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General Perón 16
Madrid (Tetuán)
Santiago Bernabéu
91 220 66 55
15 - 25
Sales con una sensación de haber tenido muy buena suerte una vez descubres el Mala Suerte Cafe. Un nuevo restaurante en Madrid ambientado en la simbología de la suerte, tanto mala como buena, que nos permite disfrutar de un espacio informal perfecto para compartir raciones a precios económicos, sin renunciar por ello a la calidad. Su comedor -habilitado para fumadores- tiene capacidad para 50 comensales. Ofrece un menú a mediodía de Lunes a Viernes a 10 € en el que podemos elegir entre 4 entrantes y 4 principales. Su horario de apertura es ininterrumpido, por lo que podemos desayunar, tomarnos una caña, comer, merendar y cenar. La cocina está abierta de 13:00h a 16:30h y de 20:00h a 23:30h (hasta las 00:00 durante la semana y hasta las 02:00h durante el finde se sirven copas). No cierra ningún día de la semana.
3,5
Rayo: ¡Hay que ver la buena suerte que hemos tenido al descubrir el Mala Suerte Cafe! A medida que vayáis leyendo nuestra crónica, os iréis dando cuenta del porqué. ¡Ya veréis… ya! Un espacio con personalidad propia, completamente nuevo, muy cerquita del Estadio Santiago Bernabéu. Apuntad… Desde la Plaza de Lima, cogemos la Avenida General Perón por la acera izquierda y… exactamente en el número 16… ¡el Mala Suerte Cafe nos espera!
La coqueta tipografía de su logotipo nos da la bienvenida desde su fachada a modo de mosaico, realizado cuidadosamente con azulejos ocres y negros. Sin duda alguna, no nos encontramos ante uno de los restaurantes habituales que tenemos disponibles en Madrid… ¡Estamos en uno en el que podemos tener muy buena suerte aunque parezca todo lo contrario! ¡Nosotros la tuvimos! ¡Tenemos pruebas de ello! Pero mientras no lleguemos al final del reportaje… Shhhhhhhh -Top Secret-
Nada más cruzar el umbral de su puerta, observamos que nos encontramos ante un local a estrenar. ¡Aprovechémoslo entonces! ¿A quién no le gusta lo nuevo? Pero… ¡Cuidado! ¡No es un restaurante apto para supersticiosos! Porque si queréis tomaros algo en su comedor… ¡Tendréis que pasar por debajo de una escalera! ¡Por narices! Y eso sería sólo el principio, pues vais a encontraros con todo lo relacionado con las leyendas y los mitos de la mala suerte recorriendo todas y cada una de sus esquinas… ¡Dios nos pille confesados!
El espacio de cafetería luce moderno, iluminado por enormes focos verticales a modo de garaje con clase, aunque personaliza un revival del Madrid más castizo añadiendo un mosaico lineal de trocitos de azulejos cuadrados y rectangulares -en tonos amarillo, castaño, azul y blanco- a la madera de su barra. ¿Eso dará… buena o mala suerte? ¡Quién sabe!
Para las bebidas alcohólicas más habituales tenemos a nuestra disposición un atractivo dispensador longitudinal de nada más y nada menos que ¡14 grifos! De modo que… tenemos para elegir de todo un poco. Y como podéis observar en las imágenes, gracias a los neones publicitarios, a los puntos de luz que marcan las escaleras y a las propias pantallas planas de TV, el Mala Suerte Cafe está constantemente amenizado por diferentes tonos de color que acompañan a la iluminación blanca que proviene del techo, tornándose más cálida cuando ajusta su intensidad a la baja.
Como atractivo decorativo, encontramos colgados en sus paredes diversos medidores de líquido que no pasan desapercibidos -sobre todo el número 13- para quien nunca los haya visto tan grandes. También nos fijamos en los taburetes metálicos, que despertaron nuestra atención por lo curiosos que son.
Pero ningún detalle anterior le restará protagonismo a la espectacular y enorme Ruleta de la Suerte del Mala Suerte Cafe. ¡De la “buena suerte” esta vez! Porque lo de esta ruleta es para premio -nunca mejor dicho-, pues puede conseguir incluso que toda tu consumición te salga completamente gratis. ¡Como lo lees! ¡GRATIS!
Te explico a grandes rasgos su funcionamiento: Abonas la consumición -ya sea una caña, una comida, o una cena con los amigos- y una vez tengas el ticket en la mano… Tiras con fuerza y… ¡A esperar a que se pare en algún premio! Un 20% de descuento… un 30%… un 50%… ¡incluso el importe total gratis! (Hasta un máximo de 100 €) ¡Impresionante! ¿Verdad? Pues más increíble todavía resulta lo que nos sucedió a nosotros… ¡Os aseguro que es para disfrutarlo en primera persona! Si no os podéis aguantar más… dadle a la barra de desplazamiento vertical de este post hasta abajo del todo, y al final de la sección de Ninillas… ¡tenéis la respuesta! ¡Qué recuerdos! ¡Y qué (buena) suerte tuvimos! ¡Increíble!
En la ruleta de un casino te da un infarto cuando sale el “0 verde”, pero en el Mala Suerte Cafe… ¡Te da un “infarto benigno”! ¡Porque significa que no pagas un duro!
Dejando la euforia a un lado… que para poder disfrutar de ella hay que comenzar por el principio de la historia… Crucemos los dedos y pasemos por debajo de la escalera mientras subimos… ¡otras escaleras! ¡Ay madre! ¡Dónde nos vamos a meter!
Pero ojo… ¡Sin escupitajos! ¡Que nos conocemos! Pues seguramente sabréis que esta famosa superstición viene por el triángulo que forma la escalera con la pared al dejarla apoyada. Antiguamente se creía que todos los triángulos eran símbolos sagrados, desde las pirámides hasta la trilogía de la Santísima Trinidad y, por lo tanto, era un sacrilegio pasar bajo ese arco. Y claro, como todo mal tiene su remedio, se pensaba que, una vez que se había cruzado, el mal se conjuraba cruzando los dedos, escupiendo una vez bajo la escalera o tres veces después de cruzarla. Incluso hay más versiones, pero como os comenté antes… ¡No vayáis escupiendo por el suelo del local! Mejor -y más limpio-… ¡Tocar madera! Ya lo cantaba Manolo Tena… “Con la escalera y el trece, mejor no tientes a la suerte.”
El comedor del restaurante Mala Suerte Cafe es moderno y desenfadado, y tiene capacidad para 50 comensales, un espacio informal completamente nuevo donde el naranja de sus cómodas sillas de plástico pone la nota de color en un ambiente en blanco y negro liderado por los sugerentes vinilos que afianzan el nombre del local.
Encontramos gatos negros, escaleras, tijeras y paraguas abiertos, sal derramada, tréboles de 4 hojas que se rompen, y muchas cosas más, pero sobre todo… el número 13 nos vigila desde cada esquina. Y me parece a mí que el número 13 en este ambiente tan peculiar no está presente por ser un número primo, o por ser un término de la sucesión de Fibonacci, sino por la triscaidecafobia -miedo al número 13-, antigua superstición que parece tener su origen en el hecho ocurrido en la mesa de la Última Cena, de las trece personas que se sentaron, en menos de 24 horas dos de ellas estaban muertas: Jesús de Nazareth y Judas.
¡Tranquilos chicos! ¡Por lo menos los mantelitos individuales no son amarillos! -color de la mala suerte por excelencia- Sino que son azules y rojos, claro que… si nos estrujamos un poco el cerebro… ¡esos dos colores son colores primarios! ¿Y cuál es el único que falta? ¡El amarillo! ¡Uff, que mala espina me da esto! Además, son de goma y con círculos concéntricos… ¡como si intentasen hipnotizarnos!
Menos mal que en el Mala Suerte Cafe han pensado también -pero muy poquito- en los supersticiosos, y tenemos un hueco reservado a la ¡buena suerte! Fijaos en esa mesa que reposa bajo un panel blanco, desde el que se lanza un pulso al resto del local con un gracioso conejito, un pomposo trébol de cuatro hojas, una brillante herradura y un montón de iconos más que ayudan a “equilibrar la fuerza”. ¡Qué la suerte os acompañe!
En definitiva… ¡Crucemos los dedos y elijamos nuestra mesa con cuidado! ¡Que a saber cómo acaba la noche! Por ejemplo… ¡la mesa que os muestro a continuación sería perfecta! Antes de la era cristiana, existía la costumbre de que dos personas enlazaban sus dedos índices formando una cruz para formular un deseo, de manera que una apoyaba a la otra mentalmente para que éste se cumpliese. La cruz, era el símbolo de la perfección en esa época, y en su unión residían los espíritus benéficos. La costumbre ha ido evolucionando y se ha simplificado, y a día de hoy se estima suficiente cruzar dos dedos de una mano. ¡Ahí queda eso!
Las mesas están numeradas con bolas de billar, y curiosamente… ¡falta la 13! La verdad es que el local no deja de sorprenderte. Quizás es mejor no tentar de manera tan provocativa a la mala suerte, recordad que en Madrid tampoco existe la línea 13 de autobús y nadie la echa en falta, al igual que en muchos rascacielos alrededor del mundo no disponen de planta 13, además… el número 13 del tarot significa muerte, y como muchos recordaréis, el Apollo 13 fue el único de los Apollos que no consiguió alunizar. ¡Ya hay demasiados 13’s en el Mala Suerte Cafe como para que encima tuviésemos una mesa 13! ¿Verdad? ¡No vaya a ser!
Esperemos que el emoticono ¡¡amarillo!! de la siguiente mesa ¡no nos eche mal de ojo! Por si acaso os toca esa mesa… llevad ajos, oro y plata, ojos de cristal azul ó herraduras… Ya sabéis que tradicionalmente se creía que al reflejarse en la pupila de un ojo, podíamos quedar atrapados por ella. Y debido a esto, desde la antigua Roma hasta la Edad Media, aquellas personas que tenían cataratas u otro defecto visual, a menudo eran sacrificadas en la hoguera. Y si no habíamos escupido antes… ¡Tampoco queméis al pobrecillo emoticono del Mala Suerte Cafe! ¡Si se le ve pinta de majo!
La mesa que viene a continuación es la que más me gusta de todo el comedor del restaurante Mala Suerte Cafe. Y no sólo porque es la más recogida y la que más intimidad transmite a sus comensales, sino porque el número 13 está muy presente por todos lados, en la pared, en la carta… y el nombre del local te recuerda a cada momento que puedes tener “Mala Suerte” Pero… ¿sabéis lo mejor? ¡Que es la mesa número 7 del local! ¡Fijaos en su bolita roja de billar! Y el 7 da… muy, ¡muy buena suerte! Así que tenemos la “fuerza maléfica” en equilibrio. ¡Aquí nos sentamos los cucharetes!
También tenéis un reloj antiguo reflejado en el espejo ficticio de la puerta que está al lado de la “mesa negra” -como yo la denomino- (color que le da el 8 a la bola de billar que la marca). ¡Cuidado con romper ese póster! Ya sabéis que romper un espejo son… ¡7 años de maldición! Os recuerdo que el espejo era un elemento mágico de adivinación, por lo que, si se rompía, era para que no revelase una imagen aterradora del futuro. Y siete años era el tiempo que, supuestamente, tardaba en renovarse el cuerpo, o el alma que habíamos destruido. ¡Cuidado con esta mesa!
Tenéis mesas y mesas para elegir ¿eh? Y cuando veáis la sección de Ninillas, ¡veréis más todavía! Aquí os dejo con el primer plano de una de las mesas montada con sus gomas hipnóticas, donde reposan las copas en su parte más alta, en las que la servilleta de papel marca la posición del plato. Por supuesto, la cubertería, vajilla y cristalería son nuevas. ¡Recordad que el Mala Suerte Cafe lleva abierto dos meses nada más!
Y cuidado… ¡que no se os caiga el salero en la mesa derramando la sal! Sobre todo si vais con amigos, como hicimos nosotros, pues el origen de esta superstición data del año 3.500 a.C. Se creía que la sal era incorruptible, razón por la cual se convirtió en símbolo de amistad. Y de ahí viene la creencia de que si se tira, la amistad se romperá. Si no podéis evitarlo -debido a la mala suerte colindante- podéis contrarrestar ese supuesto efecto maldito: ¡Echad una pizca de la sal derramada sobre el hombro izquierdo y listo!
Para regar los platos del restaurante Mala Suerte Cafe, elegimos por unanimidad un Prado Rey Crianza 2005 de la D.O. Ribera del Duero de entre las referencias disponibles, que en vez de en carta se muestran en una pizarra enmarcada en la pared. Nueve vinos disponibles, dos champagnes y un lambrusco rosado que mucha gente suele pedir hoy en día en locales modernos de precio económico como el que nos ocupa.
El Prado Rey cumplió con creces nuestras expectativas a pesar de alcanzar un elevadísimo 15% de alcohol, un tinto fino aderezado con una pizca de Cabernet Sauvignon y Merlot que se funden en una crianza de 17 meses en roble. ¡Para repetir sin problema alguno!
Pero… ¡ojo! ¡No derraméis el vino en la mesa! ¡Que a nosotros nos sucedió! Y menos mal que lo arreglamos a tiempo… Si viertes el vino en la mesa, debes aplicarte en seguida un poco del mismo sobre la frente para atraer la buena suerte, de otro modo… ¡La pifiaste! Y si te ocurre con el champagne, tienes que mojarte en él la punta de los dedos y frotarte el lóbulo de la oreja, ¡así conseguirás la felicidad eterna! (Casi que merece la pena que se caiga… ¿No?). La causa de esta creencia viene de que el inicio del feto es el lóbulo de la oreja, por ese motivo, al empaparlo en champán estás deseando que tu vida sea dichosa y próspera. ¡Serás feliz! Recordad que esta bebida espumosa también se suele utilizar para romper una botella contra los barcos en su botadura, para desearles buena suerte en su travesía.
Y como podéis apreciar también en la imagen superior… ¡fijaos en el pan! Ya sabéis que si os lo sirven boca abajo -y además de supersticiosos sois católicos- se supone que os traerá mala suerte, por tratarse en realidad de una ofensa al cuerpo de Cristo. ¡Y que no se os caiga al suelo! Porque tendréis que besarlo y hacer tres cruces para alejar las desgracias, como mandan los cánones.
Pero vamos ya con la cocina del Mala Suerte Cafe, que podemos resumir en: buenas presentaciones y buenas calidades, pues al encontrarnos en un restaurante con una horquilla de precios que va desde los 15 a los 25 €/persona lo tendremos muy en cuenta para estos tiempos de crisis donde a todos nos apetece salir a comer y cenar con los amigos sin que la cartera se resienta, y por supuesto -a pesar de la mala suerte- en un local en el que nos traten muy bien y en el que se cuiden los productos que consume el cliente. Además, la carta del Mala Suerte Cafe es perfecta para compartir: Entrantes variados, croquetas, huevos rotos con diferentes ingredientes principales, ensaladas, tostas, tortillas, hamburguesas, espetadas… ¡Al Mala Suerte Cafe se viene a compartir! ¡Que la mala suerte se reparta!
En esta nueva aventura gastronómica nos acompañaron Blanca -que nunca nos permitió hacerle una foto, no vaya a ser que se haga famosa-, Mario y Sandra; por lo que éramos 6 almas cuchareteras dispuestas a probar minuciosamente los platos que se ofrecen en el Mala Suerte Cafe.
Comenzamos con una Ensalada de Jamón Ibérico -que os presento yo mismo- en la que podéis apreciar la notable generosidad de esta ración. Un mézclum de lechugas con tomatitos cherry que venía aliñado con fundamento. Un plato que equilibraría un poco las calorías que vendrían después…
Después llegaron a la mesa los Huevos Rotos con Jamón Ibérico de los que ahí tenéis un primerísimo plano. Disfruté rompiéndolos yo mismo… ¡Y comiéndolos también! Pues con lo que me eché en el plato casi no dejo para los demás. Muy ricos y, por supuesto, acompañados de buenas patatas. No me extraña que incluso mojásemos sopitas…
Nos encantó a todos la Tortilla de Picadillo de Chorizo que veis a continuación. ¡Estaba de muerte! Cuajada en su punto justo -aunque para esto hay gustos y gustos- y de lo más sabrosa. Os recomiendo que no os la perdáis. ¡Espero que esté tan buena como la nuestra! ¡Buena suerte!
¡Buenas, buenísimas! Así estaban las Tortillitas de camarón del Mala Suerte Cafe. Venían acompañadas de mayonesa en un cuenco aparte, y se nos hizo pequeña la ración de lo sabrosas que estaban… ¡Porque la ración es de lo más generosa! La verdad es que ocupan un puesto de privilegio de entre todas las que hemos probado hasta la fecha -buen aceite sin duda-.
Pedimos también dos Brochetitas de Gambas con Bacon y Salsa Especial. Los dibujos de su salsa parecían ideogramas hanzi chinos o kanji japoneses… ¿Tendrán algo que ver con la “mala suerte”? Muy ricas, ya os imagináis que el palillo quedó limpito en el plato.
Riquísimas las Croquetas de Roquefort con Nuez, diferentes… sin duda. Os las recomiendo a todos los que queráis plantar cara a la suerte y dejéis de lado por una vez las más habituales de jamón o de picadillo.
Comenzamos la sección cucharetera de tostas con la Tosta de Pollo a la Mostaza. Digo “sección”, porque hay 12 diferentes en la carta del Mala Suerte Cafe y nosotros pedimos unas cuantas: ¡cinco! Ésta traía el pollo en salsa de mostaza, realizada a base de nata, bacon y cebolla. ¡Muy sabrosa!
A continuación, la Tosta de Queso de Cabra con Cebolla Caramelizada. El nombre ya os lo dice todo, yo añado que es de las más económicas de la carta y ya veis que buena pinta tiene… ¡Muy rica también!
FlashBack os muestra la Tosta de Solomillo de Ternera con Cebolla Caramelizada y la Tosta de Gambas con Ali-oli. Ambas en la línea de las anteriores. No sabría por cual decantarme para recomendaros alguna en exclusiva, pero en este tema se trata de probar varias diferentes y juzgar por uno mismo.
¡Y una más! También cayó -y no al suelo, que no hay tan mala suerte en el Mala Suerte Cafe- una Tosta de Jamón Ibérico con Tomate antes de hincarle el diente a platos más contundentes. ¡Pero ya estábamos casi llenos!
Aquí me tenéis con una enorme Hamburguesa de Queso Crema y Cebolla Caramelizada, y digo “enorme” claramente porque pensad que está a sólo 7,50 € en la carta -IVA incluido y todo- con lo que gana atractivo si la comparamos con otras similares de la competencia. Viene acompañada de patatas fritas y cumple las expectativas de un local como éste. ¡Veo en mi bola de cristal a mucha gente cenando hamburguesas en el Mala Suerte Cafe! ¿Nos apostamos algo? ¡Están buenas!
Ninillas aparece en su sección con una espectacular Espetada de Pollo con Bacon, Cebolla y Pimientos, yo os presento un primer plano para que veáis de primera mano que viene tostadito de la plancha, pero para nada quemado. Estaba en su punto, aunque la imagen no le haga justicia. ¿Será cosa de la mala suerte? La espetada es de los platos que más atención despiertan entre los comensales del Mala Suerte Cafe y es que, la verdad, son muy llamativos una vez llegan a la mesa. También hay disponible una Espetada de Carne con Cebolla y Pimientos, y la probaremos en la próxima visita.
También pedimos un Chuletón de buey (para 2 personas), que llegó a la mesa en dos platos acompañado de patatas fritas y ya cortado en tiras, como os muestran Mario y Sandra. Os recomiendo pedirlo un punto menos hecho que “al punto”, pues el nuestro venía muy hecho para nuestro gusto. Pero ya sabéis… ¡esto es un mundo! Quizás el Mala Suerte Cafe no sea un local para venir a disfrutar de un chuletón, yo recomiendo más las hamburguesas, tostas, y todo tipo de raciones, porque están bien buenas, aunque para el que desee darse el capricho… ¡Aquí lo tiene!
Los que nos seguís desde hace años… sabréis que nunca nos vamos sin probar los postres de los restaurantes que visitamos, aunque estemos a punto de reventar, y en el Mala Suerte Cafe no iba a ser menos. Así que pedimos un par de helados de sorbete que nos ofrecían, ¡son caseros!, por lo que no nos podíamos negar. Aquí abajo tenéis un Helado de Sorbete de Mandarina, y Ninillas os muestra el Helado de Sorbete de Limón. El resto es historia… ¡Cucharillas adentro una y otra vez!
También pedimos un Brownie con Helado de Vainilla y Nata. ¡Parece un tanque listo para entrar en acción! ¡Cuidado con el cañón que está muy crujiente y engancha! Muy rico y muy acorde al espacio en el que nos encontrábamos. Hay que destacar que los postres estaban a 4 €, algo que se agradece, pues se ve cada cosa por ahí hoy en día…
¡Ahora viene lo mejor de la noche! ¡Ya no aguanto más sin contároslo! Así que os lo digo antes que nada: ¡Pagamos un 30% menos en nuestra factura de la cena cucharetera! ¡Oeeeeee! ¡Oeeeeee! ¡Oeeeeee! Y es que, como os decía al principio de este artículo, la ruleta del Mala Suerte Cafe causa sensación entre sus clientes. Si salen muchos a la vez… ¡Hay cola para tirar! Y es que la cena -o la comida, o el desayuno, o las cañas, o cualquier cosa que hayas consumido en el local- puede salirte ¡totalmente gratis! Nosotros tuvimos una suerte increíble… Ilusos de nosotros… ¡grabamos un vídeo y todo! Por si sonaba la flauta más que nada, y… ¡voilà!, ¡sonó! El final de la sección de Ninillas es brutal: ¡Está el vídeo colgado! Nuestras caras no tienen desperdicio, por lo que recomiendo que lo miréis para que os echéis una risas a nuestra costa, porque la foto la hicimos después, y la euforia inicial ya la teníamos controlada, pero el vídeo es… ¡buenísimo!
Cuando salgáis… tened cuidado de que no os barran los pies, porque si sois solteros (o solteras) ¡No os casaréis en la vida! Dicen que son cosas de brujas, pero yo que soy gallego… os aseguro que “habelas, hailas”. Dejando las hechicerías a un lado, podéis disfrutar del Mala Suerte Cafe sin problema alguno de maldiciones y supersticiones, además… siempre merece la pena probar un restaurante nuevo y económico que acaba de abrir sus puertas en Madrid.
¿Os venís con nosotros a cenar al Mala Suerte Cafe de nuevo? ¿Qué tal si reservamos un Martes y 13? ¡Allí nos vemos!
Ninillas: ¿Creéis en la suerte? Yo sí. Creo que la suerte existe. Y además en múltiples vías: la buena, la mala, la del principiante… Pero el hecho de que crea que un encadenamiento de sucesos fortuitos o casuales puedan traer la buena o mala ventura, no implica que limite mi existencia a la casualidad como camino de resolución en los problemas del día a día. Lo que quiero decir es que para mí, la suerte existe, pero te tiene que pillar trabajando, eso para la buena. En cuanto a la mala… Ésa considero que llega a tu vida sin buscarla, sencillamente se presenta y, en ocasiones, se instala durante un periodo de tiempo siempre demasiado largo, sobre todo para el que la sufre.
El caso es que, creas o no en la suerte, hay que tenerla en cuenta, pues siempre hay alguien alrededor que es ferviente seguidor. Y, tal vez por eso, o puede que como burla al destino que nos espera, nació hace dos meses un nuevo restaurante en Madrid que estoy convencida que agradará tanto a los aduladores como a los detractores de la suerte. Se llama Restaurante Mala Suerte Cafe y, si queréis, podéis visitarlo conmigo. Vamos “pa’ dentro”.
El Mala Suerte Cafe es un restaurante de nueva apertura en Madrid ubicado en el número 16 de la Avenida General Perón, lo que lo convierte en el espacio perfecto para todos aquéllos que trabajan por la zona pues tienen un amplio horario que abarca desde la mañana a la madrugada de forma ininterrumpida. Vamos, que puedes desayunar, comer, merendar, cenar… Eso sin olvidarnos de las cañitas y de las copitas de última hora.
Nada más cruzar el quicio de la puerta, nos encontramos con una barra en la que resaltan sus dispensadores de bebidas. No sé por qué, pero siempre que los veo me acuerdo de las películas del oeste. Las botellas enfundadas a la espera de disparar sus balas líquidas de alta graduación. En fin, a cada uno las cosas le recuerdan otras… Lo que no recuerdo es la última vez que me pedí una copa a 4,50 € o una caña a 1,10 €, y menos aún en esa zona. Y sí, esos son los precios que gastan en la barra del Mala Suerte Cafe. No me digáis que no son atractivos.
Camino de la zona de sala, los supersticiosos tendrán que tener cuidado pues se pasa por debajo de una escalera. Cierto es que se trata de una escalera un tanto especial, pero oye, escalera es. De cualquier modo, para aquellos que sean reticentes a pasar por debajo, les aconsejo que se dejen de lado los malos augurios y superen lo irracional porque, quien algo quiere algo le cuesta y, os puedo asegurar, que lo que viene a continuación, merece la pena.
Enfrente de la barra, es inevitable fijarse en una enorme ruleta y las cifras que en ella se indican: 20%, 30% y 50%. ¡Ah! Y una palabra mágica: ¡GRATIS! Os preguntaréis: ¿Pero esto qué es? Pues… ¡Una ruleta de la suerte! Sí, habéis oído bien. La cosa va así, comes, cenas, tomas unas cañas, o unas copas, o lo que quieras, y una vez que abonas tu consumición te dan tu ticket. Ese ticket te da derecho a girar la ruleta y si la suerte está de tu lado… ¡Podrás disfrutar de diferentes descuentos e incluso puede que tu consumición sea GRATIS! El límite de devolución lo han puesto en 100 €, una cantidad muy alta, sobre todo si tenemos en cuenta la horquilla de precios que se baraja en el restaurante Mala Suerte Cafe.
Cinco escalones separan la zona de barra de la de sala. Su decoración se centra en las supersticiones más comunes representadas en vinilos que recorren las pareces del local. El juego de grises se plasma a diferentes alturas, pero siempre transmitiendo un espíritu joven.
El comedor -todo para fumadores- tiene una capacidad para 50 comensales distribuidos en mesas de cuatro, que se sitúan a los lados dejando un amplio pasillo central y permitiendo que no haya una saturación de clientes, como suele ocurrir en los restaurantes de precios asequibles como es el Mala Suerte Cafe. Por supuesto, el local es perfecto para celebraciones y reuniones numerosas pues para juntar mesas siempre hay tiempo. Además, la sala se anima con dos televisiones que siempre vienen bien a la hora de ver algún partido interesante.
Como ya os he comentado antes, por las paredes hay diferentes vinilos basados en la simbología de la suerte, tanto de la buena como de la mala. Y si no, mirad la siguiente imagen: unos dedos cruzados junto a un gato negro. Os garantizo, según mi propia experiencia, que en el restaurante Mala Suerte Cafe no os hará falta cruzar los dedos y, respecto al gato negro, os recuerdo que la última vez que nos dio por quemarlos fuimos recompensados con la Peste Negra, así que, dejémoslo ahí tan tranquilito que no hace mal a nadie. Eso sí, cuidadito si os casáis en un año, que aquí da mala suerte, aunque de creéroslo, se soluciona rápido haciendo un viajecito a Inglaterra, que allí, la trae buena.
Y ¿qué me decís del paraguas abierto? Reconozco que esta superstición sí que la sigo por aquello de: “por si acaso”. Se supone que si abres un paraguas sobre tu cabeza estando en una casa, mueres antes de que acabe el año, pues existe una negatividad, ya que la casa protege a sus habitantes y no soporta una protección adicional. Como ya he dicho, yo la sigo por si acaso que aún soy muy joven.
El trébol de cuatro hojas no podía faltar, aunque aquí se ha quedado sin un foliolo, justamente el de la suerte. Dicen que traen fortuna si se encuentran accidentalmente. Con el trébol del Mala Suerte Cafe tendríamos esperanza, fe y amor. La suerte se ha caído, aunque si es cierto lo que las otras tres hojas te dan, no vamos mal. Acompañando a tan especial trébol, hay un cuadro que tiene pintado el reflejo de un reloj y, la verdad, desconocía esta superstición. No sé si da buen o mal fario.
Ahora viene una de mis favoritas, la rotura de un espejo. Es el claro ejemplo de una superstición llevada al extremo, pero con una claros fines económicos. La cosa se remonta a la Italia del siglo XV cuando aparecieron los primeros espejos de cristal. Los espejos eran considerados una joya en sí, pues se revestían con oro y plata, y simbolizaban el estatus económico de las familias. Los espejos eran sumamente caros, y para que los sirvientes los tratasen con sumo cuidado, se les advertía de que romper uno equivalía a 7 años de grandes desgracias. La historia llega hasta nuestros días, y todos en alguna ocasión nos hemos acordado de la superstición. En el Mala Suerte Cafe el espejo lo han colgado junto a un panel repleto de símbolos que atraen la buena suerte, será para compensar energías.
Las mesas del restaurante Mala Suerte Cafe se numeran haciendo un uso literal de las bolas de billar. Se visten con unos mantelitos individuales de goma en color rojo y azul, que ponen la nota de color y se acompañan por una original cubertería y una cristalería acorde al local en el que nos encontramos. Sí, ya sé, no hay manteles, pero tampoco cenas por 100 € persona. Al César lo que es del César, y aquí se entiende que prescindan de ellos.
Por supuesto, en este restaurante no dejan que olvides su nombre, Mala Suerte Cafe, -dará que hablar- y siempre hacen de la superstición un buen motivo para la risa. ¿Se imaginan comprar lotería en una administración llamada “El Gafe”? Quién sabe, lo mismo se forraban.
Si echamos un vistazo a la carta, nos daremos cuenta de que el restaurante Mala Suerte Cafe es un sitio para compartir, ya sean supersticiones o platos. Ofrecen un total de 80 entradas repartidas en diferentes secciones: Entrantes, Ensaladas, Tortillitas de patata Mala Suerte, Tostas, Carnes, Hamburguesas y hasta un Perrito Especial. Con un denominador común: sus precios asequibles y aptos para todos los públicos. Además, absolutamente todos los platos de su carta se pueden disfrutar también en barra un poquito más económicos -20 céntimos-, lo que puede ser otra opción, sobre todo si vas pillado de tiempo. También ofrecen de lunes a viernes un menú del día a 10 € donde puedes elegir entre 4 primeros y 4 segundos y que incluye pan, bebida, postre o café. Eso sin olvidarnos en todo momento que te puede salir por mucho menos e incluso gratis si la diosa Fortuna te acompaña al girar la ruleta de la suerte.
Aquella noche nos juntamos 6 personas alrededor de la mesa: Mario, Sandra, Blanca, Rayo, FlashBack y yo. Tengo que deciros que la cosa nos cundió bastante, pues al ser tantos pudimos dar buena cuenta de número considerable de platos. Abrimos nuestra cena con estos Huevos rotos con jamón ibérico de la sección de Entrantes. Además los había con picadillo de chorizo, con bacon y salchicha y con gulas, pero nosotros nos decidimos por los clásicos con jamón. La ración era abundante, y sobre todo muy sabrosa. Buena patata -bastante olvidada en otros restaurantes de esta factura-, los huevos fritos en su punto, con su yema lista para bañar todo el plato, y un jamón en finas lonchas que daba alegría a todo el conjunto. Un acierto.
De la sección de Ensaladas nos decantamos por esta Ensalada de Jamón Ibérico. Nuevamente un plato más que generoso que se componía de un mézclum de lechugas, tomate cherry, cebolla frita y el jamoncito. El conjunto se regaba con una vinagreta de Módena que le sentaba fenomenal.
Sandra y Mario os muestran unas Tortillitas de camarones y una Tortilla de picadillo de chorizo. No sabría decir cuál de los dos platos me sorprendió más. Las Tortillitas de camarones estaban espléndidas, nunca pensé que en el Mala Suerte Cafe me las fueran a servir así. Respecto a la Tortilla de picadillo de chorizo, estaba perfecta para todo tipo de comensal. Ni muy cuajada, ni poco. En el punto justo. Debo añadir que todas las tortillas son de patata y que luego tú puedes elegir que lleva además: jamón, bonito, pimientos o, como en nuestro caso, picadillo de chorizo. Ambos platos los considero imprescindibles en este restaurante.
El siguiente primer plano corresponde a la Brochetita de gambas con bacon y salsa especial -2,80 €-. Efectivamente, la brochetita llevaba todos los ingredientes que en la carta rezaban, y el resultado era francamente bueno, sobre todo si mojabas el bocado en la salsita que acompañaba, riquísima.
Como leímos que se trataba de una Brochetita y no Brocheta, pedimos dos para que todos pudiéramos probarlas, y aquí os las muestran Sandra y Mario.
En el restaurante Mala Suerte Cafe ofrecen cuatro tipos de croquetas, todas caseras: de jamón, de picadillo de chorizo, de ahumados y de roquefort con nuez. Precisamente son las Croquetas de Roquefort con nuez las que os muestra Rubén. Estaban muy ricas, bien fritas y nada aceitosas, al mismo tiempo que cremosas y sabrosas. Pero sobre todo me resultaron originales.
Las Tostas van desde los 2,80 € de la más económica hasta los 3,30 € de las más exclusivas. También ofrecen una Rueda de Tostas variadas -6 unidades seleccionadas por el restaurante- a 16,50 €. Como nosotros preferíamos otras optamos por pedir 5 según lo que nos apetecía esa noche. Empezamos por esta Tosta de gambas con ali-oli.
La siguiente es una Tosta de solomillo de ternera con cebolla caramelizada que me supo muy bien. Sin duda, las Tostas son una opción francamente interesante en el restaurante Mala Suerte Cafe.
A continuación os muestro una Tosta de queso de cabra con cebolla caramelizada y otra Tosta de pollo a la mostaza. Ambas estaban muy ricas, pero me pareció más original la de pollo, sobre todo porque se notaba el bacon y la cebolla, y junto con la salsa estaba de “toma pan y moja” -nunca mejor dicho-.
Por supuesto, estando Mario en la mesa, una Tosta de jamón ibérico con tomate tenía que caer. Así que… le dimos el gusto, o mejor dicho, nos lo dimos todos.
En un principio no llevábamos intención de pedir hamburguesas, pero a Doña Blanca le gustan más que a un tonto un lápiz, de modo que se pidió una. Cuentan con tres tipos de hamburguesas, todas con patatas y a un precio más que razonable -7,50 y 8 €- sobre todo una vez que la vimos en la mesa. La que ella pidió es la Hamburguesa con queso crema y cebolla caramelizada. A buen seguro que será la opción de más de uno porque la verdad es que en el Mala Suerte Cafe tienen muy buenas hamburguesas.
Y esta súper brocheta que os enseño a continuación es nada más y nada menos que una Espetada de pollo con bacon, cebolla y pimientos. La imagen impresiona, pero os aseguro que aún impresiona más comerla, porque la verdad es que tanto la carne como las verduras estaban en su punto justo de parrilla. Sin duda, es una opción interesantísima para comer y para compartir. Si el pollo no es lo vuestro, también podéis optar por la de carne con cebolla y pimientos.
Aquella noche la recordaré como la de los caprichos. Mario con el jamón, Blanca con la hamburguesa y FlashBack con el Chuletón de Buey. Porque sí, en el restaurante Mala Suerte Cafe tienen chuletones. Puede que a muchos no les cuadre, pues es un local joven con una carta basada más bien en platos para compartir, tostas, tortillas, hamburguesas… Pero lo cierto es que con la inclusión tanto del Chuletón como del Secreto ibérico se abren más a otro tipo de público al que tal vez le apetezca comer carne en estado puro. El Chuletón se sirve para dos personas -1 Kg aprox- y su precio es 38,50 €, tal vez un poco excesivo para el ticket medio que maneja este restaurante.
Regamos la cena con un Prado Rey Crianza 2005 de la D.O. Ribera del Duero que cumplió las expectativas. En el restaurante Mala Suerte Cafe no cuentan con carta de vinos, son más originales y han optado por una presentación más informal, en concreto por una pizarra en la que hay escritos 10 vinos y 2 champagnes. Entradas más que suficientes para un local de horquilla de precios.
Como habéis podido apreciar, la cena fue variada, pero claro… aún quedaban los postres que no podían faltar para culminar la velada. De momento, sólo ofrecen tres postres, de modo que pedimos los tres. Empezamos con este Sorbete de limón, o mejor dicho, Helado de sorbete de limón. Estaba muy rico, y además ayudó a aligerar los estómagos.
Además también cayó otro Helado de sorbete de mandarina -mostrado por Rayo- y el que os muestro a continuación: un Brownie con helado de vainilla y nata. Como ya sabéis no soy muy amiga de los brownies, pero este me gustó, entraba bien y no era de los del tipo “mazacote” que ponen en otros locales.
Acabamos la cena con unos cafés con leche, cortados, descafeinados con hielo… A veces pienso que si fuéramos 12, cada uno pediría una cosa distinta. Supongo que en la variedad está el gusto. En fin, todos estaban 1,50 €, al igual que las infusiones.
En la sobremesa aproveché para echar un vistacito a los baños, que nos reciben con unos cartelitos de lo más ilustrativos.
Dentro del baño sorprenden dos cosas. La primera, el alicatado de los azulejos, van en diagonal. Casi una obra de ingeniería. La segunda, el cartelito que hay colgado al lado del retrete con los pasos que siguen hombres y mujeres a la hora de la visita al Sr. Roca. Merece la pena detenerse en él.
Una vez pagada la cuenta, y con el ticket en la mano, empezaron las disputas porque… ¡Era el momento de tirar a la ruleta de la suerte! Al ser yo tan terca -lo reconozco, soy terca- me obcequé en que tiraba yo, y que tiraba yo, y que allí no tiraba nadie más que yo. Vamos, como una cría chica. Así que me dejaron por imposible y tiré yo. Pero… ¡Qué tirada señores! ¡Un 30% de descuento! Parecía que estábamos en las rebajas. ¡Qué digo las rebajas..! ¡Mejor! Porque una vez que has pagado, ya no te acuerdas de él y es entonces cuando tienes la “suerte” de caer en ese 30% y te devuelven el dinero correspondiente. Sí, lo sé, podría haber sido un 50 % o incluso un Gratis, pero mírenlo de otro modo, también podría haber sido un 20 % o un NADA.
Me quedan aún algunos precios que daros, como el del agua, que la tienen a 1,50 €, o el pan… ¡a cero!, sí… habéis oído bien, no cobran el pan. Todo un detalle para los tiempos que corren. Y añado más cosas positivas, un servicio ágil y agradable de los que son capaces de sonreír y trabajar al mismo tiempo. Su cocina, a base de platos sencillos y ricos, sin grandes innovaciones, pero original y bien elaborada, y todo ello bajo la sombra de la suerte, o mejor dicho… bajo el desafío de la misma.
En resumen, el Mala Suerte Cafe es un restaurante económico, de nueva apertura, informal y con muchas ganas satisfacer a los clientes, donde su nombre es justamente lo contrario de lo que piensas cuando sales de él, porque… ¡qué queréis que os diga! Yo me fui del Mala Suerte Cafe más contenta que unas castañuelas, y no sólo por su ruleta, sino porque para mí fue una suerte encontrar un local así en esa zona. Y es que la suerte es lo que tiene, que es caprichosa.
Cucharete: ¡Hay que ver lo bien que se lo pasaron mis cucharetes en el Mala Suerte Cafe! ¡Si hasta les tocó un premio del 30% de descuento en su ruleta! ¡Menuda suerte! La verdad es que es un local que merece la pena para visitar con amigos y disfrutar de una comida o una cena informal con un montón de platos a compartir al centro y unas hamburguesas o espetadas para cada uno de los comensales. Mi equipo cenó por 25 €/persona, seis personas con 7 entrantes, 5 tostas, 4 principales (uno de ellos para 2 personas), 3 postres, 4 botellas de agua y 6 cafés variados. A lo que tendríamos que añadir 2 botellas de vino -19 € cada una-. Y llegaron a 25 € porque pidieron chuletón, que si no habrían salido por bastante menos. De todos modos, les salió finalmente un 30% más barato de lo que os comentamos. ¡Pues tuvieron muchísima suerte en la ruleta gracias al acertado tiro de Ninillas!
Su decoración, haciendo alusión en todo momento a la buena y a la mala suerte. Su espectacular “Ruleta de la Suerte”, en la que te puede salir incluso gratis la totalidad de la cena. La elaboración de sus platos. Los precios de las copas en su barra. Su relación calidad/cantidad/precio. El amable trato del servicio en todo momento. Disponibilidad de WIFI. Aceptan todos los cheques de comida.
Pequeñas pinceladas típicas de un local joven.
3,5
31 comentarios a “Mala Suerte Cafe”
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Muy divertido e inteligente lo de la ruleta, ganes o pierdas te vas con una sonrisa en la boca, la primera impresión es muy importante ¡pero también la última impresión cuenta!
La comida pinta bien, la hamburguesa y las tostas en especial.
uy, que buena pinta tiene todo, sin duda iré a probar. gracias.
casualidades de la vida.. me lo han recomendado por otro lado
ya he resrevado para ir el sábado!!! ya os contaré..saludos
El sitio tiene muy buena pinta, la comida se ve exquisita y el ambiente muy divertido. Posiblemente celebre alli mi cumpleaños.
Enhorabuena por un sitio tan diferente!!!
BTW … la comida gratis de hoy, ha sido gracias a la recomendación de @Cucharete del “Mala suerte café” y su ruleta de descuentos
Pensando que pedir mañana en Mala Suerte Café, los huevos rotos con jamón tienen muy buena pinta http://bit.ly/bcKcxw (via @cucharete)
@Cucharete Que bueno lo de la ruleta, el viernes voy a ir con unos amigos a probar suerte en La Mala Suerte…
@Cucharete Asi es, éramos 8 y del subidón casi nos volvemos a sentar, pero había que volver al curro. Creo que volveremos la prox semana
Fuí ayer a comer y nos quedamos a una casilla de salirnos gratis!!!!de todos modos la comida genial.
@Cucharete!! Hemos sacado 50% en la ruleta de Mala Suerte!! Obra de @_Miki http://twitpic.com/16r9la
Gracias Cucharete por este gran descubrimiento!!!
Absolutamente recomendable…. un sitio de lo más original y divertido.. nos encantó todo!!!!!! fui a cenar con 3 amigos y la comida bueníiiiiiiiiiiisima, baratíiiiiiiiiiisima, el ambiente superchulo, la decoración una pasada…. en la tirada de ruleta no nos salió gratis pero hubiera pagado el doble si hubiera hecho falta porque nos encantó el sitio. Desde luego a partir de ahora entrará en mis favoritos… ojalá toda la malasuerte del mundo fuera como este sitio…..arriba la malasuerte!!!
Estuve el viernes y la verdad que el sitio esta muy chulo ,pero me decepciono un poco que tardaran tanto en servirnos cuando llego la comida estaba un poco fria pero por lo demas genial un sitio con buen rollo .y la ruleta lo mejor que buena idea este restaurante
Estuvimos el viernes pasado 8 personas y salimos encantados, la comida genial,el trato buenisimo y ademas la decoracion y la ruleta que no nos toco pero sales con una buena sonrisa de alli.En cuanto al tiempo de espera decir que la encargada nos pidio disculpas cien veces y dijo que fue un error de prevision,es decir avalancha de publico jeje.Pero en general encantados todos con el sito.
yo fui el sab a cenar y la verdad es que muy bien! la comida muy rica…en su punto
un sitio distinto…casi nos toca el 50%..nos qdamos a 1 casilla!
volveremos…nos gustó bastante
Pues yo ya tengo reserva para el sábado 13 y tengo unas ganas d ir y probar…. jejeje
Ya os contaré a la vuelta!!
Que recomendais para comer? Ya sé q todo estará rico pero algo q os haya llamado más la atención??
Hola Irma,
no hay más que leer la zona del reportaje en la que hablamos de los platos que degustamos esa noche para descubrir de primera mano lo que más nos llamó la atención. ¡Para no repetirlo aquí de nuevo!
Un saludo
Cucharete Team
La verdad que el sitio no esta nada mal, cosa que no me canse de repetir a mis amigos cuando lo probe; buena comida, no esta mal de precio, buen ambiente…
Hasta aqui llego mi buena suerte, que no es poco, pues a la 01:00 y viendo que habiais puesto en esta maravillosa pajina que tenian comidas hasta la 02:00 los fines de semana, decidi pasarme a cenar algo, con la mala suerte que las 02:00 se sonvirtieron en la 01:00, dejandonos sin cena, ya que se miraron el reloj y dijeron.. a estas horas ya no chico.. Una lastima.
Pero bueno la verdad que el sitio esta muy bien ( buenisima la tosta de pollo creo que con mostaza y nata).
Asi pues seguire yendo asiduamente a probar suerte y a beber sus cañas, que no dejan de servir con buenas tapas, y teniendo cuidado de no hacer caso a eso de las 02:00 de la mañana, mas de la una ya corres el riesgo de no cenar.
Gracias por vuestra pajina.
UN SALUDO DE BARNEY AL EQUIPO DE CUCHARETE
Hola Barney!
Gracias por tus elogios y por leernos semana a semana! Respecto a lo que comentas sobre el horario del Mala Suerte Cafe, probablemente hayas confundido el horario de cocina con el de copas, pues la cocina del restaurante cierra a las 23:00h como explicamos en la entradilla de este artículo:
“La cocina está abierta de 13:00h a 16:30h y de 20:00h a 23:30h (hasta las 00:00 durante la semana y hasta las 02:00h durante el finde se sirven copas).”
Lo que añadimos es que, hasta las 00:00h (durante la semana) y hasta las 02:00h (durante el finde), se sirven copas, pero no cenas, pues a esas horas ya no está la cocina abierta. Sentimos la posible confusión que haya podido generar la redacción.
Un saludo
Cucharete Team
Estuve el viernes pasado gracias a vosotros y el sitio me gustó mucho, tiene encanto, y sobre todo las tostas. En serio, para mí, de lo más rico que he probado, y mira que no son muy complicadas, perooo…… DIOS qué ricas!!! La espetada de carne regular (la carne, porque las verduras estaban muy buenas) y el carpaccio muy bueno. Volveré!
Gracias por el aviso Cucharetes!!!!!!!!!!
Cenamos muy bien! y barato y nos tocó un 20%…así que nos tomamos la primera copa allí..para celebrarlo…en vaso de sidra como debe ser!!volveremos seguro
Buenas tardes, estoy algo asombrado ante la cantidad de elogios que recibe este “restaurante” yodiría que es un bar con pinchos para tomar unas cervezas como mucho.
El otro día cenamos a la carta varios amigos y desgraciadamente tengo muchos puntos que criticar, las ensaladas muuuy pequeñas, vacias de ingredientes que no fuera lechuga, para el precio, las tostas algunas con el pan quemado y la calidad de la carne o el pollo es imposible apreciarla por que la mayoria están encharcadas en salsa, los vasos sucios, el camarero poco antento, tuve que pedir que los cambiaran, salimos casi por 20 euros para solo picar algo y de calidad muuuy normalita, por este precio hay opciones infinitamente superiores!!! Para mi es un sitio de menú del día del montón con un diseño distinto, vale para tomar cañas para comer o cenar NO se lo recomiendo a nadie a quien cuando va a comer o cenar fuera le gusta ir a un restaurante no a un bar de tapas.
Un saludo
Nos cenamos fenomenal, la verdad, q wenas las croketas de chorizo..y las tortillas..mmmm…además bastante majetes
VOLVEREMOS
fui a cenar anoche con mi chica! pedimos mil cosas
y nos salió muy baratito y todo muy bien! cómo está la brocheta!! y las burguers muy bien..se nota que es carne buena
os lo recomiendo… luego tiramos de la ruleta y no tuvimos suerte…a ver si la próxima..
Estuvimos comiendo el otro día, de menú unos y de carta otros. La comida estaba bien, pero sosa (tanto la del menú como de la carta).
Y otra cosa, lo de la ruleta tiene trampa, la pizarra que tienen (y que aparece en una de vuestras fotografías) miente. Los menús del día NO ENTRAN en el juego, nos lo advirtieron antes de tirar de la ruleta.
Es el primer sitio de Cucharete que no me ha gustado, todo sea dicho.
Cuando entré en este restaurante no podía imaginarme lo bien que me lo iba a pasar con mis amigos.
Es un restaurante temático sobre la mala suerte en que puede tocarte la consumición gratis al tirar de la ruleta… Yo tuve mala suerte… pero a dos de mis colegas le tocó.
Pedimos croquetas de chorizo, increíbles… y eso que a mí las croquetas de los bares como que no… pero ante éstas me quito el sombrero. ¡Una de buena suerte!
Las brochetas de gambas con bacon estaban deliciosas.
La mala suerte con las bravas… ¡Cómo picaban las jodías!
Si te quejas de tu suerte eligiendo restaurante, prueba el Mala Suerte.
Un saludo.
Las tostas merecen la pena, están muy buenas y son baratas, la ración de croquetas bien de sabor pero cara dado el número unidades.
Un buen sitio para cenar a base de tostas.
Hola he visto los comentarios sobre este sitio,por lo que veo hay de todo ,posiblement vaya a pasarme hoy ya contaré…
Hola!
Siguiendo los consejos sobre lugares en los que cenar que destacais en la página, encontré el Mala Suerte Café; nos gustó el ambiente que prometían las fotos del sitio y de la comida; qué decir de la ruleta!! (originalidad ante todo!), así que fuimos mi chico y yo. La experiencia estuvo bien en cuanto a la comida; nos encantó la ensalada de jamón de pato con tomates cherri y queso, las croquetas y los huevos revueltos con gulas, pero nos tocó un poco la mala suerte, ya que nos deslució la noche un grupo de 18 personas que celebrarban un cumple a pleno pulmón, por lo que nos costó hablar y oirnos a mi pareja y a mí… y también que la ruleta estaba estropeada, según nos dijeron… Pero bueno, probaremos una segunda vez, a ver si esa nos toca la buena suerte!! Gracias por la página!!
Un saludo.
Este restaurante ya no existe, quizás deberíais eliminarlo de vuestra web
Una lastima la verdad por que las hamburguesas eran muy buenas.
No creo que vuelvan a abrirlo por que el local parece un hospital robado, …
Era un sitio muy chulo y además bien colocado. Varios negocios similares en la zona han cerrado tras varios años y no eran para nada malos, …
Que pena!