: el sufle de chocolate (los he probado mejores y mas baratos) y sorbete de frambuesa (nada especial). Pense que los postres remontarian la opinion un poco floja hasta ese momento y lo que hizo fue empeorarla un poco mas.
La carta de vinos muy bien, hay variedad y buen precio (en algunos)
En general puedo decir que la comida buena, pero nada para tirar cohetes y con unos precios bastante elevados. Para pagar esos precios quiero que algun plato vaya mas alla, pues creo que pagar 14 euros por un plato de croquetas o 23 por un solomillo se merece un punto extra que no encontre.
Creo que el vino eran unos 15 euros y toda la cuenta (2 primeros, 2 segundos y dos postres) nos salio por unos 108 euros, lo dicho me parece elevado para algo entre normal y bueno. Su justo precio en otros restaurantes similares seria unos 80 euros.
Un detalle, cobrar dos euros por el pan y cubierto y no poner nada de aperitivo me parece un poco caro, al menos agradecemos el chupito del final y que el iva no vaya a parte.
No me llameis pesetero, pero creo que unas croquetas, unas migas, unas raciones pequeñas de carne con salsa, unos postres flojitos no valen ese dinero.
En fin que creo que para ganar dinero en un restaurante o en cualquier otro negocio no es buena filosofia acotar al maximo los costes y aumentar todo lo que se pueda el precio de venta, esa es la impresion que me quedó.
El Restaurante El Secreto comunica a todos los lectores de Cucharete que durante 30 días rebaja drásticamente todos los precios de los platos de su carta. ¡Incluso hasta el 46%! ¡Ahora es el momento de disfrutarlo!
Toda la información aquí.
Tiene razón infra-K en que ese fin de semana hacía mucho frío y fué una mala suerte que se les estropeara la calefacción. Pero, como siempre, el equipo que atiende el restaurante estuvo muy atento e intentaron ubicarnos a los clientes, dentro de lo posible, en las mesas en las que podríamos cenar más confortablemente. ¡Gracias chicos!.
A los pocos días volví y ya estaba solucionado el problema. Cenamos con una temperatura estupenda.
Por cierto infra-k, éramos 6 persona, cenamos en una mesa redonda (que, menos mal, habíamos reervado antes porque estaba el restaurante lleno) y estaba todo exquisito…
¿Seguro que lo tuyo fué en el Secreto?
Siento que me critica haya provocado tanta susceptibilidades…
En primer lugar, me hace mucha gracia observar la tolerancia de algunas personas que sólo piensan que lo que ellos dicen va a misa y que si a ellos les gusta un sitio, es estupendo y se acabó. Pues bien, qué quereis que os diga. A mí el Secreto no me gustó y punto. Las razones ya las expuse en mi anterior crítica.
Pablo, si no nos quejamos enérgicamente al jefe de cocina, fue sencillamente porque las cuatro personas que estábamos cenando somos gente positiva y queríamos disfrutar de un buen rato, y no nos apetecía montar una escenita en el restaurante. Madrid tiene mucha oferta y si un sitio no te gusta, no vuelves y ya está. No pasa nada. La cosa tampoco era como para levantarse e irse, por lo que decimos hacer fue reirnos de la situación, hacer un par de chistes fáciles sobre el pollo y ya está (así que por lo menos les agradezco el haberme facilitado pasar 10 minutos divertidos…).
No digo que los camareros no fueran amables, que sí lo fueron, pero por una cena de 45€ (sin vino ni postre) espero algo más. Es que soy raro?
Gracias de cualquier manera por vuestras contra críticas.
¡Esto son rebajas y no lo que hacen los grandes almacenes…!
Me parece una idea estupenda y muy original. Pienso estrenarlas este fin de semana.
Ya conozco el restaurante y me gusta muchísimo, pero con el tema de la crisis no puedo ir tantas veces como quisiera. Ya he corrido la voz entre mi gente y vamos a aprovechar este mes para ir todas las veces que podamos y aprovechar esta fenomenal iniciativa.
¡Qué guay chicos…!
La verdad es que para mi gusto es uno de los mejores restaurantes donde he estado. Voy asiduamente sobre todo a comer, y no conozco ningun sitio donde los menus sean tan exquisitos y tan elaborados con un precio tan bajo en relacion calidad precio.
Por ello he ido mas de una noche a cenar con amigos y algunos sabados a comer con mi familia y me han sorprendido algunas de vuestras criticas porque jamas jamas jamas, de ninguno de los platos que he probado en El Secreto, me ha dado a pensar que no fuera absolutamente fresco y bien fresco, ni a mi ni a nadie de los que han venido conmigo que han quedado siempre encantados con todo lo que han comido.
Ni que decir tiene ademas que el servicio en este restaurante es tan sumamente agradable que da gusto estar alli, y volver, porque en cuanto vas una vez ya te conocen y te tratan de una forma absolutamente familiar y agradable haciendote sentir muy agusto y haciendote quedar con quien vayas como un autentico anfitrion y orgulloso del sitio donde has elegido para ir.
Y criticar el tema de la calefaccion me parece un poco injusto ya que a quien no se le ha estropeado alguna vez?? no es algo habitual!!
cuando se estropea el ascensor en mi casa un par de horas no llamo a la constructora ni me cambio de casa!!!
hombre…….
Os recomiendo de verdad este restaurante, porque el sitio es acogedor , amplio, no comes escuchando la conversacion de la mesa de al lado y sobre todo es que los camareros son un autentico cielo de simpaticos, discretos y majos, se preocupan todo el tiempo de que todo este bien sin ser para nada pesados pero sin quitar el ojo a lo que pueda faltarte, es una pasada!!
Y la comida……….. dios mio, es una maravilla, al menos lo que yo he probado yo alli que ya he ido unas cuantas veces y de verdad, lo de los pescados es tremendo… yo soy mas de pescado que de carne, todo lo que hay es de temporada y del dia y a cual mejor cocinado, de forma tradicional con un punto creativ y sobre todo combinando las dos cosas con gran acierto, sin perder la esencia del sabor.
A mi marido las carrilleras le enloquecen y a algunos amigos que han venido tambien, y la lechona confitada hasta yo la he probado y es una exquisitez.
Los cafes estan hechos con mimo, y sientan de maravilla
Y luego tomarse una copita con la relajacion de que nadie te mira mal para que te vayas rapido, es una gozada y un lujo que hoy en dia en un restaurante de madrid es dificil encontrar.
Que Secreto mas bueno es El Secreto!!!
Os quiero comentar mi experiencia ayer en El Secreto, la verdad es que no voy a decir nada de toooodo lo bueno que se dice en esta pagina sobre este restaurante nuevo en Madrid, pero absolutamente increible, y no quisiera repetirme, pero no quiero dejar de dar mi opinion porque realmente sali de alli alucinado, y con un increible sabor de boca en todos los sentidos.
Como ya han comentado el recinto es amplio y te encuentras muy comodo ya que no te das con los de al lado ni los percibes siquiera.
El sitio es muy romantico y acogedor que era lo que en mi caso me hacia falta ya que era mi 1er aniversario y necesitaba ese toque de intimidad y romanticismo que la musica y la decoracion supieron darle…
las velas……, la atencion de los camareros atentisima pero discreta.. en fin.. todo genial.
Pero la cena fue increible, pedimos como entrantes migas manchegas y vieiras con salmorejo y fueron increibles, tanto en la rapidez como en lo ricos que estaban los dos platos, ( lo de las vieiras es espectacular del todo!!!!!)
de segundo pedimos lechona confitada y merluza los puerros y no sabria deciros cual nos gusto mas.. de verdad.
Para postre compartimos el famoso Secreto de chocolate y fue demasiado porque no podiamos mas, ya que los platos son abundantes y te sacian mucho, pero un chocolate relleno de naranja caliente???? quien puede resistirloo???? la verdad es que no fue barato pero tal y como cenamos y lo agusto que nos sentimos a mi me parecio el dinero mejor pagado para una fecha tan se;alada.
Fue la primera vez que fuimos pero aseguro que no esperare al proximo aniversario para volver. Estoy deseando que llegue el proximo sabado para celebrar cualquier cosa
Muchas gracias Jose por tu comentario, era justo lo que buscaba para el dia de los enamorados, ademas ya habia oido hablar de El Secreto y no me habia acordado. Era asi justo lo que la gente que me habia hablado de este restaurante me habia descrito, encantador , acogedor, amable y todo muyyyy ricoooo.
Yo ya tengo mi reserva, estoy deseando contaroslo.
Muchas gracias
Pues yo no suelo escribir en ningun foro pero desde ayer soy fan de El Secreto. Os cuento. Quede por alli con una amiga y acabamos en ese callejon maravilloso con ese sitio que no te esperas… Y de repente el maitre , un chico encantador y con unos ojazos de morirse y una sonrisa de pelicula nos sento en una mesa donde estuvimos tan comodas como si no hubiera nadie alrededor. Aunque nosotras tpco pensabamos en comer en plan dioooooos mio que me muero….pero eso fue lo qe paso, comimos de menu os tengo que decir, pero mi amiga pidio sopa de cocidoy yo pedi algo que no se como escribir pero era como un hojaldre jugosiiiiiiiisimo relleno y muy relleno.. de gambas, cangrejo, calabacin y bechamel….que ricoo madre miaaaaaaaaaa…
De segundos pedimos ella salmon fresco con salsa alioli yyo filetitos con salsa de romero…………… no os lo creeriais…….. lo de la salsa de los filetitos no puedo describiroslo…. que buenaa por favor.. estaba de muerte. De mi amiga solo pude probar un poco la salsa alioli porque yo tenia 3 filetes y no queria desperdiciar ninguno por falta de hambre.. igual un poco excesivo el menu en cantidad , pero bueno mas vale que sobre…..Mi amiga debio pensar lo mismo porque ni probo lo mio, estaba absorta en su salmon con salsa y patatas, de verdad nos pusimos las botas!! Puede parecer caro un menu de 15 euros, pero en serio, es que es como si fuera de carta de un super restaurante, la misma calidad, presentacion y servicio, y por 15 euros por persona!! De verdad, id a probarlo, os va a encantar!!!!!!
Y ademas estan Sergio y Mariano, que son los dos camareros mas amables y agradables del mundo, y el maitre, que es un cielo, de verdad, estas como en casa en este sitio!!
Hola, he leido todos los comentarios sobre El Secreto y os queria preguntar, que opinion me dais sobre ir el dia de los enamorados ?? A ver, ya se que el sitio es muy discreto y romantico pero tienen algo especial, menu especial??
Igual no he sabido buscarlo aunque ademas me han hablado muy bien del sitio en persona.
Yo espero conocerlo yaa!!
a mi tb me encantaria ir a cenar para mi aniversario me lo recomendais?? solo tengo 22 a;os, cuanto me puedo gastar?? no soy rica pero me gusta comer cosas ricas
gracias
Particularmente a mi y a todos mis compis del curro nos encanta este sitio, nos dan de comer a diario como en el mejor restaurante de madrid a la carta, y aunque el precio es igual en principio alto para un menu ,es que hay que ver lo que te dan.
Son de VERDAD platos de un nivel increible, ademas te tratan de una forma que te hacen sentir una de las muchas celebridades que pasan por alli, son unos tios tan majos…..(y guapos eh?? ..) pero ante todo profesionales, uno de los dias que estuve, tambien estuvo comiendo una actriz y me trataron igual que a ella, en serio, me trataron como siempre que voy, o sea genial, y a ella pues igual, o sea genial, hombre mi foto no esta en su web y la de ella si, pero vamos eso no me quita lo bien que como siempre. Gracias Nacho y equipo.
Mi mujer y yo fuimos a El Secreto por cucharete, ya que siempre nos fiamos mucho de vosotros, y tengo que decir que se merece las 4.5 estrellas y yo le daria las 5 estrellas.
La comida excepcional, el trato sobresaliente y ademas no nos sentimos en ningun momento con el agobio de tener que irnos porque ya era tarde. Nos encanto de verdad, repetiremos seguro.
Estuve el sábado cenando en este restaurante con mi mujer y otras dos parejas. La entrada echa un poco para atras; entre el callejón, las obras en el edificio de delante y los carteles de “rebajas”, la verdad es que la sensación no es la mejor. Nada más entrar sorprende por su decoración, tan particular, que parece a ratos fría y a ratos cálida. El trato es siempre correcto, si bien tardaron cerca de 20m en darnos las cartas de la comida/vino y se retrasaron un poco en el servicio del vino; pero el local estaba lleno y supongo que puede disculparse con facilidad.
Pero vamos a lo importante, la comida; y he de decir que nos gustó, a todos. Las presentaciones de los platos, los aromas, sabores y texturas de las comidas estaban perfectamente conseguidos y disfrutamos mucho. Las vieiras (2 raciones) y el brick de morcilla resultaron espectaculares, y sólo la ensalada de pato y calamares (2 raciones) resultó algo más “sosa”, quizás porque fue la entrada que se sirvió en último lugar (dado que es fría, y dada la invasión de sabor de la morcilla, yo la habría servido al principio). Los segundos todos impresionantes; la lechona, el secreto, la merluza, el chuletón… todos en su punto, y sólo a a corvina le faltaba un punto de cocción (vino semi-cruda); la ensalada de perdiz y queso de cabra que se pidió mi mujer estaba riquísima y sólo le habría añadido alguna pasa o fruto seco (nuez/piñón) para contrarrestar, o complementar el sabor. De postre pedimos (2 y 2) el secreto de chocolate/naranja y la manzana con pasta filo y helado de baileys, y fue el colofón perfecto para una cena sabrosa y justa en su cantidad.
¿El precio?; 48 euros por persona, con propina, incluyendo 2 botellas de vino, precio que no me parece tan barato pese a tener ya incorporadas las “rebajas”. Por cierto que el Vallegarcía Viognier sigue siendo tan bueno como la primera vez que lo probé, o como sus hermanos “tintos” de la bodega, mientras que el Quercus resultó un tanto (bastante) decepcionante; no es un mal vino, pero es corto de nariz y tiene un final también demasiado corto para un vino de 30 Euros. Supongo que por eso el restaurante quiere quitárselo de encima y lo recomienda.
¿Repetiré?; sin duda, aunque a mi mujer la entrada al local le defraudó en exceso, tanto como para que me cueste volver a llevarla hasta que por lo menos acaben las obras del edificio de delante. Supongo que, más a corto plazo, tendré que ir con amiguetes o cualquier día de diario a probar ese menú del que tan bien hablan…
Un cordial saludo,
OPIMIUS
Por razones que no vienen al caso, esta semana he ido 3 días a comer a El Secreto y me ha sorprendido. Lo conozco y lo frecuento desde hace muchos meses, pero nunca había ido tantas veces en la misma semana.
Digo que me ha sorprendido porque yo pensaba que me cansaría y que a lo mejor el menú sería repetitivo. ¡Pues no! He comido muy a gusto las 3 veces y hasta he tenido dificultades para elegir entre los platos del menú porque practicamente todos me apetecían. La prueba de que no me he cansado es que el sábado ya tengo reservado para ir con unos amigos. Sí, quizás sea un poco exagerado ir 4 días en una semana al mismo restaurante. Ha sido algo excepcional. Pero vamos, que mi chico y yo vamos muy amenudo (solos o con amigos) porque además de comer muy bien, es un sitio en el que nos encontramos francamente a gusto, relajados y sin prisas. Os lo recomiendo.
¡Se me olvidaba! Para la mujer de “OPIMIUS”: ¿De verdad tú dejas de ir a un restaurante porque están arreglando la fachada del edificio de enfrente? No he oído nada semejante en mi vida.
Quédate en casa bonita… y deja a tu marido disfrutar.
Hola a tod@s!
Nosotros conocemos El Secreto desde que abrió porque vivimos al lado. Nos gusta mucho salir a cenar por ahí, y El Secreto nos gusta especialmente, nos encanta. Siempre nos han tratado fenomenal y comemos de muerte. Estamos enganchados a las vieiras, pero todo está muy rico. Siempre pedimos consejo a Sergio sobre el vino, y nos ha hecho descubrir vinos que nos gustan mucho y que para nosotros son una novedad. El ambiente es muy acogedor, y Nacho nos trata muy bien.
Conocemos a Gonzalo, el chef, porque a veces algo nos ha gustado tanto que le hemos felicitado. Le encanta su trabajo, se nota muchísimo.
Para nosotros ir a cenar allí es como darnos un pequeño homenaje.
Sentimos de verdad las experiencias negativas que comentan algunos, porque por nuestra propia experiencia no es habitual.
En tema de gustos hay de todo, pero nosotros os animamos a conocerlo.
Hola “cucharetistas”. Ni comentario va a ser muy breve:
Nos gusta mucho (a mi mujer y a mí), cenamos muy bien, nos tomamos unas copas con tranquilidad, nos tratan de maravilla… ¿Hay algo más que decir?
Os animo a que lo conozcáis y juzguéis vosotros mismos.
No pienso excederme en alabar las cualidades de El Secreto porque sé que cuando te alaban mucho, mucho una cosa, luego, cuando lo conoces, siempre hay algo que te decepciona porque tú lo has magnificado en tu imaginación.
Así que me limitaré a constatar un hecho real. He ido a cenar con cuatro amigos y nos gustó todo mucho: la cena, el ambiente, el servicio, el trato e incluso la música que te hace más agradable la cena, pero que está lo suficientemente baja como para que la disfrutes sin que apenas te dés cuenta de que existe…
Animaros a conocerlo.
Este mensaje es para los chicos de El Secreto:
¡Enhorabuena, chicos! Nos atendísteis muy bien y nos hicísteis sentir como si fuéramos “clientes VIP”. Y eso que estábais llenos…
Mis respetos al jefe de cocina y su equipo. ¡Bien por ellos!
No tardaremos en volver
Hola a todos,
Fui con mi pareja por primera vez a mediados de diciembre gracias a vuestras recomendaciones. El motivo era un cumpleaños y nos encantó. Todo estaba riquísimo, por unos 60€ cada uno.
Volvimos hace dos semanas con unos amigos, la comida no nos sorprendió porque seguía estando todo delicioso, pero sí nos sorprendió el servicio. Como decía alguien en su crítica, nos trataron como a Vips, de hecho Sergio se acordaba de la copa que tomábamos, de lo que habíamos comido la otra vez y hasta del vino que bebimos. Le preguntamos cómo era que lo recordaba, nos dijo que “era su trabajo”. Y he de decir que lo hace realmente bien.
Hemos caído en la tentación de nuevo esta semana pasada. Esta vez, ya estaban en rebajas y nos salió por 40€. Estoy convencida de que la siguiente ocasión no se retrasará mucho.
Mi recomendación para un menú completo: las vieiras, la lechona confitada, y la manzana con pasta filo. Realmente exquisito!!
Enhorabuena a todos los de El Secreto, en especial a Nacho y a Sergio, que han conseguido que nos sintamos mejor que en casa.
Y enhorabuena a Cucharete, que aunque no siempre estamos de acuerdo, nos descubren sitios nuevos que merece la pena conocer.
Saludos a todos.
Soy profesora en un instituto madrileño y el sábado por la noche os puse un “examen sorpresa”. Lo siento. Deformación profesional.
Ubicación (o sea callejón): 4,5
Local: 7,5
Comida: 8,5
Bodega: 8
Atención del personal: 9
Relación calidad precio: 8
Impresión general: 8,5
Nota media: 7,4
El suspenso del callejón os baja la media. Si lo arregláis un poco puede quedar hasta agradable y se os disparará la nota. Aún así habéis sacado un notable que está muy, pero que muy bien.
Ojalá pudiera ponerles yo estas notas a mis alumnos…
Volveré
Hola a todos,
Fui con mi pareja por primera vez hoy para celebrar el san valentin esta mañana. Todo estaba bueno, por unos 50€ cada uno.
Pero no los dieron el postre SORPRESA ni el cocktail que habeis mencionado y le hemos dicho que somos seguidores de cucharete!!
UNA GRAN DESILUSION que creo que no volveremos ya que nos pareció caro carissimo por la cantidad que pone y menos mal que estan de rebajas.
Trato normal y poco borde con los camareros.
Hola Isa,
el Restaurante El Secreto debe proporcionaros tanto el cóctel como el postre que han preparado para los lectores de Cucharete que se identifiquen y lo soliciten al camarero durante una comida o una cena cualquier día de la semana del 9 al 15 de Febrero.
Quizás le hayáis comentado que sois seguidores de Cucharete al inicio de la comida y no se hayan dado cuenta que era para que os trajesen el gran regalo que hay durante estos días, ya que la gente se lo suele pedir expresamente en el momento justo. ¿Solicitasteis el postre y el cóctel gratis?
Os aseguramos que tiene que haber sido un error -quizás un camarero nuevo mal infomado-, y que si os presentáis en cualquier otro momento con el ticket de la comida de ese día os los pondrán gustosamente aunque no pidáis nada más. De otro modo, perderían toda credibilidad en sus promociones y no podrían volver a ofrecer nada -nunca más- a nuestros lectores.
Os animamos a aclarar el tema con el restaurante y a que volváis a dejar un comentario informándonos de lo sucedido.
Un saludo.
Bueno, ya paso San Valentin, y os aseguro que el restaurante El secreto contribuyo a que fuera un dia estupendo. Siguiendo vuestras recomendaciones elegi este restaurante y contentisimos con la eleccion.
La comida estaba buenisima, las vieiras un bocado de pelicula y las croquetas de boletus a la altura. De segundo pedimos rabo de toro y carrilleras y los estupendos. Los vinos ajustadisimos en precio cosa que se agradece, tomamos un Finca Antigua Syrah que estaba buenisimo y a 12.50 que es un precio estupendo. El ambiente muy agradable aunque creo que otro dia estara mejor porque igual andaban un poco desbordados porque el aluvion de parejas era tremendo. Nos dieron el coctel y el postre, buenisimo todo, aunque esto debia venir de serie o todos fuimos de parte de cucharete, porque creo que solo vi a una pareja que no se lo sirvieron. Y despues de disfrutar con la comida, la cuenta termino de arreglarlo porque pagar 67 € por todo esto, es raro cenando a la carta con esta calidad. Eso si estabamos de rebajas, lo que hacia que los segundos platos fueran especialmente rebajados. ¿No podrian alargar las rebajas …? je, je…
El pero de la noche, por decir algo, los segundos platos no demasiado calientes ( el plato en si ardia pero la comida no).
Prometemos volver, nos ha encantado.
Hola Isa,
Soy Nacho, propietario y maître del Restaurante EL SECRETO.
Me encantaría que te pusieras en contacto con nosotros para aclarar este tema, porque debió ser una confusión. Como pudiste observar el sábado a mediodía, estábamos llenos, y puede ser que el camarero al que hiciste el comentario al principio, no se acordara o no te entendió. De todas formas, te pido disculpas.
Como ha comentado Cucharete, estaríamos encantados de ofrecerte el cocktail y el postre especial de San Valentín si os acercáis por nuestro restaurante.
Esperamos poder arreglar que te fueras desilusionada de EL SECRETO en un día tan especial para vosotros.
También nos gustaría que nos comentases cualquier poblema que hayas tenido con el servicio para poder solucionarlo.
Y por último, daros las gracias a todos los que enviáis comentarios al artículo de EL SECRETO en Cucharete, los tenemos todos en cuenta, y con vuestras opiniones nos ayudáis a mejorar, para poder daros un mejor servicio en el futuro.
Un saludo.
Nacho
* Cucharete.com garantiza la autoría de este comentario por parte del restaurante El Secreto.
Bueno…. el 13 de Febrero estuvimos cenando, dos personas, en El Secreto…. os cuento
La atención muy buena.
Pedimos Vieiras albardadas con jamón bellota y salmorejo INCREIBLES…..
Merluza….. muy rica y carrillada….. también muy jugosa y suave…. lo único que se quedó un poco fría rápido
Para beber…
Vino Tinto Pedro Martínez Alesanco Crianza D.O. Rioja del 2005, estupenda relación calidad precio.
Secreto de chocolate y Pasta filo con manzana al aroma de almendra y helado de bien Bayleis…. bien pero sin llegar a ser delicioso…. Dos cortados …
80 Euritos del ala
Recomendable..
El local un poco ruidoso pero es que estaba a tope
Estuve el 21 de febrero a las 21h 30m. Fuimos dos parejas. Pedimos tres primeros platos, cuatro segundos y cuatro postres. Demasiada comida a pesar de que nosotros somos de “buen comer”.
Los platos abundantes y de calidad. El servicio perfecto, agradable sin ser agobiante.
Tomamos un URZUAGA crianza y nos costo exactamente 150, 60 € que nos pareció muy razonable.
Yo no soy muy partidario, en general, de los restaurantes modernos pero este no me desagradó en absoluto. Volveré y lo recomendaré.
Alargan “las rebajas” hasta final de marzo.
¡Hola a todos los Cucharetes! Nosotros también estuvimos en el Restaurante El Secreto, el pasado viernes 2o de febrero. No queríamos perdermos esta nueva oportunidad que nos brindáis. A pesar de estar escondido, llegamos perfectamente gracias al amigo GPS y allí estaban todas las ventanas llenas de carteles anunciando las rebajas. Tuvimos buen recibimiento. Más o menos, sabíamos lo que íbamos a pedir “gracias a vuestras opiniones” y optamos por: las vieiras y la ensalada de calamarcitos, langostinos y jamón de pato como entrante. Las vieiras exquisitas, perfecta combinación de sabores, qué rico y suave el salmorejo que las acompañaba. La ensalada aceptable, pero los calamares se perdían entre tanto verde (en la foto que vimos aquí estaba más equilibrada), pero aún así nos gustó. Como plato principal, nos pedimos la merluza rellena de gambas (plato poco vistoso, tan sólo un triste pimiento del piquillo rompía su monotonía; estaba sosa, pero se notaba la calidad del producto) y la lechona confitada; ésta última estaba exquisita, crujiente, sabrosa, en su jugo y casaba genial con el puré de reinetas.
Coronamos la comida con la pasta filo de manzana: postre original, mezcla de texturas, increíble el sabor del helado de Baileys.
Y tuvimos suerte en la elección del vino, CYAN 2003. Magnífico.
Al finalizar la cena, estuvimos charlando con Nacho, propietario y maître del establecimiento, intercambiamos opiniones y coincidimos en que el servicio de sala es un 50% en el éxito de un restaurante. Y en el Secreto esto lo hacen estupendamente. Trato excelente.
Ah, no dejéis de probar el “chupito de piruleta”: lo hacen ellos mismos y es como si te estuvieras comiendo una piruleta de cereza.
Fue cortesía del Restaurante.
Nos gastamos 87 €, pero pagamos a gusto. Nos parece genial que ampliéis las rebajas, así más gente podrá darse el gustazo.
Seguro que volveremos. ¡Gracias Cucharete!
Hola a todos, fuimos a comer al Secreto mi pareja y yo el sábado 7 de marzo. De entrada os digo que me pareció todo estupendo, tanto el trato de los camareros como la calidad de la comida y ahora os lo explico más en detalle.
En cuanto a la comida/bebida nos pedimos:
1) como entrantes las vieiras y las delicias crujientes, siguiendo el consejo de los “cuchareteros” y no tengo nada que objetar, estaban muy ricas;
2) de plato principal el secreto ibérico con salsa de higos y frutos secos y el rabo de toro al vino tinto. Mi pareja y yo coincidimos en que estaban esquisitos, sinceramente creo que de tanto rebañar el pan le dejamos un zurco en el plato, jeje
3) de postre el secreto de chocolate y las milhojas de crema y nata (intentamos pedir la pasta filo con manzana al aroma de almendra y helado de baileys, pero ya se había terminado, ¡qué pena!). Viendo los comentarios de los demás, sabíamos que el secreto estaría espectacular (confirmado), en cambio, las milhojas era una incógnita… ¿qué dijo la prueba del paladar? Sin duda alguna que estaban riquísimas.
4) de beber pedimos una botella de agua natural y una de vino (el Pedro Martínez Alesanco Crianza 2005) que nos aconsejabais y os aseguramos que muy pocas veces he probado un vino tan bueno a un precio tan reducido.
Pequeño paréntesis: en todo momento, los camareros están pendientes de ti, más de una vez se nos acercó Sergio para preguntarnos si nos había gustado la comida - lo cual me parece importantísimo para el éxito de un restaurante (coincido con el comentario de otro ‘cucharetista’ más arriba) -, además nos quedamos a hablar un rato con él al final de la comida para felicitarle y decirle lo bien que habíamos estado.
Precio final: 80€. Un precio nada caro por una comida realmente excelente, un sitio muy acogedor y un trato por parte de los camareros increíble.
¡Felicidades y seguid así!
Una noche cenamos mi pareja y yo y nuestra opinión es que:
Sí, el ambiente del local, la atención,la presentación de los platos y el vino, excelentes pero la comida:
- De aperitivo unas roquetas de cocido insípidas.
- Las migas mal preparadas con su panceta dura.
-La merluza seca y también insípida al igual que la corvina algo dura además.
- El postre delicioso.
La calidad precio deja mucho que desear.
No pensamos volver. ¡Qué decepción!
Hemos vuelto a El Secreto después de algún tiempo y de nuevo hemos cenado estupendamente. Para nuestra sorpresa pagamos bastante menos que la última vez y eso que bebimos un vino muy, muy rico.
Muy bien chicos. Seguro que esta vez no tardaremos tanto en volver. Yo salí encantada y mi chico ni te cuento (es que esa noche invitaba él). Con los nuevos precios puede uno darse una alegría así con más frecuencia.
Hola a todos, os leo desde hace un tiempo y la verdad es que siempre que he probado alguno de los restaurantes que comentais he quedado bastante contenta.
En este caso elegí El Secreto para invitar a mi pareja por mi cumpleaños, normalmente nos gusta ir a restaurantes románticos o con ambiente acogedor. Y la verdad es que no es el caso de éste restaurante. Fuimos el sábado a cenar.
Había demasiada luz, supongo que tambien era porque nos pusieron en una mesa al lado de los ventanales que dan a la calle y donde los focos exteriores entraban directamente al interior con mucha fuerza. Además eramos dos y nos pusieron en una mesa de 4 con lo cual la intimidad es mucho menor y eso que quedaba alguna mesa de 2 libre.
El ruido y las voces del resto de las mesas era enorme, por momentos parecía que estuviesemos en un restaurante de carretera y que solo nos faltaba la tele.
Es una pena porque la comida estuvo bien en general, unos platos mejor que otros, buen vino a buen precio y la atención vamos a decir correcta aunque sin ser demasiado amable.
Pero desde luego no lo recomendaría para una velada romántica ni para una cena en la que se requiera un poco de tranquilidad.
Un saludo
hola a todos:
pues leyendo vuestros consejos estuve cenando aqui el sabado pasado. la verdad es que estuvo muy bien. el servicio muy correcto y preocupado por si todo estaba bien en todo momento. el maitre, Nacho, muy simpatico. la cena estubo muy bien. Eramos dos personas. de entrante huevos rotos con picadillo ( muy muy buenos ), solomillo de ternera y carrleras de segundo. un secreto de chocolate y vino (tuvimos que cambiar de eleecion por que no tenian el nuestro pero eso eso se pasa por alto ) todo por 70 euros. mas que aceptable de precio hoy en dia. la verdad es que el sitio es muy agradable, espacioso, y sin mucho ruido. lo recomendare a mis amistades y yo volvere pronto seguro. un saludo a todos
Estuvimos el jueves y quedamos encantados, con la comida y el servicio. De primero huevos rotos con picadillo, espectacular, y los segundos merluza rellena y chipirones, buenos, y de postre el secreto de chocolate también espectacular. Muy romántico, aunque también está bien para familia y amigos. Volveremos.
El pasado sábado fuimos a este restaurante, me decepciono bastante, no tiene nada de romántico, solo con el ruido que hay, que casi no puedes ni hablar, se va todo.
La mitad de la carta no habia, la comida buena pero nada más. Solo un camarero trabajaba, el resto miraba, tardaron bastante en tomarnos nota, tuvimos que pedir tres veces una botella de vino, se equivocaron en el precio cobrandonos de más. Quería ir a un lugar romántico y me salio todo al revés
Creo que tiene potencial, pero falta calidad en los platos y en el servicio.
Lamentablemente, por primera vez me habeis fallado.
Busque en la clasificacion de restaurantes romanticos y El secreto era una de las opciones. Nada mas lejos… solo tenian una sala abierta, la principal, con una mesa de unas 25 personas en plan boda, y otra de 6 en la que uno de los comensales se empeñaba en hacer participe a todos los presentes de sus conversaciones.
Aparte del ambiente, que cualqueir dia puede fallar, la comida mala. Pero mala fisicamente hablando. Vamos que de alli fuimos a tomar algo, y tuvimos que volvernos a casa a toda prisa de lo malos que nos pusimos.
Y en cuanto a los precios, si ahora los han bajado, no me quiero imaginar como estaban. Ensalada, 2 principales (uno era un entrante y el otro solomillo, el pequeño), un postre (raquitico) y 4 cervezas… mas de 60€.
La seman antes descubrimos el
referencia a otro restaurante, a solo unos minutos, y la verdad, ni punto de comparacion.* Cucharete elimina citas a otros restaurantes y empresas en los comentarios a un local, por poder ser considerado un comentario de la competencia.
Bueno, por matizar:
- La cocina muy bien , hemos probado las vieiras, geniales, la ensalada (deberían tratar mejor lo verde aunque los calamares y el jamón de pato buenísimo) y la lechona realmente fantástica.
Como puntos débiles es que hemos tenido que volver a pedir la cerveza, que el servicio es un punto menos de correcto (te dejan sin platos y te ponen comida para compartir, el agua nos la trajeron abierta) y no muy rápido teniendo en cuenta que sólo tendrían 7-8 mesas cubiertas.
y nos han tocado al lado una pandilla de maduras planificando sus vacaciones, que he estado a punto de entrar en la conversación
en general la cocina es muy buena y en cuanto afinen el servicio será un 4,5 cucharetes, particularmente lo dejaría en 4.
Para cucharete.com:
Los postres han bajado claramente de precio, están a 6,5 euros el más caro.
También comentar a cucharete que estaría bien que el portal se viera en una BB (en concreto el captcha no se ve) y por tanto no se puede comentar desde BB.
Lamento tener q escribir negativamente sobre mi visita a El Secreto pero ha sido casi todo un desastre.
Iba con bastante ilusión esperando me gustase teniendo en cuenta el buen rollito q transmite el libro y esperando q la energía allí vivida fuese igual. Y mas después d lo leido por aquí q me habia gustado.
Nada mas llegar (15:15) d la tarde no me dió ninguna buena espina lo d ver tan sólo 1 mesa ocupada.
Eramos 2 personas, mi madre y yo.
Nos pasaron al salón y ahí nos dejaron de pie en mitad del mismo… algo así como 5 minutos d reloj, en los cuales y viendo el panorama decidimos sentarnos en la mesa que nos dió la gana.
Quizás porque fuese de día la decoración del local tb me decepcionó. No era lo q esperaba después de ver las fotos. Quizás por la noche cambie.
Al poco vino el camarero (lo menos criticable del restaurante, por cierto) y retiró los 2 cubiertos q sobraban
Las mesas me parecieron tristes y frias, 2 platos, 2 copas y 2 cubiertos era lo q quedó en la nuestra. Ni una velita, ni una flor.. NADA. Y además al quitar los platos sobrantes, sorpresa! Habia uno roto en el mantel.
Somos de poco comer y pedimos 3 platos al centro para picotear.
Nos trajeron 2 canapecitos d morcilla con piñones d aperitivo d la casa q se los podian haber ahorrado. La morcilla estaba fría y el pan blando dl tiempo q debia de hacer q estaban hechos los canapés.
Tomamos vieiras con salmorejo. No estaban malas, algo crudas las vieiras.
Migas, horribles! Secas, sosas y frias, completamente frias. Se lo dijimos al camarero y nos dió la razón, llevándoselas inmediatamente y reconociendo q no estaban ni recien hechas ni en la temperatura adecuada. Dijo d traer otras pero dijimos q no, ya no teníamos ganas.
Y chipirones encebollados q lamentablemente estaban además de sosos, frios.
Ante la necesidad del salero y después d esperar unos minutos intentando q el camarero asomase por la zona y viendo q si ya estaban frios los chipirones como siguiésemos esperando iban a estar helados, decido levantarme en busca del mismo. Vamos, q ya lo q me faltaba… levantarme…
El camarero preguntó q que tal los chipirones y dijimos q no íbamos a protestar mas, q sosos y frios pero q ya daba igual, q lo dejase.
Terminamos y sin ganas de nada mas después d la pena d comida vivida nos fuimos sin postre y a tomar café a otro sitio.
Una pena q te estropeen de esta manera una comida en un día de fiesta.
Volviendo a ver las fotos insisto en la triste decoración d las mesas. Ni vela, ni plato de pan por comensal, ni sobreplatos, ni 2 copas por persona (solamente 1)
Acabamos de venir de cenar. Sinceramente nos ha defraudado el sitio. Los platos normalitos, escasos y con una calidad por debajo de la media para los precios que muestran.
A pesar de que el trato de la encargada y de los camareros ha sido más que correcto, sin embargo el retraso entre plato y plato ha sido considerable y las equivocaciones en la cuenta numerosas. Eso sí, se han resarcido regalándonos dos polos conmemorativos de halloween!!
2,5 cucharetes!!!
pues yo fui con mi novio el dia de halloween y la verdad es que me encanto el sitio la preocupacion de los camareros por si estabamos agusto en ciertos momentos era un poco escesiva pero la verdad esque sali encantada comi de lujo y disfrute comiendo que como no siendo cocinera (entiendo algo mas de lo normal) y sinceramente mi puntuacion de 0 a 9 les daria un 9 alto….
asique chicos chapoooo
Los ultimos comentarios realizados sobre el restaurante el secreto, son con toda la razon del mundo. Les pediria a los encargados de gestionar este tipo de paginas web, que vijilaran un poco la realidad y los cambios los cuales se efectuan en los restaurantes cada año.
Digo esto como referfencia a este restaurante mencionado. No tiene nada que ver con lo que era el secreto anteriormente, esto es todo una copia del anterior o un traspaso. Lo que me alucina, es que el anterior propietario mantenga la pagina web original, porque no tiene nada que ver con lo que es ahora el restaurante y no me refiero solo al local, sino a la comida.