Restaurantes en Madrid

• Martín de los Heros, 19
  Madrid (Moncloa)
  Ventura Rodriguez
  91 559 64 69
  15 - 25

Rayo: ¡Estáis de enhorabuena, lectores cuchareteros! Pues nos es grato anunciaros que hemos descubierto un nuevo restaurante madrileño perfecto para esta época de crisis, en la que… ¿El ahorro prima sobre el disfrute gastronómico? ¿Salir con los amigos “a dónde sea” implica descuidar un resultado satisfactorio para nuestro paladar? Habitualmente así es, pero… ¡En el 19 Bar Bistró se han alineado los planetas! Un eclipse de precios deja satisfecho a todo aquel que ojea su carta por primera vez, llena de ideas para picotear en grupo compartiendo platos o incluso disfrutando de platos principales cuidadosamente elaborados como si de un local de más empaque se tratase. ¡Sin olvidar sus hamburguesas! Que presumiendo de precio: 9 € para la de ternera 100% y 12 € para la de buey wagyu… ¡Van a triunfar sin duda alguna en el número 19 de Martín de los Heros! Y es que, a día de hoy, ofrecer un espacio moderno y distendido con un ticket medio de 15 a 20 € por persona, en el que además se coma de lujo… tiene su recompensa.

El 19 Bar Bistró -19BB para los amigos- tiene los pilares estructurales bien ubicados, y no me refiero únicamente a los que podemos observar en las fotografías, sino a sus eficaces cimientos gastronómicos… Saúl Sanz y Elena Ursu, reconocidos cocineros por su labor en Treze -uno de nuestros 5 Cucharetes fetiche-, han conseguido transferir sus sabrosos conocimientos hacia una idea más informal sin perder un solo ápice de calidad. Elena se hará cargo de los fogones del 19 Bar Bistró mientras que Saúl mantendrá Treze al nivel al que nos tiene acostumbrados desde hace ya unos años. Una pareja que divide sus fuerzas para ofrecer juntos todo lo que podríamos esperar como comensales: que sea cual sea el presupuesto de nuestra cartera a la hora de salir a cenar… ¡Podamos disfrutar como nunca de los placeres gastronómicos que preparan los dos! Si nos queremos dar un lujo en una ocasión especial, vamos al Restaurante Treze, y si nos queremos dar un lujo a diario… ¡19 Bar Bistró Power!

Como podéis apreciar en las imágenes, la iluminación que baña el 19 Bar Bistró es de lo más saludable: ¡Confortable es poco! Diferentes chorros de luz irradian en todas direcciones para que el cruce de sombras pinte las paredes a gusto.

La tarima -de aspecto rústico- viste un espacio moderno y desenfadado en el que destacan sus taburetes anarajandos, altura ideal para disfrutar de tostas y raciones en la zona de barra. Podemos optar tanto por mesas altas como bajas, todo depende de lo que necesitemos ese respaldo que tanto se echa de menos después de una larga caminata de compras por la zona o de haber estado horas pateando la ciudad descubriendo sus innumerables rincones. ¡El 19 Bar Bistró está muy cerquita de la Plaza de España y de la Plaza de los Cubos de la calle Princesa!

Acercándonos a la barra observamos cómo nos saluda un batallón de Ginebras Premiun: ¡19 referencias! ¿Cuántas si no iba a haber en el 19 Bar Bistró? 5th Fire, BrockMans, G’ Vine, Hendrick’s, Gin Mare, Fifty Pounds, Martin Miller’s, Citadelle, Bulldog, The London Nº1, Mombasa y muchas más… Destacando “de la colección” la exclusiva Monkey 47 -que se presenta en envases de únicamente medio litro y no es fácil de encontrar- y la destilada de raíces gallegas Nordés: ¡Que me encantó! ¡Si es que los gallegos somos la h…! ¿Ya os imagináis como terminó la cena no?

Ya sabéis todos que “meigas… ¡habelas hailas!”, mujeres veleidosas a las que se le atribuyen pactos con el diablo que les dota de poderes excepcionales, y alguna -de las buenas, que las hay buenas y malas, no como las brujas- debe haber hecho migas con el equipo del 19 Bar Bistró, porque también la cerveza tira hacia tierras gallegas: Un renovado grifo de Estrella Galicia preside la barra y es flanqueado por las verdaderas “estrellas” de la marca, pues podemos disfrutar tanto de una sabrosa 1906 Reserva Especial como de una curiosa 1906 Red Vintage con el nada desdeñable 8% de alcohol. ¡Me encanta esta cerveza!

Mientras Ninillas, Sara y yo esperábamos por el resto de comensales -6 habíamos quedado para cenar esa noche- cayeron unas tapas en la zona de barra. Fijaos qué buena pinta tiene la Tosta de jamón de wagyu con salmorejo -mejor sabía todavía-, y nada tiene que envidiarle la Tosta de huevo de codorniz con sobrasada ibérica. Hay más tostas para elegir en carta -aparte de las que se hacen cada día según mercado-, todas ellas a 2 € la unidad; y también podemos optar por Conservas caseras -a 3 €- y por una buena lista de medias raciones que se mueven entre los 4 y los 5 €. ¡Geniales los precios del 19 Bar Bistró!

Además, las cañas están al mejor precio de todo el barrio: ¡A 1,30 €! Cuando es misión imposible encontrarlas a menos de 1,50 € por la zona. Incluso la Coca-Cola -como podéis apreciar en la sección de Ninillas- es de 350 ml. ¡la grande, grande! Para que nadie se quede con las ganas de necesitar ese poquito más que siempre nos falta.

Bajando las escaleras llegamos al salón comedor del 19 Bar Bistró. Un espacio para 20 cubiertos que dispone de mesas diseñadas inicialmente tanto para parejas como para grupos de 4, aunque pueden modificar su situación si un grupo de más comensales así lo requiere sin problema alguno. Los cuadros que decoran el local conjugan una atmósfera plenamente relajante, sobre todo éste de piedras redondas sobre el agua que consigue que la bajada por las escaleras tenga mayor amplitud y disfrute de una dimensión infinita.

Una vista completa del salón del 19 Bar Bistró -como la fotografía que os muestro a continuación- resulta más atractiva si cabe gracias al seductor biombo que diligentemente separa la escalera del comedor. ¡En esa mesa del fondo cenamos los 6 cucharetes esa noche! Los tonos crudos y cálidos del conjunto transmiten al espacio un clima acogedor y placentero.

Tan sólo los mantelitos individuales de colores -azules, naranjas y negros- rompen la cortesía del sistema, otorgándole pinceladas desenfadadas a un espacio que no quiere ser únicamente etiquetado como restaurante, si no que desea abrir sus puertas a todo aquel que se acerque a los Cines Renoir (prácticamente enfrente del 19 Bar Bistró, en la C/ Martín de los Heros, 12) a ver una película, ofreciéndole -antes o después de la misma- una cena a base de generosas raciones, o una sabrosa hamburguesa de calidad que pueda satisfacer su apetito. Nunca está de más conocer un lugar que merece la pena, en el que si vas con prisa te atienden con rapidez y destreza y, si vas con tiempo, no te echan del mismo. ¡En el 19BB saben cuidar a sus clientes!

Incluso disponen de un comedor privado con cabida para 16 comensales -al que se accede desde el salón inferior- que resulta perfecto tanto para la celebración de un cumpleaños como para una reunión de amigos en total intimidad y, de ese modo, poder pasarse un pelín de la raya sin molestar al resto de clientes del local. ¡Que nos conocemos!

El 19 Bar Bistró tiene Menús de Grupo a partir de 15 € por persona –además os lo hacen a medida-. Con esos precios… ¡Mucha vida le auguro a ese salón privado! Difícilmente lo encontraremos disponible si no lo reservamos con tiempo suficiente…

Y ahora viene la mejor parte… ¡La de hincarle el diente a su cocina! Entrante a entrante, plato a plato, postre a postre… Allí estábamos Ninillas, FlashBack, Sara, Roberto, Blanca y yo, seis comensales dispuestos a cucharetear hasta la última vianda del 19 Bar Bistró. Sabiendo de antemano que este local era el hermano pequeño de Treze, y recordando nuestra inolvidable experiencia en su hermano mayor, no teníamos duda alguna de que la noche prometía. ¡Íbamos a cenar de lujo a unos precios imbatibles! Recuerdo ahora el anuncio… “La calidad no es cara”, eslogan perfecto para este pequeño local madrileño.

Los fogones del 19 Bar Bistró ofrecen una cocina tradicional totalmente actualizada, cuidando al máximo la calidad de las materias primas, no hay más que comenzar a usar los cubiertos -pidas lo que pidas- para comprobarlo en primera persona. Mantienen los mismos precios de su carta tanto en la zona de barra como en la sala, y es que cuando tienes precios imbatibles difícilmente puedes batirlos tú mismo, y la mejor parte nos la llevamos nosotros, los comensales, que nos aprovechamos de ello.

Además, de la mayoría de las entradas de su carta, puedes optar por medias raciones -a la mitad de precio-, detalle estupendo para poder compartir más platos y variar el “colorido gastronómico” de la mesa y, por supuesto, del paladar.

La carta de vinos del 19 Bar Bistró es corta pero cuidadosamente seleccionada. Únicamente 21 referencias recorren 13 denominaciones de origen entres blancos, rosados, tintos y espumosos. El precio por botella es de lo más ajustado -una media de 13 € en toda la carta es un lujo para este tipo de vinos- y además se pueden ordenar por copas.

Nosotros comenzamos con un tinto Honoro Vera 2012 con Denominación de Origen Calatayud. Un garnacha elegante y concentrado que encandiló nuestros paladares, con el aliciente de los únicamente 14 € que costó la botella. Siempre fui fan de este tipo de uva tardía, y está visto que las cepas viejas de estas regiones pedregosas y áridas desarrollan perfectamente su trabajo en la parte más alta de las laderas. ¡Gran vino! Me ha gustado hasta su etiqueta, en blanco y negro con un detalle en relieve a color…

Tras una cestilla con los panes recién horneados -calentitos, esponjosos y sabrosos-, llegó al a mesa el primero de los entrantes: Chacinas de buey wagyu con pan y tomate. ¿Qué puedo deciros de esta vianda? Delicioso el jamón, delicioso el chorizo y delicioso el salchichón… Ya sé que me repito, pero son las 19:00h en este momento en el que estoy redactando el artículo y me estoy planteando dejarlo para más tarde e irme a picotear a la barra del 19 Bar Bistró con un par de cañas bien fresquitas. ¡Y no va en broma! ¿Qué haríais vosotros?

Nada mejor que un primerísimo plano del jamón de buey wagyu para dejar el teclado ahora mismo. Fijaos en las vetas, con la grasa perfectamente infiltrada; y en ese color característico que muestra su carne cuando está en el punto óptimo de curación. ¡Magnífico jamón! Estoy por darle un bocado ahora mismo a la pantalla…

Aunque no os lo creáis, la fotografía que veis a continuación es de media ración - ¡media ración!- de Ensaladilla rusa a nuestra manera. Vamos, que con esto quiero deciros que las raciones son más que generosas en el 19 Bar Bistró. Es una ensaladilla diferente con un toque muy especial, dado por los trocitos de butifarra alemana y los minúsculos daditos de pepinillo que junto con una pizca de mostaza actualizan un sabor reconocido por todos a otro nivel. ¡A mí me ha encantado! Me parece plato obligado en el 19BB.

No os podéis perder bajo ningún concepto la Burrata con tomate y aliño de olivada y albahaca. ¡Fresquísima! El puré de aceituna negra mezclado con la burrata está para morirse de lo bueno que está. ¿Y qué me decís de la minipipeta de aceite de albahaca? ¡Un toque de lo más chic en un local que maneja un ticket medio de 15-20 €! ¡Nos encantó! Este plato no fue fácil de compartir, porque todos queríamos repetir y coger el último trozo… ¡Tuvimos que sortearlo! ¡Riquísimo!

Os presento en la siguiente fotografía la Ensalada de hojas, arenque marinado, cherrys, mango y cebolla crujiente. Una vianda muy fresca en la que el arenque marinado es el protagonista del plato, resultando sorprendente lo bien que empasta con el punto dulce del mango. Una ensalada generosa y muy bien elaborada -aunque mucha gente crea que una simple ensalada se hace echando cosas en un cuenco, que pruebe ésta y vea si alguna vez ha conseguido algo parecido-… ¡Deliciosa!

¡Madre mía que rica estaba esta tempura! FlashBack y Sara os muestran la Tempura de verduras con mahonesa de lima: Calabacín, pimiento rojo, pimiento verde, coliflor y zanahoria. ¡Espectacular! Estaba tan bien hecha la tempura y tan frescas las verduras que casi se me olvida probarlas con su curiosa mahonesa de lima, que resultó ser un puntazo. ¡Le queda de lujo!

A estas alturas la botella de Honoro Vera iba viento en popa… ¡Buena señal!

A continuación podéis ver media ración de sabrosísimas Croquetas de boletus. Realmente espectaculares: crujientes y esponjosas a la vez. Fijaos en que, si media ración supone 4,50 € de coste, estamos hablando probablemente de uno de los pocos locales en Madrid que no cobre más de 1 € por croqueta. ¡Si es que los precios en el 19 Bar Bistró están como tienen que estar! Acordes a estos tiempos y sin tocar la calidad del producto. ¡Se agradece!

También ordenamos media ración de Buñuelos de bacalao. Menos mal que pedimos medias raciones en la mayoría de los entrantes, porque si llegamos a pedirlas todas completas hubiéramos salido rodando del establecimiento. Los buñuelos estaban muy esponjosos y perfectos de punto, con ese meticuloso toque salado que el bacalao borda cuando está bien controlado. De todos modos se terminaron antes las croquetas, que sorprendieron todavía más que los buñuelos a todos los integrantes de la mesa.

Para los platos principales, cambiamos de vino -a esos precios nos daban ganas de probar varios-, por lo que optamos por un tinto Juan Gil 4 de la Denominación de Origen Jumilla. Más complejo que el anterior pero a su vez equilibrado. Un vino de 2012 con 4 meses en barrica que le confieren ligeros recuerdos de madera. División de opiniones al 50% en la mesa sobre qué botella estaba mejor, yo personalmente me quedo con el primero.

Riquísimo este Risotto de setas y parmesano. Se nota sobremanera la magnífica mano de Treze detrás de la cocina del 19 Bar Bistró: Un arroz en su punto con una textura sublime. Simplemente hay que probarlo para darse cuenta de que por mucho que practiquemos “risotteando” en casa, no conseguiremos ni una aproximación. Todo un lujo disfrutar de estas maravillas cuidadosamente elaboradas con los precios del 19BB.

El plato de Raviolis de pasta fresca rellena de burrata y boletus con salsa de champiñón que os enseña Sara representó una las mejores viandas de la noche. ¡Cómo estaba esa pasta! ¡Increíble! Y es que la calidad de la burrata del 19 Bar Bistró ya la había ensalzado en los entrantes, pero con este plato y su excelente fusión de sabores con los boletus, sube de nivel. Un sabor para recordar, sin duda.

Fantástico el Bacalao confitado con pisto y salsa de ajo asado. Excelente materia prima con una salsa perfecta para la ocasión. Una pieza al punto de sal que vio recorrer los tenedores de todos los asistentes hasta que no quedó ni pizca de pisto en el plato. Por mi parte no habría compartido este plato, me lo quedaría para mí solo. ¡Pero todos querían probarlo!

Roberto se decantó por las Carrilleras de ibérico estofadas sobre puré trufado. Simplemente con leer el nombre tan detallado del plato seguramente os pondréis a salivar. ¡Y no es para menos! El puré trufado de la guarnición estaba a la altura de las carrilleras, tremendamente tiernas, aunque quizás eclipsadas en mi opinión por el bacalao anterior. ¡Cuestión de gustos!

Pedimos también una Hamburguesa MAC19 con carne de buey wagyu, que viene acompañada de ensalada, cebolla caramelizada, cebolla crujiente y queso brie, además de unas viciosas patatas fritas caseras. Nada más y nada menos que 180 gr. reales de carne (hay sitios que presumen de 250 gr. y son más pequeñas, con eso os digo todo) al punto.

Las hamburguesas del 19 Bar Bistró son, como os comentaba al principio, perfectas para esas noches de película en las que visitemos los Cines Renoir de la Plaza de España. ¡Me lo apunto yo mismo en mi agenda!

A pesar de que íbamos 6 personas a cucharetear el 19 Bar Bistró esa noche, habíamos pedido demasiado, como suele suceder en las cenas de Cucharete… ¡Si es que queremos probarlo todo! Y nos quedó únicamente hueco para un par de postres caseros de la carta.

La ¡Pasión chocolatera! Mousse de choco blanco, brownie y helado la pedimos porque, al igual que os hubiese pasado a vosotros, nada más ver el nombre escrito no pudimos resistirnos. El toque de canela en el mousse, sensacional. El brownie… divino, de los mejores que he probado en mi vida, que han sido docenas y docenas… La bolita de helado, a juego. ¡Exquisito y obligado este postre en el 19BB!

También despertó nuestra atención el Tatín de manzana con helado de vainilla. Como podéis observar en la siguiente fotografía no es un tatín propiamente dicho, digamos que está desestructurado -eso nos explicó Juan, el camarero-. El helado riquísimo, francamente cremoso, y unido a la preparación de los daditos de manzana en cada bocado, se hacía más interesante.

Para terminar la velada en el 19 Bar Bistró pedimos unos Tés -uno verde y otro negro- y unos Cafés. Los tés son de la firma Montecelio y los cafés de Stracto. ¡A juego con el resto de la cena! ¡Sobresalientes! -El capuccino, que fue el mío, estaba genial. Y de los tés pude escuchar calificativos similares en la mesa-.

Una vez que subimos las escaleras, dispuestos a llamar a un taxi para devolvernos a nuestras casas sanos y salvos -pues habíamos disfrutado de buenos vinos-, las Ginebras Premiun de la barra del 19 Bar Bistró nos sedujeron con sus cantos cual sirenas: un agradable y sensual susurro atravesaba nuestros oídos con el aliciente de… “si total no tenéis que conducir…”

Cuatro de nosotros caímos en la perdición del canto embrujador de las bayas de enebro destiladas, y en un pispás acabaron en nuestras manos unas copas: Roberto no se lo pensó dos veces y su elección fue una Caipiroska de Fresa -¡cargadísima de fresas!-, FlashBack se decantó por un Mojito -magistralmente preparado-, Ninillas fiel como siempre a su G’ Vine Floraison aromatizada en este caso con lima y enebro.

Los precios de las copas en el 19 Bar Bistró son insuperables. ¡Las Ginebras Premium en copa de balón están todas a 9 €! Excepto un par de ellas más exclusivas todavía -como la Monkey 47- que están a 10 €. Y los combinados, mojitos, caipiroskas y demás… ¡a 6 €!

Por mi parte, me salí del guión y me fui directo a por la ginebra gallega que había descubierto nada más entrar en el local. Como no podía ser de otro modo, mi “gin-tonic enxebre” resultó ser de Nordés Atlantic Galician Gin. La botella es preciosa, señalizando las tierras gallegas en el mapamundi de manera inequívoca y precisa.

Esta peculiar Ginebra Premiun -100% gallega- está destilada a partir de vino albariño -no de orujo como cabría esperar- y una selección de botánicos silvestres presentes en Galicia, como la hierbaluisa, el laurel, el tojo, el eucalipto e incluso la característica y exclusiva hierba caralleira -a la que se le atribuyen efectos similares a los de la viagra desde antaño-. ¡Aprovechaos! Un destilado con auténtico carácter atlántico y gallego que seduce con sabores típicos de las tierras gallegas combinados con toques de salicornia -planta marina con profundo sabor a mar-, cáscara de limón, junípero, cardamomo, quinina, jengibre, hibisco, regaliz, té… ¡Diferente a todas las Ginebras Premium que hayas probado anteriormente!

Magnífica la posdata en la botella de Nordés: “Recomendamos un consumo responsable, siempre en buena compañía, observando, si es posible, cosas minúsculas, como el vuelo de una mariquita”. Yo le añadiría: “Borrachiños perdidos…”

¡Viva el Nordés! Y… ¡Viva el 19 Bar Bistró! Un lugar que deja huella en nuestra agenda cucharetil particular, en la que destacamos con fluorescete amarillo aquellos locales que ofrecen una apuesta gastronómica honesta a un precio más que justo, ecuación que se cumple a rajatabla en el 19BB.

Ninillas: ¡Hola de nuevo! Sí, ya sé, hacía muchos meses que no nos dejábamos ver, pero a veces en la vida hay etapas muy difíciles que sencillamente hay que pasar, y tanto Rayo como yo no hemos podido cumplir como buenos cuchareteros. Ojalá de aquí en adelante todo vaya bien y podamos disfrutar de muchas cenas para poder dar debida cuenta de ellas.

Hecho este breve inciso, empezaré por deciros que nuestro regreso lo hemos hecho como sólo un cucharete podría hacerlo: “Por la puerta grande”. Que ¿por qué digo esto? Pues muy sencillo, porque abrimos el chiringuito con un local que va que ni “pintao” para los tiempos que corren. Es decir, un “tres bes” en toda regla: Bueno, Bonito y Barato. Al que además yo añadiría la “C” de céntrico. No se puede pedir más. ¿Que no me creéis? Sólo tenéis que continuar leyendo y veréis que lo que digo es cierto.

El 19 Bar Bistró, así se llama el susodicho, está ubicado muy cerca de la Plaza de España, concretamente en la Calle Martín de los Heros número 19. ¿Pilláis por qué se llama así? Tal vez, sólo con el nombre pueda parecer un local pretencioso, pero nada más lejos de la realidad. Es, por el contrario, un espacio sencillo y muy enfocado al picoteo y a las cenas con un toque informal.

Nada más pasar el umbral de su puerta nos encontramos con su zona de barra, donde unas mesas altas con vistosos taburetes de color naranja y alguna que otra mesa baja invitan a cualquiera que tenga a bien visitarlos a tomar unas tapitas, unas tostas o cualquiera de las deliciosas raciones que aparecen en su carta. Un espacio de tonos neutros donde únicamente resaltan algún que otro cuadro de colores llamativos.

Por supuesto, siendo una zona de tapeo y pica-pica, no podía faltar un grifo de cerveza, en este caso de Estrella Galicia, que sirva no sólo para aliviar la sed sino también como acompañante de las viandas que allí se disfrutan. Debo añadir que las cañas están a un precio muy ajustado para la zona, 1,30 € para la normal y 1,90 € para la doble. ¡Ah! ¡Muy importante¡ Están muy bien tiradas, con esa espumita que resiste a los tragos hasta acabar con ella. De ello se encarga Costel, el simpático camarero que atiende tras la barra, quien además nos comentó que los fines de semana también se sirven cañitas sin alcohol de gazpacho de fresa, de gazpacho tradicional y de ajo blanco a 1,30 €. ¡Habrá que ir a probarlas!

Pero si la cerveza es importante, no lo es menos la variedad de ginebras de primeras marcas que lucen en sus estanterías. Hasta 19 referencias podemos encontrar en el 19 Bar Bistró. Vamos, que el “19″ es un número importante para este céntrico local madrileño. Pero no sólo es la variedad, también es importantísimo cómo las sirven, aunque eso prefiero dejarlo para el final… No me gusta adelantar acontecimientos.

Para la cena de aquella noche nos reunimos seis comensales y, como podéis imaginar, no todos llegaron a su hora. Los primeros en llegar fuimos Rayo, Sara y yo y, para aliviar la espera, decidimos ir dando buena cuenta de sus tostas. En el 19 Bar Bistró, la carta de la zona de barra es la misma que la del restaurante, situado una planta más abajo. Con unas pequeñas diferencias consistentes en la inclusión de “Conservas Caseras” y “Tostas”, más indicadas para un tapeo casual. Por lo demás, todo es absolutamente igual, incluido el hecho de que se pueden pedir medias raciones, opción tremendamente apropiada si se desea probar más platos. El precio de las medias raciones, pues muy lógico, justamente la mitad que el de la ración completa.

Sara y yo nos pedimos una Coca-cola, que en el 19 Bar Bistró es de 350 ml -así da gusto- y una cañita. Y para picotear… Dos tostas -a 2 €- de lo más originales. Una era de Huevos de codorniz con sobrasada ibérica y otra de Jamón de wagyu con salmorejo. No sabría con cuál de las dos quedarme la verdad, porque ambas estaban de muerte, y con mi cervecita eran el complemento perfecto.

Pero sigamos nuestro recorrido por el 19 Bar Bistró. Si la planta situada a pie de calle es la destinada a zona de barra, para acceder a la zona de sala hay que bajar unas escaleras que culminan con un relajante cuadro donde un camino de piedras sobre el mar nos conducen directamente al horizonte, en este caso un horizonte repleto de aromas y sabores procedentes de los platos que este pequeño restaurante nos ofrece.

Ya en la zona de sala propiamente dicha, nada resalta en demasía, y sus 20 cubiertos distribuidos en mesas modulares de dos completan el espacio. Y es que, según nos comentaron, el restaurante lleva abierto cerca de 2 meses y están decorándolo poco a poco.

Resalta, eso sí, un original biombo que da colorido y cierta personalidad a la estancia al tiempo que oculta las escaleras a los comensales. Se trata, en definitiva, de un espacio sencillo y nada estridente donde prima la calidez que otorga el color de sus paredes y el suelo de tarima.

Las mesas aparecen vestidas con mantelitos individuales de colores. Una vajilla y una cristalería muy apropiadas completan el conjunto. Como podéis ver, aquí no hay manteles ni servilletas de tela, pero no seré yo quién se lo critique. Nos encontramos en un restaurante con una horquilla de precios de lo más ajustada y, desde luego, no es aquí donde uno debe pedir esas minucias.

Una puerta en el lateral de la sala nos da acceso a un privado con capacidad para 16 comensales. Esta zona es ideal para celebrar un cumpleaños o una reunión de amigos donde se necesita más intimidad. En realidad, es perfecta para cualquier evento donde la discreción sea un requisito imprescindible.

¡Uff! Hablando, hablando, o mejor dicho, escribiendo, escribiendo, se me había olvidado ya que es la hora de hincar el diente. El 19 Bar Bistró nos presenta una cocina tradicional española con pequeños toques creativos. Su carta está estructurada en tres sencillas secciones. Por un lado “Para empezar” donde podemos encontrar entrantes fríos y calientes, de los cuales muchos de ellos podemos solicitar que nos sirvan medias raciones. Continuamos con “Carnes y pescados” que suponen los platos principales y, para finalizar, “Dulces” que, como ya imaginaréis, son los postres. No se trata de una carta extensa, pero desde luego está muy completa y es de lo más variada. Y, por supuesto, es capaz de satisfacer las inquietudes de cualquier paladar que se precie, porque lo mismo te puedes pedir una hamburguesa que un bacalao confitado. Lo dicho, de todo un poco, y para todos los gustos. Además, de Martes a Viernes a mediodía ofrecen un Menú del día a 10 €. Y, por supuesto, si lo que necesitas es un Menú de grupo… no lo dudes, éste es tu sitio. A partir de 15 €, elaboran un menú a tu medida.

Y hasta aquí, sería un restaurante de nueva apertura en Madrid sin más, pero lo cierto es que, a pesar de su juventud, el 19 Bar Bistró ya tiene historia o, al menos, historia familiar, porque este nuevo local es nada más y nada menos que el hermano menor del Restaurante Treze, todo un CINCO CUCHARETES y, por supuesto, al igual que en Treze, son Saúl Sanz y su esposa Elena Ursu quienes están tras sus fogones. Así que, teniendo en cuenta que el disfrute en la mesa de su hermano mayor fue máximo, la expectación que teníamos sentados a la mesa del 19 Bar Bistró iba “in crescendo” a cada segundo que pasaba.

Para la cena de aquel día nos reunimos al final 6 amigos: Rayo, Roberto, FlashBack, Sara, Blanca -que no quiso salir en las fotografías- y yo. Compartimos tanto entrantes como principales y nos dejamos aconsejar por Juan, el camarero, quién muy amablemente nos fue guiando en nuestra visita gastronómica.

Abrimos nuestro desfile de viandas con estas Chacinas de buey wagyu con pan y tomate que os muestran Sara y FlashBack.

Jamón, salchichón y chorizo perfectamente curados y con un sabor… ¡Uhmmmmm! ¡Qué sabor! Sólo hay que echar un vistazo al primer plano del jamón de buey wagyu para apreciar esa grasa infiltrada tan característica y, a partir de ahí, imaginarse lo rico que estaba.

Roberto os presenta 1/2 ración de Ensaladilla rusa a nuestra manera. Nuestra manera, o mejor dicho, “su manera” era muy particular. Se trataba de una ensaladilla tradicional, pero con tres toques distintivos. Por un lado llevaba una especie de jamón de york que resultó ser butifarra alemana, por otro lado pepinillos muy finamente picados y, para finalizar, mostaza. El resultado… Pues sencillamente una ensaladilla rusa de sobresaliente. ¡Qué cosa tan rica! En serio, es un imprescindible del 19 Bar Bistró. La pena es que sólo pedimos 1/2 ración, pero claro… queríamos probar más cosas.

La Burrata con tomate y aliño de olivada y albahaca fue todo un descubrimiento. Sobre la burrata se disponía un poquito de aceituna negra para luego regarla con el aliño que iba en el dispensador -lo apreciaréis mejor en la fotografía que os muestra Rayo-. El resultado era un bocado fresco, cremoso y pleno de sabor. Y, como ya os podéis imaginar, otro imprescindible.

A continuación, un primer plano de la Ensalada de hojas, arenque marinado, cherrys, mango y cebolla crujiente, un entrante tremendamente aconsejable no sólo por el aliño que le sentaba a las mil maravillas, sino también por el matrimonio tan bien avenido que constituía el dulce del mango con el arenque.

Con la ensalada terminamos nuestro apartado de fríos y pasamos a los calientes, comenzando con la Tempura de verduras con mahonesa de lima. Simplemente con la tempura de verduras el plato estaba acabado, porque la tempura tenía un punto perfecto, pero es que además llevaba la mahonesa de lima que a mí personalmente me encantó, aunque ya os digo que aún sin mahonesa el resultado no habría variado.

En la siguiente fotografía os muestro 1/2 ración de Croquetas de boletus. Estaban bien fritas, cremosas, nada aceitosas y plenas de sabor. Conclusión, estas croquetas nos conquistaron y por eso las paso directamente a mi lista de imprescindibles.

Junto a las croquetas llegó otra 1/2 ración de Buñuelos de bacalao, que también me estuvieron muy ricos, pero para ser sincera… Si tengo que elegir entre croquetas y buñuelos… Me quedo con las croquetas. Será que soy más croquetera que buñuelera. ¡Uff! ¡Qué raro ha sonado eso! En fin, que si os decidís por los buñuelos, no vais a errar en absoluto.

Acompañamos los entrantes con un tinto Honoro Vera 2012 con Denominación de Origen Calatayud que, curiosamente, fue el mismo vino que se sirvió este año en la cena de gala de los Oscar. Bueno… el mismo no, fue su hermano mayor el Honoro Vera 2011, pero casi. El caso es que nos pareció un vino muy interesante y a un precio -14 €- muy ajustado.

Los platos principales decidimos regarlos con un Juan Gil 4 de la Denominación de Origen Jumilla, con un precio igualmente asequible -14€-, pero lo cierto es que si bien con el anterior vino todos estuvimos de acuerdo en que era muy correcto con éste no hubo consenso. A mí personalmente, me gustó más el primero.

FlashBack os presenta el Risotto de setas y parmesano. Era delicioso, perfecto de punto, cremoso y al mismo tiempo ligeramente crujiente en el centro, y con un sabor… Sí, así es, otro imprescindible del 19 Bar Bistró.

Y qué os puedo contar de estos Raviolis de pasta fresca rellena de burrata y boletus con salsa de champiñón… Pues que estaban para chuparse los dedos, tanto la pasta fresca como la salsa. Otro acierto seguro, aunque supongo que ya os habréis dado cuenta de que en el 19 Bar Bistró uno no se equivoca nunca.

La responsable de que en nuestra comanda estuviera el Bacalao confitado con pisto y salsa de ajo asado fui yo, y bien que me lo agradecieron el resto, porque estaba exquisito, perfecto de punto y con una salsa de ajo que le iba como anillo al dedo. Sí, así es, otro imprescindible.

Las Carrilleras de ibérico estofadas sobre puré trufado también fueron una buena elección, aunque ya me conocéis, lo que yo tengo con el bacalao es una relación tan estrecha que es muy difícil que otro plato le quite protagonismo.

El último plato en hacer acto de presencia fue la “Hamburguesa”. En el 19 Bar Bistró se puede elegir de ternera 100% o de buey wagyu, que es la que elegimos nosotros, una auténtica Hamburguesa MAC 19 con ensalada, cebolla caramelizada y crujiente y queso brie, con carne de buey wagyu. Estaba buenísima, la carne estaba en su punto y era de gran calidad, así que lo único que puedo añadir es que si sois hamburgueseros el 19 Bar Bistró también es vuestro sitio.

Terminados los principales, estuvimos tentados de pasar directamente al café saltándonos el postre, pero claro… Juan, el camarero, nos dijo las palabras mágicas: “Postres caseros”, y no tuvimos más remedio que hacer un esfuerzo y por lo menos probarlos. Sólo pedimos dos porque, la verdad, es que les no hicimos caso y pedimos demasiada comida.

El primer postre os lo muestro a continuación, se llamaba ¡Pasión chocolatera! y se trataba de Mousse de chocolate blanco con brownie y helado de chocolate. Estaba buenísimo, no soy de brownies porque normalmente suelen ser bastante mazacotes, pero éste estaba súperesponjoso, y la mousse… ¡Ay la mousse! Vamos que es un postre imprescindible.

El siguiente postre a mí me desconcertó totalmente, es cierto que en el 19 Bar Bistró todos los platos tienen un toque, como “a su manera”, pero la Tatín de manzana con helado de vainilla… Sinceramente, no me la esperaba así. Y es que la tatín del 19 Bar Bistró ¡viene desestructurada! Que en ¿qué nos afecta?, pues en nada, porque lo cierto es que se come sin sentir y nos vino fabulosamente bien para hacer la digestión, ya que se trata de un postre bastante ligero.

La sobremesa la acompañamos de cafés con leche, solos, algún capuchino, té verde y té negro, todos a 1,20 €. El té viene muy bien servido en una taza muy cuca con el té suelto en un recipiente que, una vez ha soltado su esencia, se saca y encaja perfectamente en la tapa de la taza.

Os doy algún que otro precio orientativo y continuamos con las copas. Por ejemplo, el pan: 1 €/persona y, el agua -botella de 1/2 litro-, 1,50 €.

Tras una animada conversación el equipo quedó algo mermado, ya que Blanca y Sara se despidieron de nosotros, pero los que quedamos dimos buena cuenta de la coctelería. En el 19 Bar Bistró además de la selección de 19 ginebras Premium también se ofrecen Whiskies, Rones, combinados y cócteles. En un primerísimo plano os presento al Mojito del 19 Bar Bistró, que estaba que se salía de rico. ¡Madre mía! ¡Qué mano tiene Costel para los cócteles! Su precio, 6 €, al igual que el resto de cócteles.

El segundo cóctel que pedimos fue uno de temporada, se trataba de una Caipiroska de fresa. Que ¿por qué era de temporada? Pues en la imagen se aprecia bastante bien, pero por si acaso os los explico. ¡La caipiroska se elabora con fresas naturales! Sí, habéis oido bien. Claro, el resultado es espectacular y merece la pena probarlo.

FlashBack y yo brindamos con el Mojito -6 €- y con una G’ Vine Floraison aromatizada con lima y enebro -10 €- acompañada de Fever-Tree y así, entre sorbo y sorbo, fueron pasando los minutos y con ellos llegó la hora de la retirada.

En la sección de Rayo podéis leer lo bien que se lo pasó con la Nordés Atlantic Galician Gin. Si es que estos gallegos…

Así fue y así os he contado… Nuestra visita al 19 Bar Bistró, un restaurante de nueva apertura en Madrid al que tenía ganas de hincarle el diente pues, no en vano, es el hermano pequeño del Restaurante Treze, ¡Todo un cinco cucharetes!

¿Las impresiones? Uff… No pudieron ser más positivas, fui con unas expectativas y éstas se vieron superadas con creces. Me encontré con un local joven, pero sin vicios, me dio la impresión de que tuviera un rodaje de años. El servicio, tanto en barra como en sala, súperagradable y servicial. En cuanto a su cocina… ¡qué puedo añadir de su cocina! Nos presentan platos tradicionales con toques actuales donde prima la calidad de sus materias primas y la elaboración de las mismas y, todo ello, a unos precios tremendamente ajustados. En definitiva, el 19 Bar Bistró es el hermano pequeño de Treze sí, pero no sólo camina por sí solo, sino que corre y auguro que nos va a dar muchas alegrías, porque locales desenfadados, informales y esta con personalidad gastronómica hay poquitos en Madrid, y menos aún con estos precios. Por si no os ha quedado claro, yo pienso volver en breve.

Cucharete: ¡No hay nada mejor que prácticamente estrenar un local de nueva apertura en Madrid! El 19 Bar Bistró de la Calle Martín de los Heros nace de la mano de Treze -su hermano mayor-, por lo que la excelente calidad de sus materias primas y la sabrosa elaboración de las mismas con el buen hacer de Saúl y Elena está asegurada de antemano. ¡No os vayáis sin probar la hamburguesa MAC19 de buey de wagyu! ¡Merece la pena! Y si únicamente os pasáis a tomar una caña, que sepáis que tienen el mejor precio de todo el barrio. ¡1,30 €! Mi equipo cenó por 21 €/persona. Seis personas con 9 platos -entre entrantes y principales- más 3 medias raciones, 2 postres y 2 botellas de agua. A lo que tendríamos que añadir 2 botellas de vino -a 14 €- y los cafés y tés -a 1,20 €-. Las cañas en la barra fueron a 1,30 € y las tostas a 2 €. Los cócteles del final a 6 € y las ginebras Premium a 9 € -10 € la G’ Vine-.

Su céntrica situación, al lado de los Cines Renoir de la Plaza de España. La generosidad de sus raciones. El ajustado precio de sus referencias de vino -incluso por copas-. Una horquilla de precios pensada para todos los bolsillos. La indiscutible calidad de sus materias primas y la cuidada elaboración de las mismas. Su destacable relación calidad/cantidad/precio en toda la carta. Su honestidad. Sus hamburguesas MAC19. Sus cócteles. El amable, cercano y ágil trato del servicio en todo momento. Aceptan todos los tickets restaurante.

Nada significativo.

 

3,9